El Hombre más Rico De Babilonia

El hombre más rico de Babilonia

En nuestra sociedad, el dinero es la calificación universal con la cual sus integrantes podemos cuantificar el éxito de las personas que la integran. El dinero nos da la posibilidad de poder acceder a las cosas que nos pueden generar placer.

En nuestros días el dinero está subordinado a las mismas reglas que existían hace ocho mil años, cuando los hombres prósperos se paseaban orgullosos con sus bolsas llenas de monedas de oro, sonando al caminar por las calles de Babilonia

El libro nos habla de cómo un hombre que busca tener prosperidad financiera, primero debe ser responsable con el manejo de su dinero y entender el valor de su trabajo. Nos brinda varias lecciones de cómo podemos aspirar a tener un futuro más tranquilo, sí comenzamos a prepararnos para el mismo de una manera razonable y por medio de historias de distintos personajes que vivieron en la antigua Babilonia hace mucho tiempo.

El hombre más rico de Babilonia toma principios básicos de administración para generar y retener su riqueza. Lo que dicha persona sugiere es que toda persona puede convertirse en alguien rico siendo disciplinado y organizando su presupuesto de forma sensata.

Explica que existen siete formas de hacerse rico. Para comenzar a generar una riqueza que te permita vivir tranquilamente, debes destinar el diez por ciento de tu sueldo al ahorro. Él lo llama “pagarse a sí mismo”.

Después debes presupuestar tus gastos de modo que todos puedan ser cubiertos con el noventa por ciento de tus ingresos, dentro de esto se incluye lo indispensable y algunos lujos razonables.

Una vez que has ahorrado una cantidad considerable, debes acercarte a personas expertas en inversión para pedir sus consejos. Si tus ahorros producen más dinero al ser invertidos, será más sencillo alcanzar la prosperidad financiera deseada. Sin embargo, debes invertir sólo donde el dinero que inviertes pueda ser reclamado y pueda generar cierto interés.

Ya que tienes tus ahorros invertidos, debes buscar tener tu casa propia, ya que eso te dará mayor seguridad a la postre. El ahorro debe ser constante y debe permitirte prever los ingresos venideros y asegurar así la prosperidad de la familia. Finalmente, hay que cultivar la mente a base de la lectura y el estudio, siempre respetándose a uno mismo.

En el capítulo 4, el autor hace referencia a lo que Arkad y otras personas pensaban sobre la suerte. Ellos mencionan dos tipos de suerte, aquella que se presenta de forma casual y que es muy rara, como encontrarse una cartera llena al caminar por la calle y la suerte que se presenta en forma de oportunidad. En esta última, Arkad y los demás coinciden que se presenta más a menudo de lo que uno cree, sin embargo no todos la reconocen cuando la ven y la dejan escapar. Sin embargo, toda oportunidad que dejas escapar, es aprovechada por alguien que reacciona más rápido, con menos miedo y mayor decisión.

En el quinto capítulo, se hace referencia a las cinco leyes del oro; sin sabiduría, aquellos que poseen oro lo pierden rápidamente. Pero gracias a la sabiduría, aquellos que no lo tienen pueden conseguirlo.

Aquella persona que tiene recursos debe saber el valor de tal fortuna, debe estar consciente del esfuerzo tan grande que tuvo que hacer para poder obtenerlo. Esto le servirá para no regalarlo en negocios fraudulentos o a personas que buscan cumplir sus caprichos. Si eres responsable y sabes el valor de tu dinero, buscarás invertir con personas de ese tipo que analicen la situación detenidamente antes de lanzarse a invertir en un negocio.

Así cómo nos explica como generar dinero de la nada, el autor también nos da la receta de cómo saldar deudas y a la vez generar riqueza propia. En realidad su método es muy sencillo y efectivo. Nos recomienda reducir nuestros gastos corrientes a un setenta por ciento de nuestros

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