Resumen de los Delitos y la Penas

REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA[pic 1][pic 2]

MINISTERIO DE EDUCACION SUPERIOR

UNIVERSIDAD BICENTENARIA DE ARAGUA

ENLACE LATINOMAERICANO DE UNIVERSIDADES

DERECHO PENAL II

ENSAYO:

BECCARIA - De los Delitos y las Penas

Helbert Morales

C.I.V.- 16.231.912

Derecho – Sección T2

San Cristóbal, septiembre 2017

De los Delitos y las Penas, se trata de una obra enmarcada en el movimiento filosófico y humanista de la segunda mitad del siglo XVIII. En ese momento se manejaba la teoría cierta de que las penas eran una especie de venganza colectiva, este diseño daba lugar a la aplicación de castigos con consecuencias mucho más altas y más terribles que los males producidos por los propios crímenes. Las prácticas de la tortura, la pena de muerte, cárceles inhumanas, destierros y demás atrocidades eran el día a día. El compendio se basa en tres pilares fundamentales:

• Todos los individuos tienes libre albedrío.
• Todos los individuos tienen razón.
• Todos los individuos son manipulables.

Beccaria como todos los teóricos clásicos cree que todos los individuos tienen libre albedrio y actúan sobre esa base. El segundo pilar significa que, todos los individuos razonablemente buscan su propia satisfacción, esta es la clave entre la relación entre la ley y el crimen. El tercer pilar reside en manipulabilidad, un motivo humano comúnmente compartido de interés privado racional, que hace que la acción humana sea predecible, universal y manejable. El trabajo de la justicia penal es controlar todo comportamiento desviado que un individuo pueda cometer en la búsqueda del placer personal. Esto es más fácil debido al hecho que las acciones humanas son predecibles y manejables. Con castigo o amenaza de castigo, la justicia penal puede controlar a un ser humano libre y racional. La tarea de la justicia penal es encontrar los castigos o amenazas adecuados.

Becarria protesta la tradición legal invocando la razón y el sentimiento, su obra se convirtió en portavoz de la conciencia pública en contra de los juicios secretos, el juramento impuesto a los acusados, la confiscación, la infamia, la desigualdad y la atrocidad; establece límites entre la justicia divina y la justicia humana, diciendo “la grandeza del crimen no depende de la intención de quien lo comete”. Condena el derecho a la venganza y se basa en el derecho de castigar con utilidad social, haciendo hincapié en la necesidad de la publicidad y prontitud de las penas, expresando “cuanto más preparado para una pena y siguiendo de cerca el delito, el injusto será más útil”. También establece la pena de muerte como inútil y afirma la necesaria proporcionalidad de las penas para los delitos indicando “la verdadera medida de los delitos es el daño causado a la sociedad”, así como también plantea la separación del poder judicial y el poder legislativo.

Cesare Beccaria dijo que las leyes son fragmentos de una antigua legislación, compilados de monarcas que reinaron durante 1200 años en Constantinopla, combinadas con costumbres de los Lombardos y envueltas en un grueso fajo de comentarios oscuros, y compuestas por una gran colección de opiniones ya viejas en Europa.

Infiere que las ventajas de la sociedad debían ser distribuidas por igual entre todos sus miembros, en caso de que este fuese el verdadero valor de la sociedad, sin embargo, Beccaria determina que entre los hombres de poder hay una continua tendencia de la acumulación de los privilegios, para permitir que la mayoría solo tenga miseria y debilidad, pero esto puede evitarse con buenas leyes. Por lo general, los hombres abandonan las leyes y la prudencia al momento de cuidar sus más preciadas querencias.

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