DESCRIPCIÓN Y CRITERIO DEL LIBRO “MÉXICO MUTILADO” DE FRANCISCO MARTÍN MORENO

DESCRIPCIÓN Y CRITERIO DEL LIBRO

“MÉXICO MUTILADO” DE FRANCISCO MARTÍN MORENO

En primer lugar, debo resaltar que el personaje principal de esta novela histórica es el General Antonio López de Santa Anna, quien fue varias veces presidente de México y fue considerado al final un traidor por unos cuantos dólares. Cubre el período histórico de 1846 a 1848, que fue la fecha a través de la cual México vio reducido su territorio a la mitad debido a la presión expansionista de los Estados Unidos de América. El narrador de esta novela resultar ser una especie de “testigo omnipresente” (dándote a entender que era, digamos, “invisible”), y que frecuenta reuniones en la Casa Blanca y en las fincas de Santa Anna.

Nuestro amigo narrador es, también, letrado y lee diversos periódicos de renombre, aunque se pregunta y se responde cosas que pueden dejarte esa duda de si realmente es de la época o no; narra con mucha furia y deja claro quién fue el culpable de la pérdida territorial: Santa Anna, la Iglesia católica, los fueros, los monarcas, la forma conformista de pensar del mexicano, el dilema entre el federalismo y el centralismo, la falta de una visión de nación el presidente James Knox Polk de los Estados Unidos, sus generales, el destino manifiesto, la visión expansionista y la forma progresista de pensar del norteamericano.

Con esta lectura podemos darnos una idea de que nuestro país es muy rico y, no sólo eso, que contamos también con gran diversidad de recursos naturales, de ecosistemas, flora, fauna, etc., y eso gracias a nuestra amplia extensión territorial, pero, considerando los hechos que nos muestra Francisco Martín Moreno en “México Mutilado”, podemos decir que nuestro país fue dirigido de manera ilegal por los Estados Unidos, y que parte de lo que nos perteneció nos fue literalmente robado. López de Santa Anna fue insultado infinidad de veces por esto, y la evidente complicidad de los demás hace que el despojo, por llamarlo así, fuera tal vez lo más consensuado en la primera mitad del siglo XIX.

La novela histórica se basa en los detalles íntimos y públicos de Santa Anna, te entretiene, pero te hace sentir la narración un tanto visceral. De hecho, me deja muy resentida para con las figuras, supuestamente patrióticas, que en base a enseñanzas del sistema educativo fui adquiriendo. Me parecen impresionantes y muy tristes los relatos encontrados a lo largo de esta historia, además de muy efusivos, al grado de que, en varios de estos, sentí el deseo de poder insertarme en los acontecimientos para ayudar en algo, para de alguna manera poder revertir lo sucedido. Sentí muy reales los relatos y me intrigó no lograr saber la fuente o el nombre del narrador que tantas veces mencionó a través de la historia, el “Yo. Yo estuve presente”.

Además, fue

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