Producción Feudal

INTRODUCCION

El presente trabajo nos muestra como se dió el modo de producción feudal desde sus comienzos en la Europa occidental a su decadencia en el siglo XVII.

El modo de producción feudal o llamado también feudalismo fue tan sólo un sistema el cual se caracterizaba por el hecho en que el dueño de las tierras es decir el señor feudal explotaba al siervo para que este obtuviera provecho de las tierras y así obtener toda la ganancia de ellas por medio del trabajo del siervo.

Nos presenta las distintas etapas en las que este modo de producción tomó forma hasta llegar a su decadencia, dividiéndose así en 3 etapas: La Alta Edad Media (siglo V al X), La Edad Media (XI al XV), y La Baja Edad Media (siglo XV al XVII). Algunos de sus rasgos más característicos se dieron desde sus comienzos; del mismo modo, en los siglos XII, XIII e, incluso XIV, aún perduraban muchas de las costumbres y usos propios del feudalismo.

Asimismo nos muestra la transición por la cual pasó el feudalismo, desde características hasta momentos claves los cuales definió al feudalismo como un gran proceso histórico, y así mostrarnos la gran importancia que tuvo este en la historia.

Por último encontrará un pequeño glosario el cual ayudará a comprender algunas definiciones para mayor comprensión de este modo de producción.

MODO DE PRODUCCION FEUDAL

El Modo de producción es la manera de obtener bienes necesarios para el consumo productivo y personal, pero en el feudalismo es cuando el señor feudal pone a trabajar al siervo en sus tierras y así brindarle el siervo todo lo productivo de las tierras del señor feudal a cambio de protección al siervo y su familia.

Las principales características económicas que permitieron el advenimiento del modo de producción feudal en reemplazo del modo de producción esclavista fueron:

Primero la creación de la gran propiedad de territorios

Segundo la transformación de los productores directos en siervos, dependientes de los señores feudales.

1. La Gran Propiedad Latifundista

“Es un cimiento económico del régimen de producción feudal, se creó debido a que, al disgregarse el régimen esclavista, los diversos tipos de propiedad territorial pasaron a manos de la aristocracia seglar y eclesiástica, que iba feudalizándose, y a la cual pertenecían los jefes de los estados que se formaban, sus allegados, los gobernadores civiles y jefes militares. En determinados casos, las parcelas campesinas pasaron a manos de labradores más pudientes los cuales ampliaron sus tierras a expensas de los vecinos arruinados.”[1]

Dentro de la sociedad feudal, las fuerzas productivas se caracterizaban por la supremacía de la agricultura sobre la industria y, en relación con esto, del campo sobre la ciudad, fenómeno que perduró hasta el fin de la épica feudal.

Consolidado el régimen feudal, progresaron todas las ramas de la agricultura, perfeccionándose los instrumentos de producción y los métodos de cultivo de la tierra.

El mejoramiento de los aperos ejerció influencia decisiva en el avance de las labores agrícolas. Una de las principales manifestaciones de este perfeccionamiento fue la mejor técnica de la fundición y de la elaboración del hierro, que trajo consigo la difusión de diversos tipos de arados y de otros instrumentos de metal. Por entonces se inventó el molino de viento y se perfeccionó el de agua, así como la prensa para la uva y algunos otros dispositivos y mecanismos.

En virtud del progreso de los instrumentos de labor, la economía agrícola se elevó a un nivel superior bajo el feudalismo, se fue imponiendo poco a poco la votación de cultivos, aparecieron nuevas ramas de la horticultura y de la fruticultura, la viticultura y la oleicultura. Se registró un notable auge de la ganadería, particularmente de la cría de caballar, circunstancia esta última vinculada a las actividades militares de los señores feudales.

Tras el desarrollo de la agricultura, empiezan a renacer y a crecer paulatinamente las industrias, al unísono con la agricultura, perfeccionándose los instrumentos de trabajo de los artesanos, mejorando procedimientos de elaboración de las materias primas y se acelera el progreso de especialización de oficios, dándose así las grandes divisiones sociales del trabajo.

Al carácter y al nivel de las fuerzas productivas de la sociedad feudal correspondían las relaciones feudales de producción radicaba en la propiedad privada de los medios de producción.

Las relaciones de propiedad constituían un rasgo muy importante y determinante en la producción, ya que lo que caracterizó al feudalismo fue el predominio de la agricultura sobre la industria debido a que el trabajo no era mecanizado.

Un elemento característico del régimen feudal era el monopolio de los grandes propietarios sobre la tierra; así como los productores directos o sea los siervos, carecían de toda propiedad territorial.

Cada señor feudal recibía la tierra de manos de otro señor feudal siempre y cuando adquiriera determinados compromisos: se comprometía a servirle, a participar en sus campañas bélicas y a ayudarle con los medios pecuniarios si llegaba el caso.

El fraccionamiento político de los estados feudales tiene su origen en la desmembración de la propiedad feudal en los países europeos, como la separación de industrias artesanas de la agricultura fue uno de los momentos cruciales en el desarrollo de las fuerzas productivas durante la época feudal y en la división social del trabajo, por lo cual se crearon las ciudades feudales, en la separación e la ciudad y el campo.

La mayor parte de la tierra, propiedad de los señores feudales se componía por numerosas parcelas que los propietarios otorgaban en usufructo perpetuo a los siervos, lo que permitía a estos mantener su economía en las pequeñas haciendas individuales.

Por consiguiente durante la época feudal el productor no es dueño de la tierra, sino el usuario que se limita a cultivarla.

Paralelamente a la producción feudal también existía la propiedad individual como los son los productos directos, campesinos y artesanos.

Por su parte las “relaciones sociales de producción”[2] imperantes bajo el modo de producción feudal son relaciones establecidas por una clase jerárquica, y el sistema de dependencia de los productores directos (siervos), respecto de los señores feudales. Estas relaciones se pueden definir como relaciones de dependencia personal.

La base de las relaciones sociales de producción se encuentra en las relaciones de propiedad de las cuales se conocen dos tipos: la privada y la social. La propiedad privada expresa relaciones de dominio y subordinación, pues los dueños de los medios de producción tienen la posibilidad de explotar a los hombres carentes de propiedad. A lo largo de su desarrollo ascendente, las relaciones de producción basadas en la explotación del trabajo. Y la social en la cual todos poseían una parte de esa propiedad de una manera equitativa, y sin dominio de nadie.

Aquí el hombre independiente prácticamente ha desaparecido; todo el mundo vive sojuzgado: siervos y señores, vasallos y señores feudales, seglares y eclesiásticos.

Dándose así la “posibilidad de elaborar mediante un trabajo extremadamente forzoso por parte del siervo quienes dependían del señor feudal, un producto excedente que los señores se apropian en la forma de renta del suelo” [3]

Durante el período de auge del feudalismo, la renta del suelo tenía tres aspectos fundamentales:

1. Prestación Personal

Cuando impera la prestación personal, el siervo trabaja, con sus propios aperos tres días por semana o aún más, en la hacienda del señor feudal y el resto de días lo dedicaba al cultivo de su propia economía.

En la mayoría de casos al siervo le quedaba un corto tiempo para poder cultivar su parcela.

Como el labriego tenía que dedicar tanto tiempo a trabajar en la hacienda del señor feudal, consagraba a la suya las noches y los domingos, pero sólo cuando cultivaba su tierra tenía su interés en elevar su rendimiento, por el contrario durante la prestación personal el siervo carecía de estímulo por tal motivo los señores feudales tenían capataces que obligaban a los siervos a trabajar sin descanso.

La prestación es la forma más simple y más primitiva de las rentas.

Luego esta forma se agota y entonces la prestación personal fue sustituida por la renta en especie.

2. Renta en Especie

Con

este sistema de renta, el campesino esta obligado a suministrar regularmente al señor feudal una determinada cantidad de trigo, de ganado, de aves y otros productos agrícolas, con el fin de representar el pago por el uso de la tierra.

Con el sistema de la renta en especie el siervo empleaba su trabajo, tanto necesario como excedente, a su libre albedrío, el productor dispone de mucho más espacio para su iniciativa, para obtener más productos de los que el necesita y los que debe de entregar al señor feudal como tributo.

Aquí aparecen y se desarrollan las posibilidades de una diferenciación económica, es decir la desintegración de los siervos dentro del régimen feudal, la renta en especie es la que tuvo más preponderancia y adquirió

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