Museo Amparo

Personas y humanismo

30 de septiembre del 2021

San Agustin, El libre albedrio

Reflexion

Seré muy sincera, tuve que leerlo dos veces para poder entender bien por donde se guiaba la conversación, parecía un trabalenguas, pero uno bastante interesante. Me pareció realmente irreal como se fue expandiendo el tema y como se fue cuestionando y respondiendo las preguntas al mismo tiempo. La conversación empieza por Evodio preguntando a Agustin si el mal fue originado por Dios y he aquí donde empieza, diría yo, el laberinto del bien y mal.

Me llamó la atención como Agustin, para antes de responderle a Evodio, desglose una serie de preguntas a cuestionarse antes de responder dicha cosa. Para poder saber de donde proviene o cómo es que sucede, lo primero que hay que cuestionarse según agustín es, ¿Que es el mal para mi?. Muchos distinguen entre el bien y mal a través de las “leyes” o lo que está inscrito como “incorrecto” y no debe de ser así. Esto va más allá, tiene que ver con la inteligencia, el hombre por naturaleza y como instinto es capaz de distinguir aquello del bien y del mal. Agustin comenta “El experimentar no siempre es un bien, como, por ejemplo, experimentar suplicios. Pero la que propia y verdaderamente llamamos ciencia, porque se adquiere por la razón y la inteligencia, ¿cómo puede ser mala?”

En la sección de “Todos desean ser felices, Por que tan pocos lo consiguen? De la lectura se comenta: “Cuando decimos que los hombres son desgraciados por su propia voluntad, no queremos significar que quieran ser desgraciados, sino que son de una voluntad tal, que a ella sigue necesariamente la desgracia, aun sin buscarla ellos. Por tanto, no hay contradicción entre el argumento anterior y el que todos los hombres desean ser felices y no pueden serlo; porque en realidad no todos quieren vivir rectamente, y es a esta voluntad de vivir rectamente a la que se debe la vida feliz. Al nacer fuimos dotados con el don de la voluntad, si te pones a pensarlo, realmente toda persona es capaz de hacer todo lo que quiera en este mundo y en este parrado, agustín explica que todo tiene consecuencias, y a pesar de ser libres de voluntad, si terminamos haciendo lo que queremos vivimos una vida infeliz, por que no la cumplimos rectamente como queremos.

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