Reseña de el hombre rebelde

El conocimiento de los derechos, procurara una verdadera coexistencia

Albert Camus, reconocido escritor, en su libro El hombre rebelde ilustra de la mejor manera cuál es el  significado de la libertad, la rebelión, el conocimiento y la solidaridad. Conocimientos que conllevan sensación de placer la cual se produce al saber, al adquirir sabiduría.

La rebeldia implica el conocimiento del mundo y con lo cual estamos destinados  a vivir sin olvidar la noción de que razonar conduce al verdadero  conocimiento.

En este libro se intenta demostrar lo importante que es para la vida el dominar las pasiones y aprender de estas. Igualmente se ve ilustrado que el conocimiento del entorno es la base para formar una sociedad.

Además, también ayuda a comprobar cuánto poder se tiene para cambiar las cosas y transformar el mundo. En donde la finalidad del relato está guiada a poder percibir el entorno y  a darse cuenta de qué es y quién se es  realmente.

El fin de este texto está sustentado en la rebeldía como un método de libertad respaldando el autoconocimiento como procedimiento para la integración social y la unión de ideas que revolucionen y afecten positivamente para dejar de ser oprimidos y efectuar la vida de armonía en una comunidad.

La rebelión es la causante de la racionalidad del hombre La cual lo abastece de justicia y lo hace poseedor de derechos, proporcionando  un cambio social donde se denota la unión y la grandeza de las ideas.

Así una de las intenciones  del deseo de rebeldía consta de racionalizar y causar el cambio colectivo para engrandecer los objetivos comunes.

De esta manera, como dice Camus, el movimiento de rebelión se apoya al mismo tiempo en el rechazo de una transgresión juzgada intolerable y en la incertidumbre confusa de un buen derecho; más exactamente, en la impresión del rebelde el cual  “tiene derecho a…”. Así, la corroboración de frase se ve instaurada  en el preámbulo de la  declaración universal de los derechos humanos donde se dice claramente que como está establecido el derecho a la vida, a la igualdad, al saber, etc.

“Considerando esencial que los derechos humanos sean protegidos por un régimen de Derecho, a fin de que el hombre no se vea compelido al supremo recurso de la rebelión contra la tiranía y la opresión.”

De este modo se puede concluir que la rebelión se ve enmarcada por una justa causa, en tanto los derechos se vean violados o cuando no se les dé relevancia; tanto así, la rebelión resultaría necesaria.

Al igual, Camus en el texto sobre el hombre rebelde, plantea de gran modo la rebeldía, en dónde la revolución de alguna manera solo se efectúa de una forma solidaria, donde la revolución es llevada a cabo porque un grupo de personas comparten la misma idea y están obligados a defenderla.

Por tal, es necesario citar la parte en la que dice: “En primer lugar se notara que el movimiento de rebelión, no es en su esencia un movimiento egoísta” otra manera de interpretar esto, es tomándolo desde el punto de vista desde el cual Fidel Castro lo interpreto en su gran discurso llamado La revolución es cambiar todo lo que tiene que ser cambiado. Y dice:

“La Revolución es el sentido del momento histórico; es cambiar todo lo que debe ser cambiado; es igualdad y libertad plenas; es ser tratado y tratar a los demás, como seres humanos; es emanciparnos por nosotros mismos y con nuestros propios esfuerzos; es desafiar poderosas fuerzas dominantes dentro y fuera del ámbito social y nacional; es defender valores en los que se cree al precio de cualquier sacrificio; es modestia, desinterés, altruismo, solidaridad y heroísmo; es luchar con audacia, inteligencia y realismo; es no mentir jamás ni violar principios éticos; es convicción profunda de que no existe fuerza en el mundo capaz de aplastar la fuerza de la verdad y las ideas.”

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