El Principito ENSAYO

El Principito

ENSAYO

Por: Cesar Adrian Ramirez Cruz

Técnicas de negociación

El inicio

Es curioso, muy curioso, y hasta llega a incomodarme, la verdad que nadie, o pocos sabian esto, que a pesar de leer bastante, tampoco mucho por que mentiria, de los libros basicos que todos conocemos y deberiamos leer, nunca me llamo la atencion leer este libro. Se me presentaron muchas oportunidades de leerlo, pero para mi se me figuraba un libro que no me aportaria mucho, que simplemente habia mas libros de autores mas conocidos, titulos con misterio, como “El  guardian en el centeno”, o otros simplemente en las dimenciones como el mismo libro “Leviatan” de Thomas Hobbles (solo para aclarar que lo termine pero no entendi casi nada, es triste pero quiero volver a leerlo para ver si mi lexico y mi mente estan preparados). Con titulos asi me era inpensable elegir El Principito, un libro para niños, según yo, pequeño y con un lenguaje amigable para todo el que quisiera que le contara la historia que lleva adentro. Pero en fin, el dia de leer el principito llego ami vida, sin expectativas, ni algun sentimiento hacia este pequeño ejemplar que tenia en mis manos.

Como volver a leer

Por fin el famosísimo “El Principito” estaba en mis manos, nada nos separó de nuevo. Como el primer beso, sencillo y bello me pareció ese momento en el cual empecé a leer la historia. Y así empezamos en el capítulo primero, el cual relata como el piloto se estrella en el desierto lejos de cualquier hombre a miles de kilómetros a la redonda, y empecé a imaginarme como era ese desierto, sería tonto de mi parte imaginar solo dunas de arena, que es y seguirá siendo el típico estereotipo, y en mi mente imagine un desierto rocoso, con, nula vegetación, un sol ardiente de cuarenta y cinco grados, de verdad odiaría estar en ese lugar, pero lo que en verdad me llamaba la atención era el hecho de que él no supiera dibujar. Lo que quiero decir es simple, somos más los que no sabemos dibujar que los que sí saben, y eso no está mal, ¿o sí?, y llego a mi cabeza otra pregunta más retadora que la anterior, ¿Por qué las personas critican cuando una persona no sabe leer y escribir, y no a las personas que no saben dibujar?, ¿Que acaso es menor el esfuerzo de una o de otra?, fue mi primer pensamiento, pero después entendí que estamos mal, que yo estaba mal, ¿por qué  razón doy por hecho las cosas que me han dado a lo largo de mi vida?,  las personas piensan que dibujar no es necesario, pero dudo si quiera que ellos sepan leer un dibujo , complicado de entender.

¿Cualquier persona que sabe leer y escribir es más que una persona que puede expresar los sentimientos que siente o percibe de su alrededor en un dibujo en una piedra? Es lo que deberíamos preguntarnos antes de decir que eres un ignorante al no saber leer ni escribir, y si seguimos la misma regla, estoy seguro que nadie quisiera llamarse ignorante por el simple y complejo hecho de no saber dibujar. Tenía razón eso El Principito, soy tan adulto que no comprendo la verdadera naturaleza de mí mismo, de mi cosmos, de mi misión en esta vida. Ya estoy grande, soy un adulto legalmente y perder todo lo que antes defendía, y ahora no sé qué defiendo, lo único que defiendo es mi existencia, lo único que me interesa es lograr que la historia no me borre y que el olvido no me escriba en él.

Creo que el cordero representaba a el mismo, a uno mismo, que el principito se sentía como un cordero en busca de que alguien lo dirija a el mejor lugar, o simplemente ya estaba alucinando. Mientras veo las luces del techo y me imagino a ese cordero dentro de la caja, talvez será como el piloto se sentía en el desierto, atrapado, pero al, mismo tiempo libre, claro no hay nada, es como estar en una caja, no tienes a donde ir en cualquier dirección a la que tu mires. Y el empezaron  a hablar de su planeta que él llamaba hogar, pequeño, con el apenas sufriente espacio para él. ¿todos tendremos un planeta para nosotros? No estoy seguro, pero, ¿quizá estaría hablando de que la galaxia es la sociedad?, como dicen “cada mente es un mundo” y yo tengo uno, para mí solo.

...