Revolucion Francesa

LA REVOLUCIÓN FRANCESA

La sociedad Francesa de los siglos XVII y XVIII se dividía en los llamados tres estados: el noble, el eclesiástico, y el tercero o llano. Los dos primeros formaban la clase privilegiada; el tercero incluía la burguesía, el proletariado, el artesano y los campesinos. Francia tenía aproximadamente 25 millones de habitantes.

La clase privilegiada se dividía en el alto clero y alta nobleza por un lado, y En bajo clero y bajo nobleza por el otro. Los grupos más cercanos al rey, provenientes de los antiguos señores feudales, disfrutaban en la corte de Versalles una vida de lujo sostenida por la nación, sin cumplir absolutamente ninguna función útil, mientras las capas bajas de nobleza y del clero llevaban una vida modesta. Sobre todo el bajo clero se identificaba en muchas ocasiones con la necesidad y preocupación de la masa popular.

La gran mayoría de la población estaba compuesta por los campesinos, sujetos a contribuciones y deberes feudales. Su situación de miseria llevó a partir de 1750 a una serie de rebeliones que se fueron haciendo cada vez más frecuentes e importantes.

También entre los artesanos se estaban acumulando elementos de descontento. En algunas ciudades de Francia, como Lyon, empezaba a desarrollarse una industria tipo moderno cuya competencia iba arruinando a algunas capas del artesanado.

La burguesía, formada por comerciantes, industriales y banqueros, encabezaba política y socialmente al estado llano. Sus exigencias habían sido expresadas ya desde hacía algún tiempo por los enciclopedistas. Consistían fundamentalmente en el establecimiento de una monarquía constitucional que le diera intervención en los manejos públicos; en el fin de la división en 32 provincias con aduanas internas y diferencias legales que seguía existiendo en Francia, y en el respeto a los llamados derechos naturales. El tercer estado defendía, además, las exigencias campesinas de abolir o, por lo menos, restringir muchos privilegios feudales que pesaban sobre los campesinos. Su petición inmediata era que se convocarán los estados generales, asamblea representaría para presentar sus exigencias en escala nacional y en forma organizada.

La Revolución Francesa fue un levantamiento popular contra el poder establecido acontecido en Francia en 1789. Este conflicto social y político que tenía como lema “Libertad, igualdad, fraternidad” tuvo algunos episodios de violencia y comprende el periodo de 1789 a 1799.

Todo comenzó con la convocatoria de los Estados Generales en 1789 por parte del rey Luis XVI, en donde estaban representados los tres estamentos del país; la nobleza, el clero y el Tercer Estado, en el que se incluía también la burguesía. Cada estamento valía un voto en la asamblea, a la que se llegó en medio de una devastadora crisis agrícola, una hacienda en bancarrota

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