Para comenzar, hay que aclarar que tomé estas obras literarias para mostrar las diferentes focalizaciones en la relación entre la literatura y la cultura.

La hipótesis que justificaré en el siguiente coloquio es “Toda la literatura argentina es la historia de la construcción de la identidad nacional”. Para ello tomé los textos trabajos y las obras Facundo de Domingo Faustino Sarmiento, Nelly de Eduardo Ladislao Holmberg, una selección de textos de Jorge Luis Borges y El juguete rabioso de Roberto Arlt.

Para comenzar, hay que aclarar que tomé estas obras literarias para mostrar las diferentes focalizaciones en la relación entre la literatura y la cultura.

FACUNDO – Domingo Faustino Sarmiento

En el pensamiento hispanoamericano del siglo XIX existe una tensión entre la urgencia del progreso, y por ello la necesidad de importar ciertas tradiciones (la posición de los unitarios), y la necesidad de construcción de la Nación, con y desde los elementos que proporcionaba la misma realidad hipanoaméricana (la posición de la generación del 37).

Sarmiento plantea en Facundo que el orden republicano está amenazado por las fuerzas de la campaña, es decir que la fuerza del campo (el modo de vida ganadera o pastoril) se ha introducido en las ciudades (el régimen de estancia dirige la Nación) La democracia Argentina entonces es inorgánica y podría inclinarse hacia diversas formas de barbarie y por ello Echeverría critica a Rivadavia por haber otorgado el sufragio a un pueblo no educado, con lo cual plantea la desconfianza hacia las clases populares. De esta manera, “civilización o barbarie” se transforma en una estrategia para que la burguesía acceda al poder, en tanto mecanismo de legitimación, pues es un programa de gobierno donde el Estado es el civilizador y el pueblo es potencialmente bárbaro.

El objetivo del folletín es lograr que el lector compre la siguiente entrega, por lo tanto se trata de captar su atención a través del suspenso; pero sobre todo el hecho de que lo haya publicado como folletín revela el motivo de Sarmiento: es un texto político, ya que en la guerra entre Civilización-barbarie Facundo es un arma de combate. Como texto político, Sarmiento trata de convencer y por ello necesita construir su verosimilitud, y esto explica la estructura de la obra.

Las grandes obras de Sarmiento –Facundo y Recuerdos de Provincia- están organizadas de acuerdo con los principios del Historicismo Romántico y por esto se organizan en torno a tres grandes temas: Naturaleza, Hombre y Estado, unidos por un principio interno de carácter divino. De este modo, se diferencia del Iluminismo que pondría en el centro al hombre, encargado de dominar la naturaleza y el estado.

Las obras comienzan con una descripción del paisaje: la naturaleza. En primer lugar, las circunstancias espaciales y temporales que determinan al hombre: la idea central es el determinismo geográfico (de la naturaleza); es decir, determinadas circunstancias temporales y espaciales modelan los tipos humanos que pueblan esos espacios (es el papel morfogenético del paisaje). Es una interpretación teleológica porque la finalidad del paisaje será formar determinados tipos humanos y así en Facundo se describen cuatro tipos de gauchos: vaqueano, rastreador, cantor y gaucho malo. Son todos positivos, excepto el malo (él va a decir que Rosas es un gaucho malo).

Manifiesta un interés típicamente romántico por explicar modos de vida y de pensamiento irreductibles a la razón; es decir, trata de explicar lo otro, lo que la razón no entiende. De esta manera, Sarmiento quiere entender a la barbarie y la vida de Quiroga es un testimonio sobre los modos de sentir y de vivir que lo han hecho posible y por eso permite comprender el mundo de la barbarie: por ejemplo, una acción puede ser bárbara pero comprendida como “normal” dentro del medio en el que se desarrolla.

Facundo es un grande-hombre, es el héroe de la barbarie. Sarmiento lo elige porque es un producto auténtico de su medio y conocerlo implica conocer la ley secreta de la barbarie que triunfa con él. Por eso entender la vida de Facundo es entender la vida de toda la barbarie. Por el contrario, considera a Rosas falso, no es un bárbaro auténtico, y lo llama monstruo porque utiliza elementos de la civilización para producir un gobierno bárbaro y despótico.

Título completo del libro: Facundo o Civilización y barbarie. Vida de Juan Facundo Quiroga. Aspecto físico, costumbres y hábitos de la República Argentina. Lo central es la coordinación “y” porque Argentina aparece caracterizada por el encuentro, el conflicto y la interpenetración de estos dos elementos. Hay un par dialéctico; es decir, es una relación de oposición entre la tesis y la antítesis, que se relacionan entre sí para producir una síntesis (y la síntesis está conformada por elementos de ambas).

A pesar de que Sarmiento apuesta por el proyecto civilizado, la realidad argentina del presente del texto es una especie que mezcla ambos componentes y no existe una sin otra. Es decir, está definiendo una realidad híbrida y esto es fascinante para un romántico como Sarmiento porque puede encontrar allí las bases de la nacionalidad. Por otro lado, este modo de imaginar la cultura argentina es imaginarla como una cultura de fricción, un esquema de enfrentamientos, herencia que ha permanecida en la cultura política y social argentina hasta el presente.

No trata particularmente de la vida de Quiroga porque se trata más bien de una personificación ya que Facundo, en tanto hombre representativo, va a dar cuenta de un tipo de vida. Sarmiento extrae de la vida de Facundo rasgos esenciales que se utilizan para construir un tipo, es decir un modelo porque abarca todo un género, condensa los atributos de la barbarie.

¿Qué es la civilización para Sarmiento?: “la ciudad es el centro de la civilización argentina” y la civilización es el perfeccionamiento de la vida civil. Esto se relaciona con las formas de gobierno, según Montesquieu: monarquía, despotismo (como el de Rosas) y república (democrática o aristocrática). Sarmiento promueve la República Aristocrática como forma de gobierno.

Este correlato también se da en el orden humano: el personaje civilizado es Paz y el bárbaro es Quiroga. Pero cuando Facundo va a Buenos Aires porque está de acuerdo con llamar a Asamblea Nacional Constituyente se torna civilizado y Rosas encarna la barbarie. De esta manera Facundo tiene dos imágenes: Primera y Segunda.

Imagen Primera de Facundo: la invocación inicial implica irracionalismo y lo instintivo, aspectos que Sarmiento aborda para describir una vida –la de Facundo- que se deriva de esos rasgos –sangrienta, primitiva y misteriosa- y que actúa en un escenario que tiene los mismos rasgos:

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