Porfiriato

El Porfiriato (1877 – 1910)

Batalla por el poder (Raíces del Porfiriato)

Con la caída de Maximiliano, México recuperó la plenitud su soberanía. El Presidente Benito Juárez se dedicó a reorganizar la administración civil y militar, reduciendo las aportaciones monetarias al Ejército.

Insatisfecho con la situación política, el General Porfirio Díaz lanzó el Plan de la Noria el 10 de Octubre de 1871, levantándose en armas contra el gobierno Juarista, pero fracasó. Dicho plan combatía por la “No Reelección”.

El 18 de Julio de 1872, falleció Benito Juárez a causa de un ataque al corazón, Sebastián Lerdo de Tejada asumió la presidencia por Ministerio de Ley. Su gobierno transcurrió sin mayores incidentes hasta que fue depuesto al pretender reelegirse.

El Plan de Tuxtepec, fue lanzado el 10 de Enero de 1876, quienes nombraron a Porfirio Díaz como jefe del movimiento, que tenía como propósito evitar la reelección de Lerdo de Tejada. Porfirio levanto armas contra las fuerzas de Tejeda y estas fueron derrotadas en Tecoac, Sebastián Lerdo de Tejada no tuvo más remedio que renunciar a la Presidencia, la cual fue asumida el 28 de noviembre de 1876 por el General Porfirio Díaz, quien había entrado triunfante a la Capital el 21 del mismo mes.

En el porfiriato, se contemplaban tres etapas:

Primera etapa (1877-1890). Esta etapa se caracterizó como de: construcción, pacificación, unificación, conciliación, negociación y represión. Buscó evitar la concentración de poder, que el pueblo eligiera a sus gobernantes y hasta sus jueces. Enfrentó problemas de gobernabilidad, ya que la constitución no favorecía al ejecutivo, considerando la igualdad de los individuos.

Segunda etapa (entre 1888 y 1890, hasta 1908). Muestra un periodo centralista, autoritario y personalista, tanto de Porfirio, como de los gobernadores de las entidades.

Tercera etapa (los últimos años). Se contempla que las crisis en el nacimiento del siglo XX afectaron la economía, la vida social y cultural y por consiguiente la política en este régimen.

Durante el porfiriato

Al asumir la Presidencia el General Porfirio Díaz se dio a mejorar el Ejército; creo el Cuerpo Especial de Estado Mayor, que tenía como función formar la Carta General de la República, redujo las unidades y las que quedaron las profesionalizó. Creo varios planteles como la Escuela Naval militar, Escuela Militar de Aspirantes, Escuela Militar de Esgrima.

Durante el porfiriato hubo muchos cambios en todos los ámbitos, entre ellos estuvo la incrementación de las vías para el ferrocarril, con diversos propósitos, entre ellos fortalecer el comercio y la comunicación entre diversos estados dentro del país e incluso fuera de este. Incluso, en 1888 se inauguró el ferrocarril México-Guadalajara lo que favoreció la comunicación y el transporte con la capital del país y con ello se promovió el comercio mediante la supresión de las alcabalas.

Durante el porfiriato hubo una estabilidad económica, pues fue gracias a que México mostró una gran apertura con países extranjeros, principalmente: Inglaterra, Estados Unidos de América. Este crecimiento económico no favoreció a todas las regiones del país, era notorio que este crecimiento solo llego a algunas partes del país, como Guadalajara, Monterrey y a la capital del país, era también notorio que las regiones del sur del país eran las que mostraban un mayor atraso.

E incluso se fomento la industrial, la más importante fue la industria textil, ya que tuvo un crecimiento impresionante cuando se introdujo la electricidad, aunque

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