Reseña de la Metamorfosis de Kafka

Reseña “La Metamorfosis” de Franz Kafka

Por: Alejandro Martínez Beltán

Franz Kafka, ese autor influyente de la literatura universal, nació en Praga, el 3 de Julio de 1883, fue de origen judío, la mayoría de sus obras están escritas en alemán. Vivió en una época de invasiones y conflictos pues en ese momento se gestaba invasiones pro germanas a su país y se venía venir la primera guerra mundial. Su obra está llena de temáticas y modelos sobre la alienación, psicológica, los conflictos familiares entre los padres y los hijos, personajes en aventuras terroríficas, y transformaciones místicas. Entre sus obras más destacadas se encuentran tres novelas, El proceso, El castillo, El desaparecido y La metamorfosis, que es considerada una novela corta, además de numerosos relatos cortos. El estilo literario de Kafka se le ha llegado a comparar con el realismo mágico, propio de autores como Gabriel García Márquez. Algunos estudiosos de discuten sobre cómo interpretar al autor, hablan de una posible influencia de una política antiburocrática, mientras otros se fijan en el contenido psicológico de sus obras. Kafka cursó sus estudios en Alemania, a sus 14 años hizo sus primeros pasos agigantados como escritor, a pesar de haber estudiado Derecho, nunca ocultó su pasión por la literatura, sobre todo aquella que tenía una crítica social marcada. Influenciado por Nietzsche, Kafka se vio apasionado por el socialismo. Aunque Kafka en vida fue poco reconocido por su obra, su real reconocimiento vino después, luego que cada una de sus obras se dieran a conocer a nivel mundial, el reconocimiento global de grandes autores no se hizo esperar. Kafka murió a sus 40 años, el 3 de Junio de 1924.

En La Metamorfosis se aprecia cómo le cambia la vida a Gregorio Samsa, el protagonista de la historia, quien en una trágica mañana despierta postrado en la cama, convertido en un insecto. En un ambiente de un sueño, de una mala noche, de una pesadilla, Samsa trata de salir de su asombro al verse convertido físicamente en un bicho repugnante y pensar que es solo una pesadilla, pero que para su mala fortuna es consciente de que no es así. Este estilo de mezclar la realidad con la ficción y tratar de meter al lector en la escena, es característico del autor. Basta leer un par de líneas para descubrir que Gregorio no ha perdido sus cabales, sino que el autor trata de mostrarnos de un modo poco peculiar, el nuevo mundo de Gregorio Samsa, un hombre que en una mañana común y corriente al levantarse para ir a trabajar y cumplir con sus obligaciones para ayudar a su familia, ahora tiene que lidiar con su nuevo aspecto, con su nueva apariencia.

El protagonista de la historia tendrá que experimentar como su voz se va desfigurando y pendiendo funcionalidad hasta llegar a no poder comunicarse con la gente. Ahora, Samsa, tendrá que acostumbrarse, no solo a esa pérdida de la voz, sino a una serie de transformaciones que incluyen cambios físicos y cambios en sus hábitos, como algunas de sus nuevas costumbres, pues ahora sus gustos alimenticios han cambiado. Gregorio, también tendrá que luchar ahora contra el profuso rechazo que le ofrece su familia, quienes lo ven como un insecto repugnante que vino a ocupar su lugar.

Si bien Kafka nos presenta un insecto físicamente, en este aún perduran algunos recuerdos e ilusiones que vivió en su anterior vida y que aún es capaz de tener emociones humanas como lo es sentir euforia y emoción al escuchar música.

En esta novela corta de Kafka se resalta claramente la intención del autor, al indicar que somos seres perennes y que estamos destinados en este mundo para cumplir tareas y metas, sin embargo, también se resalta algunos conflictos familiares y como la familia juega un papel importante, pero que a la vez se puede convertir en una carga o en un emisor de juicios de valor ante situaciones adversas (la transformación de Gregorio). Kafka utiliza un lenguaje agradable para el lector, además de no poseer muchas palabras técnicas, es un vocabulario cotidiano, abundan los detalles y es bueno al hacer imaginar la trágica situación de Gregorio, posee figuras literarias marcadas como el símil, la hipérbole y la onomatopeya. Quizá una motivación para el autor al escribir esta novela, es demostrar como los seres humanos somos insignificantes y nos vemos como bichos ante el mercantilismo y una vida sumisa ante la rutina, la explotación laboral, tal como estaba Gregorio; recordemos que Franz Kafka en vida fue un empedernido lector del socialismo y ensayos con crítica social antiburocrática, quizá por este motivo plasma en su obra este inconformismo ante un modelo económico opresor.

...