Laberinto De Soledad

Octavio Paz, un escritor que al final de cuentas, siempre ofrecía una crítica constructiva dirigida a la cultura que como mexicanos manejamos. Elegí este libro en particular para leer, por que bien es cierto que todo comportamiento organizacional, se deriva de los comportamientos que como sociedad manejamos. El comportamiento laboral, depende directamente en como estamos acostumbrados a comportarnos en nuestro entorno regular, en nuestro ámbito social, por medio el cual nos educaron, nos forjaron y las ideas introyectadas con que cargamos generación tras generación.

Dentro, de “Laberintos de Soledad”, Octavio Paz, hace fuertes comparaciones con la cultura estadounidense, en como esta cultura se preocupa por arropar a su gente, a diferencia de la cultura americana. Resalta mucho el hecho de que el mexicano, cualquiera que sea su ámbito laboral, carga con la misma cara. Es decir, la misma cara la tiene un licenciado que la de un albañil, puesto que cargan con el folkor mexicano a flor de piel. Aun así dentro de este libro o ensayo como bien este parece, Octavio Paz también realiza un análisis de la indiosincracia del Mexicano que quiere captar las ideas de otras personas dejando a un lado su cultura. Lo cual considero que para esto, primero se tiene que tener bien arraigado el detalle de aceptar y conocer la propia cultura y valores. Como bien lo menciono de la siguiente manera Octavio Paz “México es una nación en la que sustratos y superestratos culturales conviven, creando la existencia de dos caracteres distintos dentro él mismo individuo, que conducen a la falta de identidad y a la soledad. Según Octavio Paz el ser mexicano es eternamente dúplice y necesita de dimensiones antitéticas para demostrar su propia existencia, por ello oscila entre el mundo de los vivos y de los muertos, entre la alegría y la tristeza. Estos extremos lo hacen sentirse protegido, la muerte lo protege de la vida, la vida lo protege de la muerte” El mexicano a creado una fuerza que a su misma vez es debilidad, una fuerza que le ayuda a seguir adelante apoyándose en si mismo, para levantarse. Sin embargo, al mismo tiempo el mexicano por su idea de salir por si mismo sea a creado un mundo donde exterioriza cualquier factor que le pueda afectar.

“Nuestro grito es una expresión de la voluntad mexicana de vivir cerrados al exterior, sí, pero sobre todo, cerrados frente al pasado. En ese grito condenamos nuestro origen y renegamos de nuestro hibridismo. La extraña permanencia de Cortés y de la Malinche en la imaginación y en la sensibilidad de los mexicanos actuales revela que son algo más que figuras históricas: son símbolos de un conflicto secreto, que aún no hemos resuelto” Entonces Octavio Paz, ampliamente cree que el comportamiento de todo ser humano se ve afectado por su pasado, por el pasado de sus antepasados y por sus decisiones.

“No es un secreto para nadie que el catolicismo mexicano

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