FUENTES DE LAS OBLIGACIONES

FUENTES DE LAS OBLIGACIONES

Obligación es u vinculo de derecho que compete a una persona que otorga el derecho de dar o hacer alguna cosa. La obligación crea una relación o un lazo entre personas determinadas que establece el derecho.

En Roma, la primera clasificación de las obligaciones era aquella que las dividía en civiles y naturales. Las civiles recibían la fuerza que da la acción era cumplir con la obligación, las naturales fundadas en la equidad y protegidas por el derecho de gentes no tenían la fuerza de la acción.

De esta manera creando obligación nacieron los contratos ya que se iba perdiendo la palabra y se tiene la necesidad de hacer contratos los cuales estaban divididos en: NOMINADDOS e INNOMINADOS.

NOMINADOS: Por su constitución los contratos podían ser verbis, litteris re, y consensuales.

VERBIS: Negocios, dictio dotis, promis iurata liberti, stipulatio.

Negocio: Comprar o vender.

Dictio dotis: Contrato de dote.

Promis iurata liberti: Promesa de libertad de los esclavos.

Stipulatio: todo lo que se acordaba mientras todo fuera legal.

LITTERIS: Propiedad, nomina, singrafos, quirógrafos. Estos eran contratos escritos.

Propiedad: Era el documento que se tenía demostrando la propiedad de forma escrita (registro público de la propiedad).

Nomina: Escrito de nómina que avalaba un derecho.

Singrafos y Quirógrafos: Lugar a donde se acudía a escriturar las propiedades.

RE: Es la cosa el objeto propiamente que se da pero no todo en absoluto, este era, mutuo, comodato, deposito, prenda.

Mutuo: Era el contrato consistente en el préstamo de consumo, que transfiere la propiedad de las cosas prestadas, o sea, aquellas que se pueden pesar, medir, contar y que hacen nacer la obligación de restituir al mutante el equivalente a la cosa prestada.

Comodato: Era el contrato en virtud del cual se presta la cosa para el uso, por lo que se llama también préstamo de uso.

Deposito: Era el contrato en virtud del cual se entrega una cosa para que se guarde y se devuelva al término. Este contrato se perfeccionaba con la entrega de la tenencia, que originaba la obligación para el depositario de guardar la cosa, conservándola sin hacer uso de ella, y a la vez, al término del contrato devolverla, en tanto que el depositante estaba obligado a pagar los gastos que pudiera originar el deposito.

Prenda: Era un contrato que tenía como objeto la entrega de una cosa un acreedor para garantizar el pago de una deuda o de una obligación.

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