ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Divina Comedia

tomassmc14 de Abril de 2013

3.410 Palabras (14 Páginas)377 Visitas

Página 1 de 14

LA DIVINA COMEDIA

EL INFIERNO

Dante inicia su viaje al infierno a la mitad del camino de su vida. Dante es guiado por su maestro Virgilio, enviado por Beatriz, que le pide el favor a Virgilio de que se convierta en su guía por el paso del infierno, purgatorio y el cielo. Dante se encuentra confundido en un bosque el cual describe como un bosque sin vida, lleno de oscuridad y de suspenso. Aparece pues frente a el una pantera (lujuria), una loba (avaricia) y un león (soberbia y ambición) que le da inicio a su recorrido, ya que aquí aparece su maestro Virgilio y lo ayuda a sobresalir del peligro del bosque. Dante no se siente digno de hacer este camino, ya que el no es Eneas (a quien Virgilio conto que pudo hacerlo y llegar al cielo en cuerpo y alma). Virgilio le cuenta que no tiene nada que temer que fue enviado por tres damas del cielo. Raquel, Lucia y Beatrice.

Aquí es cuando Dante y Virgilio recorren el bosque lleno de pozos, despeñaderos, pantanos y demás. Deben seguir otra ruta ya que esas bestias no los dejaran pasar por el monte. Dante y Virgilio entran al primer círculo del infierno, donde Dante observará y nos describirá muchos aspectos y características del mundo infernal.

El infierno que nos describe esta divido en 9 círculos, los primeros 5 forman el alto infierno y los

cuatro últimos forman el infierno inferior, los cuales se van haciendo más pequeños, formando una especie de continuos círculos hacia el centro de la tierra. Dante recorre estos círculos en 24 horas a pesar que parece que estuvo ahí un buen tiempo, en incluso se hace mención, en alguna parte del libro que dura más.

Ante las puertas del infierno

Aquí se encuentran, entre lamentos de dolor y de ira, las "gentes que vivieron sin gloria ni infamia", mezcladas con los ángeles que no se rebelaron contra Dios, pero no por lealtad, sino para evitar las consecuencias de tomar partido en la lucha entre el bien y el mal. El cielo los rechaza porque no hicieron nada bueno y el infierno también, porque no hicieron nada malo. Su tormento es que nadie se acuerda de ellos, no tienen esperanza de morir y no tienen nada que hacer en su pobre vida, desdeñados tanto de la justicia como de la compasión. Dante está condenando aquí, en particular, a sus compatriotas que, al contrario que él, evitaron tomar partido en los conflictos políticos de su tiempo anteponiendo su bienestar al bien de su ciudad.

También están allí los pusilánimes, desnudos, acosados por avispas, moscones y gusanos. Entre ellos estaba "quien hizo por cobardía aquella gran renuncia", sin duda el Papa Celestino V. Tenian avispas, moscones y gusanos.

El Infierno es un enorme valle cónico y está dividido en nueve niveles o círculos, cada cual más profundo y estrecho que el anterior. Ahí Dante conoce el Aqueronte (río del infierno), al barquero Caronte, con el cual tienen una pequeña disputa (ya que Dante no estaba muerto y por ende no le correspondía ese lugar), Virgilio diciéndole que venía por orden del todo poderoso logra que Caronte lo deje pasar. Dante se hace llamar a si mismo alma justa. Dante se duerme.

Círculo primero

Dante se despierta por un gran trueno. El círculo primero es el Limbo, donde están quienes, sin haber cometido falta alguna, han muerto sin haber recibido el bautismo; en particular, todos cuantos nacieron antes de la llegada de Cristo. Al llegar Dante se encuentra con 4 poetas. Homero, Horacio, Ovidio y Lucano. Los sigue formando una hilera de seis personas (Dante más Virgilio), llegan a un castillo rodeado de 7 murallas y entran en un verde prado donde están grandes pensadores. Ahí Dante se encuentra con varios filósofos, como Aristóteles. Las excepciones son Adán, Abel, Noé, Moisés, Abraham, Isaac, Jacob y sus doce hijos, Raquel y "otros muchos", que dejaron el Infierno cuando fue visitado por Jesucristo entre su muerte y su resurrección, y fueron entonces convertidos en santos. Los que están en el Limbo no sufren tormento alguno, salvo el saber que estarán allí para siempre.

Círculo segundo

A la entrada del círculo segundo está el rey Minos, ante cuya presencia todas las almas confiesan sus pecados y él los asigna al lugar del Infierno que les corresponde con los giros de su cola. En este círculo se castiga a "los lujuriosos, que la razón someten al deseo" y personas que pecan utilizando el amor para bienes propios, eternamente arrastrados de un sitio a otro por un terrible e incesante viento. Entre ellos se encuentran Francesca da Rimini y Paolo Malatesta. Quienes llegan volando, mientras el viento se los permita. Los amantes explican cómo estaban leyendo la historia de Lanzarote y la reina Ginebra y, en el punto en que los personajes se besaron, ellos lo hicieron también, y así empezó su perdición. Fueron asesinados por uno que está en Cain. Dante siente lástima por ellos. También encuentra a muchos reyes que fueron lujuriosos y a la vez utilizaron el amor para sacar provecho, como Cleopatra. Distintos tipos de amor: Cleopatra (amor interesado), Dido (amor apasionado), Elena (amor ambicioso). Esta también Aquiles por un romance. Dante mientras habla con ellos se desvanece y despierta en el tercer recinto.

Círculo tercero

El círculo tercero está guardado por Cerbero, el perro de tres cabezas las cuales simbolizan a la voracidad insaciable, lo describe con barba grasienta y negra, el cual es calmado por Virgilio con un puñado de tierra. Aquí se castiga el pecado de la gula. Los condenados sufren una tormenta perpetua, con lluvia y granizo. Dante se topa con Ciacco, el cual dice estar ahí por la insaciable gula, pero dice haber vivido en la ciudad de Dante, Florencia, Dante le pregunta por la guerra y Ciacco le dice que primero ganara un bando, pero que luego el otro ganara y hechara a los blancos (exilio de Dante). Dante le pregunta por personajes como Farinata degli Uberti. El le responde que si sigue bajando los encontrará. Ciacco le pide a Dante limpiar su reputación allá arriba.

Círculo cuarto

El círculo cuarto está guardado por Pluto, el dios romano de la riqueza (Virgilio lo vence hablándole del arcángel Gabriel con lo que la bestia cae), y en él se encuentran los pródigos y los avaros, condenados a hacer rodar pesadas rocas desde las laderas del valle hasta chocar en el centro. Entre los condenados hay numerosos clérigos, cardenales y papas que con el dinero de la iglesia se hicieron avaros. Eran dos grupos obligados a chocar eternamente.

Círculo quinto

En el círculo quinto está la laguna Estigia, vigilada por Flegias, hijo de Marte. Enfangados en ella, luchando eternamente unos contra otros, a golpes y mordiscos, están los condenados por el pecado de la ira, mientras que debajo del agua están los acidiosos, es decir, los perezosos y los que vivieron tristes y deprimidos sin motivo. Comienzan a cruzar el lago en un gran leño y aparece Felipe Argenti, florentino llamado así porque en una ocasión hizo herrar a su caballo con herraduras de plata. Su familia, los Adimari, fue la que se quedó con los bienes de Dante cuando fue exiliado. Dante lo reconoce y le dice que se marche. Además menciona que está feliz de verlo en el fango.

Los cuatro círculos anteriores castigan los pecados de incontinencia, mientras que los círculos siguientes castigan (más severamente) la maldad en sentido estricto. La región que comprende a todos ellos se llama Dite (un nombre latino para el Hades, o el Infierno), una ciudad que toma el color rojo de las llamas que hay en ella por todas partes, y está rodeada de murallas, cuyas puertas guardan los demonios. Rodeada de una laguna de aguas espesas, esta la puerta de la ciudad cerrada por una puerta de hierro. Los demonios no los quieren dejar (ya que Dante seguía vivo) y le cierran la puerta en la cara a Virgilio. Luego aparecen arriba feroces Erinias, quienes se rasgaban el pecho y buscan cobrar venganza con Dante y Virgilio, evocando a Medusa, para que los convirtiera en piedra. Virgilio le dice a Dante que se tape los ojos por si aparece Medusa. En eso llega un emisario del cielo caminando sobre el fango. Y como por magia con un toque de una vara abre la puerta y se va sin decir una palabra a Dante y Virgilio.

Círculo Sexto

En el círculo sexto se condena a los herejes. Está sembrado de tumbas de fuego en cada una de las cuales arde el jefe de una secta herética junto con todos sus seguidores. Allí se encuentra Farinata degli Uberti y otro espíritu el cual le pregunta por su hijo (Dante le dice que murió y luego se arrepiente). Sostiene con Farinata (adversario político de Dante) una conversación con tintes políticos sobre las familias, como la responsabilidad de los hijos sobre las acciones paternas.

Tras un tenso intercambio, Farinata pronuncia una profecía sobre el exilio de Dante en la cual se traduce la amargura del poeta, que ya lleva algunos años por fuera de su ciudad:

Círculo Séptimo

Al ir bajando Virgilio le explica a Dante que desde el circulo quinto en adelante los casitogs son peores, siendo el peor de todos la traición ya que esta es la fuente de todos los males. Explica además la ética de Aristóteles. El círculo séptimo está custodiado por el Minotauro, Virgilio algo le dice y este como un toro empieza a patear y moverse, Virgilio le dice a Dante que se muevan rápido y bajan por una roca que fue quebrada cuando Cristo vino, en el séptimo círculo se castiga a los violentos y está dividido en tres recintos:

Recinto primero

Aquí se castiga a los que cometieron violencia contra el prójimo, cuyas almas hierven en el Flegetonte, un río de sangre. Los que intentan salir de él

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (20 Kb)
Leer 13 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com