“México 1968: Los orígenes de la transición”

LOAEZA, Soledad (1989). “México 1968: Los orígenes de la transición”

• Nació en la ciudad de México en 1950.
• Es una académica investigadora y escritora mexicana.
• Ha impartido clases en el colegio de México, la Universidad Iberoamericana y la Universidad autónoma metropolitana campus Iztapalapa.
• Es investigador y profesor en el centro de estudios internacionales del colegio de México.
• Ha sido investigador o visitante en el Instituto de Estudios Políticos de París
• Es investigadora nivel III por el Sistema Nacional de Investigadores.
• Es Profesora Emérita por el Colegio de México.
• Ha colaborado como editorialista en el periódico “la Jornada”.
• Ha escrito prólogos y reseñas para más de 30 obras.

• Respecto a este lamentable suceso, Octavio Paz comenta: “Lo que ocurrió el 2 de octubre fue simultáneamente la negación de aquello que hemos querido desde la revolución y la afirmación de aquellos que somos después de la conquista”.
• Palabras crudas y desafortunadas que muestran aspectos de nuestra realidad que no quisiéramos aceptar pero que son parte de nosotros como sociedad y que están implícitos en la vida política, y cultural y social del país; como parte de nuestra herencia.
• No se puede poner en duda la influencia del movimiento del 68 sobre los cambios políticos ocurridos en México desde entonces; el suceso continúa conservando importancia por el hecho de haber evidenciado de la forma más cruel el carácter autoritario y despótico de ese entonces al tiempo que defendió (por raro que esto suene) las prácticas democráticas.
• Particularmente lamento no poder estar en clases con los compañeros de la MECPE; sería bueno establecer un debate que gire en torno a las preguntas: “¿Cómo el movimiento del 68 contribuyó al anhelo de lograr la democrática en el país?” y “¿De qué forma este movimiento fue un punto de partida para transitar hacia una sociedad más pacífica?; Sin duda enriqueceríamos nuestro punto de vista en torno a este tema.
• El gobierno de Gustavo Díaz Ordaz perpetró esta acción criminal con miras a llevar adelante modelos de desarrollo capitalistas, intentando demostrar que México era un Estado fuerte, que gozaba de la fidelidad del pópulo. Habría sido vergonzoso que en este México que deseaba “impresionar” existieran conflictos estudiantiles en contra del régimen.
• El movimiento del 68 contribuyó enormemente al desmantelamiento de las formas autoritarias en México, lo cual fue un largo proceso en el que se observó incluso un notable crecimiento económico y una mejor organización política, pues los brillaron de nuevo los preceptos de la Constitución de 1917 que también favorecen condiciones adecuadas para el desarrollo del modelo pluralista.
• En este contexto, la relación entre 1968 y 1988 residiría en que el movimiento estudiantil fue el primer paso hacia la implantación del modelo pluralista y desplazando al corporativismo, dado que su tema central fue la defensa de las garantías individuales cuyo respaldo legal se encuentra en la Constitución.
• Me atrevo a comentar (y esto también debería ser motivo de debate en clase con los asesores y los compañeros de la MECPE) que el movimiento del 68 trajo cambios más significativos que el mismo movimiento de la Revolución, pues aunque todavía hay quienes insisten en la hipótesis oficial de entonces, “de que los estudiantes fueron actores y víctimas de un plan subversivo destinado a destruir el orden establecido”, la mayoría de los análisis y opiniones coinciden en que fue esta una movilización democrática y reformista.
• La organización de la sociedad y la promoción del cambio fueron dos funciones esenciales que el Estado pudo llevar a cabo gracias a los instrumentos que le proporcionaba la Constitución. Ambos objetivos eran parte de un proyecto de modernización que contó con un amplio consenso social, y pudo llevarse a cabo dentro de un sistema de relaciones capitalistas.
• Durante los años 60 el desarrollo económico se atribuyó a la iniciativa privada, el régimen asumía entonces  la responsabilidad  de mantener una estructura  política  adecuada   a una  acumulación    capitalista   eficaz. El movimiento   estudiantil   de  1968 ocurrió  en un contexto  en el que la  participación   del  sector   privado  en  la economía  había   adquirido   tal importancia   que  su disminución  hubiera   podido   comprometer   el crecimiento.
• Este acontecimiento fue un punto de inflexión en la historia de México que nos demostró la realidad del país. El 2 de octubre de 1968 nos definió como nación, ese día aquella parte que yacía oculta en nosotros se hizo visible.

• Desde mi punto de vista, dentro de los efectos positivos que provocó el movimiento del 68, hablando específicamente del ámbito educativo, fue el de fomentar e impulsar cambios sustanciales en todo el proceso y las estructuras educativas, lo cual se tradujo en la formación de una nueva generación de maestros, la mayoría con un mayor sentido de identidad con los diversos grupos sociales de esa época y de la actual.
• A partir de 1968 se vivió una verdadera revolución educativa que años después permitió la apertura de espacios académicos y dio mayor libertad, favoreciendo especialmente al género femenino, permitiéndoles desarrollar diversas actividades profesionales. Esto permitió aprovechar mejor el potencial intelectual de las mujeres.
• También, ocurrió que el papel de los profesores en la Universidad ya no sólo fue por un sueldo sino que después del 68, buscaron el prestigio por impartir una cátedra y por contribuir a la formación de una nueva generación de profesionales.
• El punto anterior es el que encuentro más específicamente relacionado con mi tema de estudio pues está relacionado con la formación continua y con esa actitud de “si yo sé, ayudo a otros a que también sepan”.

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