Todos los Partidos Opositores del porfiriato

Nombre: Montejo Martínez Jenny

Carrera: Comunicación Social

Ensayo: Fuerzas de Oposición y Madero

Grupo: SCO4B

Modulo: México, Economía, Política y Sociedad.

Profesor: Dr. Nicolás Cárdenas García

FUERZAS DE OPOSICION Y MADERO

La oposición al régimen porfiriano que empezó a crecer a principios del siglo XX, especialmente en los estados del norte, provocó movimientos de nivel nacional por primera vez desde el establecimiento de la dictadura de Díaz. El más radical de estos movimientos fue el Partido Liberal, encabezado por los hermanos Flores Magón. El cual fue fundado en 1902 por un grupo de intelectuales, perseguidos por las autoridades, y obligados a ocultarse y finalmente huir a Estados Unidos donde se estableció una junta revolucionaria en la ciudad de San Luis Missouri. El partido liberal participó en la organización de huelgas y de varios levantamientos contra el régimen. Este llegó a tener cierta popularidad entre los intelectuales, miembros de clase media y obreros, sin embargo el partido nunca logró la influencia del campesinado.

 Otro movimiento de oposición fue el partido Democrático, que surgió en el mismo periodo, este partido no buscaba simpatizar con los obreros o campesinos, este partido estaba formado por las clases altas mexicanas que estaban fuera del poder. No postulaban ningún cambio fundamental en relaciones socioeconómicas y políticas. Su principal objetivo era sustituir a Porfirio Díaz.

El surgimiento de estos partidos políticos no era en único indicio de la creciente oposición del régimen de Díaz, cuya manifestación más dramática fueron dos huelgas: una en Cananea, en 1906, y la otra en Río Blanco, los obreros tuvieron choques sangrientos con los dueños de las fabricas, quienes habían establecido reglamentos que aseguraban nuevas formas de control sobre la fuerza de trabajo. Los obreros recurrieron a Díaz, el aceptó interceder, pero apoyó a los propietarios de las fábricas. Hubo más huelgas las cuales empezaron a dar un nuevo carácter a las fuerzas de oposición contra Díaz.

La crisis política fue resultado de la resistencia de Díaz a nombrar a un sucesor. En 1908, Bernardo Reyes intentó promover su candidatura, trató de obtener mayor apoyo de la población, y logró cierto apoyo de la clase media. En muchos lugares se realizaron tormentosos mítines de apoyo a su candidatura.  Debido al  deseo de Díaz de no enemistarse con Reyes, el dictador mexicano toleró por un tiempo las críticas.

El momento más peligroso para cualquier dictadura es cuando empieza a abrir el proceso político y a permitir que la oposición exprese críticas al régimen.

En ese mismo año, Díaz concedió una entrevista a James Creelman, periodista estadounidense, posiblemente con el fin de dividir a la oposición. Declaró que en su opinión México estaba ya maduro para la democracia, y que él ya no tenía el propósito de presentarse como candidato a la presidencia en 1910, sino que deseaba dejar a otro en el puesto. Le aseguró a Creelman que, en adelante no sólo toleraría a los partidos de oposición, sino que los ayudaría de todas las formas posibles.

El deseo de Díaz de dividir a la oposición, y la subestimación del descontento que había en el país, les dieron a sus adversarios cierta libertad para organizarse en el periodo de 1908-1909. La entrevista con Creelman tuvo grandes cambios en la política. El movimiento recién fundado incluía además de miembros descontentos de la clase media a campesinos por primera vez.

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