La isla desconocida: Reflexión

Sergio Rubén Rodríguez Mata                              Grupo: 2IM16

La isla desconocida: Reflexión

Antes de empezar, quiero decir con sinceridad, que este libro medio una gran lección de vida, este libro me enseñó algo que jamás olvidaré, con una frase, me enseñó que las cosas no son lo que parecen, que son algo mejor. Lo recomiendo para que lo lean, pues, si se analiza bien, entenderá un gran mensaje.

Esta obra, aunque es corta es muy interesante, contiene un lenguaje no muy complejo. Es un libro adictivo el cual no se puede dejar de leer cuando empiece.

Es una alegoría preciosa y pese a la aparente simpleza del argumento uno no puede dejar de leerlo y cuando lo termina es una de esas historias que te hace reflexionar.

Creo que vivimos en una sociedad que nos impide poder alcanzar nuestras metas por insignificantes que sean, una sociedad complicada y que nos obliga a aceptar, sin más, unas reglas que todos debemos seguir sin cuestionar. En este caso las gentes más sencillas y necesitadas son tratadas con desprecio y con cierta hostilidad porque viven de ellos, de su ingenuidad, de su pobreza, quizá de su torpeza y sencillez. Así es la vida, así es el mundo en el que vivimos.

Pese a ser este uno de esos llamados cuentos para adultos, creo que es también un libro perfectamente recomendable para lectores jóvenes.

Creo que el cuento, se plantea como una crítica a este estilo de vida moderno que nos hace considerar como imposible la realización de nuestros sueños. El autor crea un cuento en el que finalmente la isla desconocida; es algo irrealizable.

La lectura del cuento es  una hermosa aventura que nos da posibilidades de pensar un poco en nuestras fantasías personales, confiando en nuestras propias fuerzas y en nuestra determinación personal, vale la pena luchar por nuestros sueños

La obra trata acerca de un hombre que necesita un barco y tripulación, para ir en busca de una isla desconocida.

La isla desconocida es un sueño improbable, todas las islas son conocidas pero debe existir una que no lo desea y esa es la que el protagonista de esta historia quiere descubrir, con el barco que del rey consigue, aunque sea él un hombre de tierra y no de mar.

La búsqueda ansiosa de este lugar inexplorado, que sólo existe en sus percepciones, distancia al hombre de sí mismo y curiosamente, o no tan curiosamente -depende de cada cual-, lo lleva a descubrir su propia esencia; el amor.

Un Hombre, decide asumir todas las consecuencias con el fin de lograr su objetivo; obtener del Rey un barco con el cual pueda llegar a la isla desconocida. El hombre va a la puerta de las peticiones golpea con el interés de ser atendido y lo logra. La puerta de las peticiones es atendida por la mujer de la limpieza y es ella quien pregunta al hombre qué es lo que necesita a lo que él responde con el deseo de hablar con el Rey.

Se sorprendió el  Rey cuando escuchó que el hombre simplemente quería hablarle. El hombre se niega a separarse de la puerta de las peticiones hasta no ser atendido por el Rey que finalmente cede ante las pretensiones del hombre y se acerca para escucharle; quiero un barco, es la petición que hace el hombre cruzando una conversación con el Rey sobre su objetivo de llegar a la isla desconocida. El Rey termina accediendo y da una carabela al hombre. Ante la determinación de aquel hombre que sabe obtener lo que desea, la mujer de la limpieza ve la más clara oportunidad para cambiar su destino y se va con el hombre a una aventura para conquistar la isla desconocida sin saber que ambos terminarían encontrándose a sí mismos reconociéndose.

...