ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

EL LABERINTO DE LA SOLEDAD


Enviado por   •  30 de Marzo de 2013  •  960 Palabras (4 Páginas)  •  320 Visitas

Página 1 de 4

* El laberinto de la soledad. *

(Octavio Paz.)

Blanca Estela Rosales Reyes. 2 ° “C”.

Cada cultura y estrato social se define por las características propias del lugar. Nosotros propiamente somos el resultado de una transición social que se ha venido dando desde hace siglos en nuestro país. La influencia que tuvimos por parte de un país extranjero vino a determinar el futuro comportamiento de nuestra sociedad, a base de violento sometimiento, robarnos parte de nuestra identidad y cultura propia al grado de hacernos creer que somos seres inferiores.

Así, pues, Octavio paz hace referencia a nuestra mexicanidad manifestada en un personaje singular y pintoresco, que al inicio muestra un actitud negativa resaltando los defectos de los mexicanos reflejados en este protagonista,: se refiere a los “pachucos” que son los mexicanos que habitan en los estados unidos, describiéndolos como aislados, y con una actitud antisocial y conformista, adjudicando estos adjetivos también a la sociedad mexicana en general; menciona que para los norteamericanos, “el mundo es algo que se puede perfeccionar mientras que para nosotros es algo que se puede redimir”, claro que eso fue en su tiempo.

Aun, justamente hay ciertas características que aun conservamos y seguimos perpetuando a lo largo de los años, somos egoístas de determinada manera, pues nos es muy dificultoso el trabajar en equipo, queremos sobresalir, es mas hasta sobrepasar a los demás sin importarnos nada. No es una sana competencia sino la necesidad de sentirnos superiores a alguien o algo. Ocultamos nuestro “complejo de inferioridad”, como lo denominaría Ramos, con una mascara en la que encubrimos nuestra verdadera esencia. Pero esta máscara se ha venido constituyendo a lo largo de toda la historia que nos ha marcado, no es arbitrario el uso de ésta, sino con la finalidad de sentirnos mejor aparentemente. Cambiamos nuestra mascara (personalidad), constantemente de acuerdo al momento que se requiera, pero nuestra esencia del ser permanece inamovible, pues somos cada uno irrepetibles y únicos con algún detalle que nos distingue de los demás.

Una de las mascaras que se han conferido desde hace varias décadas es la del machismo, y que sigue perdurando hasta nuestros días, una falsa hombría disfrazada de superioridad, un hombre arcano, incapaz de externar sus sentimientos, miedos y debilidades. Paralelamente las mujeres nos cubrimos bajo la mascara de de ser sumisas, obedientes, benignas y desprendidas, viendo por mantener un hogar en orden y armonía; preferimos ocultar nuestras verdaderas aptitudes, habilidades y capacidades, muchas veces nosotras mismas nos traicionamos al no ser como somos, sino, como quieren los demás que seamos.

Nosotros los mexicanos somos únicos y deferentes de los demás, buscamos cualquier oportunidad ´para burlarnos de los acontecimientos así sean los mas lúgubres, el día de muertos es un claro ejemplo. Aunque este rito-tradición tiene ciertamente una influencia española, por la religión en principal, aun así antes de su llegada las culturas mexicanas creían en la vida después de la muerte, nosotros le damos un toque muy característico con la picardía y sentido del humor, las catrinas por las calles, calaveritas chuscas que hacen referencia a mas que un temor burla hacia la propia muerte. Porque es precisamente en las festividades donde el mexicano viene a externar su personalidad, disfrutamos de los excesos y nos sentimos a gusto, las festividades no discriminan clases sociales, en eso momento es un país unido.

El 16 de septiembre es una de las festividades más importantes par los mexicanos, y lo que representa en sí lo es más, aquí viene también la ya muy famosa y trillada frase que nos identifica como mexicanos en cualquier lugar: ¡“Viva México hijos de la chingada”!, ¡como Paz hace referencia la “chingada” es la mujer indígena sometida y violentada por el español, refiriéndose como los hijos de la chingada al mestizo, es decir, nosotros mismos., aunque no siendo conscientes de lo que esto significa.

A lo lago de la historia hay hechos que nos han marcado como sociedad, Octavio Paz hace referencia también a la inteligencia mexicana el como José Vasconcelos con toda esas influencias, seguía una línea ya establecida que no dejaba fluir el verdadero liberalismo, pero no se negara que fue una parte fundamental en la educación de nuestro país; es con Lázaro Cárdenas donde se busca una “…educación socialista… que combatirá el fanatismo y los prejuicios, creando en la juventud un concepto racional y exacto del universo y la vida social”. Nuestra inteligencia primeramente giraba entorno a al socialismo de Marx. Ello vino a determinar la visión que se tenia del país llevándolo precisamente a oportunidades de desarrollo que mas tarde se verían truncadas por gobernantes que preferían el pueblo sometido y sin pensamiento propio.

Con la revolución mexicana surge un nuevo México, se termina una época de dictadura, para ser una republica democrática. Sin embargo el país no ha podido sobresalir por lo mismo que hace notar Paz tenemos miedo a ser nosotros mismos, nos dejamos llevar por aquellos de mas amplia visión siendo nosotros quienes “hacemos el trabajo sucio” para que otros se lleven el producto de nuestro trabajo, siendo nuevamente un país explotado e invadido y que nos cuesta trabajo aceptarlo, por eso nos refugiamos en una falsa personalidad que tarde o temprano deja entre ver que el miedo mas profundo que tenemos es a ser nosotros mismos y lograr lo impensable, y los demás se aprovechan de ello para manejarnos a su antojo y conveniencia.

Sabiendo también que si nos lo proponemos, podemos llegar a ser lo que queramos y sobresalir entre los demás por nuestras propias acciones y no pasando por encima de los demás a toda costa, sino por lo que somos en esencia y ser.

...

Descargar como  txt (5.9 Kb)  
Leer 3 páginas más »
txt