Crítica de la película: ¿Qué pasó ayer? (Hangover)

Crítica de la película: ¿Qué pasó ayer? (Hangover)

Ficha

Dirección:

Todd Phillips

Guión:

Jon Lucas

Scott Moore

Estreno (Argentina):13 Agosto 2009

Título Original:The Hangover

Género:

Comedia

Origen:

Estados Unidos

Alemania

Duración:100 minutos

Clasificación:AM18

Distribuidora:Warner

He aquí la película para reunir nuevamente a aquellos amigos de antaño que ahora están panzones, con hijos y felizmente casados

Calificación: Buena

Uno de las peores males que afecta al cine made in Hollywood de los últimos tiempos es la falta de originalidad. El “refrito” o “remake” como se le dice rimbombantemente es la constante en el cine de hoy. Producciones que buscan contarle a las nuevas generaciones historias que ya vieron sus padres. O simplemente son viejas historias conocidas, pero con otros nombres.

Dice el inmortal Gabo que lo importante no es contar primero el cuento, sino contarlo mejor. Esta premisa usualmente no es escuchada en Hollywood, principalmente en el terreno de la comedia, a las que asistimos a tal cual bodrio que nos hace pensar que el humor ha muerto.

Dizque comedias románticas de poco cerebro (Guerra de Novias, los Fantasmas de mi Ex) y supuestas cintas de parodias sobre las que uno se pregunta si son películas como tal, porque parecieran mas bien meras filmaciones de gente haciendo estupideces. Ese el menú regular en los cines. Así de simple.

No es que por este tétrico porvenir esperen entonces leer mis lamentaciones por haber perdido dos horas de mi vida viendo otro remedo de comedia. Contradictoriamente, el decepcionante panorama planteado busca darles una idea de mis percepciones antes de sentarme en la butaca y darme de cuenta de bruces que el maestro Gabo tiene razón.

¿Que pasó ayer? es un cuento viejo contado con tantos nuevos bríos, que podemos estar presentes ante la mejor comedia de situaciones del año. Doug (Justin Bartha) está a un sólo un fin de semana de casarse, así que decide pasarlo con sus dos mejores amigos Phil (Bradley Cooper), Stu (Ed Helms) y su raro cuñado Alan (Zach Galifianakis). Para un último fin de semana de soltero, que mejor lugar que Las Vegas.

Los problemas empiezan cuando luego de toda una noche de parranda, todos despiertan con una resaca amnésica (a la que hace ilusión el nombre de la cinta en inglés) para darse cuenta que en el destrozado cuarto del hotel hay un bebé, un tigre, una gallina, ah…y el novio no está por ninguna parte.

Cintas sobre tonterías hechas en noches de farra se han hecho decenas, pero ninguna como esta. Aplicando un formato narrativo simple, con una escena futura que da pie a la regresión de la historia, la cinta se sostiene por las situaciones alocadas ocurridas a sus protagonistas y la genial química existente en el reparto. Son roles sencillos enfrentados con la mayor naturalidad. Incluso el retorcido Alan nos recuerda siempre al pariente extraño y problemático que hay en todas las familias.

Son personas comunes, con frustraciones constantes y problemas rutinarios, enfrentando situaciones extremas. La respuesta a la pregunta con la que se nombra esta cinta no sólo ronda en la amnésica cabeza de los protagonistas, sino en la de los espectadores. Si, puede ser descalificada como una oda al machismo, pero no desmerita lo entretenida que es.

Recomendación aparte: Reúna a sus antiguos compañeros de farra para verla. La disfrutará más que con sus novias o esposas. Pero tendrá dejar que ella haga lo mismo. A lo mejor se dan unas cuantas confesiones cuando comenten sobre la película.

Por Moisés Martínez

Dirección: Andrew Stanton y Lee Unkrich.

País: USA.

Año: 2003.

Duración:

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