Detras de una caricia

Detrás de una caricia

Me despierto, nose donde estoy, no veo a nadie, donde está el que acariciaba todos los días mi cabeza, camino y camino, van pasando los días y las noches de pronto alguien toca mi cabeza entonces levanto la mirada, pero no es quien siempre me acariciaba, camino sin rumbo cada día me siento más débil, solo hay noches frías, a veces llueve y no puedo resguardarme  de la inclemencia del clima, es difícil hacerme entender, no puedo decirle a los demás que estoy cansado, que tengo hambre, ni siquiera se mi nombre, mientras camino por las calles me pregunto qué habré hecho para quien me acariciaba, me haya dejado aquí solo e indefenso, pasan los días y cada vez es más difícil encontrar algo para comer, me siento tan cansado, me duele el cuerpo, al pasar los días me cuesta caminar estoy muriendo poco a poco, veo pasar personas algunas me miran con asco, otras me miran con tristeza, otras pocas se apiadan de mí y dan a beber un poco de agua o algo de comer, he llegado a una puerta hasta aquí me dan las ultimas fuerzas, sé que pronto dejare este lugar, han pasado tantos días que ya casi no veo, ni tomo olor y ni siquiera puedo dar un paso, en una de esas noches frías  alguien me ha golpeado a las espaldas me ha herido en el costado y me ha arrastrado por la calle en eso alguien grita su nombre ¡Rex! y el sale corriendo lo veo alejarse es más grande que yo creo, como puedo me arrastro hacia aquella puerta, me intriga saber quien vive ahí, llevo dos semanas aquí aún no he visto abrirse esa puerta es como si esperase algo de ese lugar, dos días después de que recibí el ataque llegan cinco personas en un taxi y se acercan a la puerta, como puedo levanto la mirada hacia ellos, alguien de ellos me mira y dice no que no me toquen que estoy enfermo de la piel, sin embargo dos de ellos me miran, y discuten entre ellos, entran por aquella puerta en la que he pensado últimamente, no pasan más de diez minutos y  salen los dos nuevamente se sientan al borde de la puerta y me llaman colocan un poco de comida en un plato y un poco de agua, como puedo estiro mi cabeza y como, ellos me miran con tristeza, se entran y yo vuelvo a mi lugar, ya es de mañana y he pasado una noche igual que las demás fría e incómoda, el pavimento no es muy cómodo que digamos, de pronto se abre la puerta y sale una de las personas que me miraban con ojos tristes anoche, me saluda y se va quisiera seguirlo pero no tengo fuerzas para ponerme en pie, para mi sorpresa vuelve un momento después , trae una bolsa al llegar a la puerta mete su mano en la bolsa y la estira hacia mí, coloca la bolsa en el suelo y posa su otra mano sobre mi cabeza, es extraño hace mucho no siento una caricia, se levanta me coloca un poco de comida en el plato y se entra, tomo un poco de la comida y vuelvo a recostarme cerca a la puerta, pasa un individuo y toma mi comida y se va, pasan los días y todos los días sale alguien por esa puerta con comida y agua para mi me siento un poco mejor ya puedo levantarme y caminar, a veces cuando alguien sale por esa puerta lo acompaño despacio camino detrás de él pero de un momento a otro no está desaparece de mi vista entonces retorno a mi lugar cerca de esa puerta, han pasado varios días y cada día me siento un poco mejor todos los días tengo algo de comer soy feliz con eso, ahora ha llegado la noche y han empezado a caer gotas de lluvia  no recordaba el intenso frio que me recorre cuando llueve, pero de repente alguien abre la puerta levanto la mirada y me doy cuenta que es él que dijo que estoy enfermo así que vuelvo y me inclino de manera que el aire que corre no me golpee tan fuerte y las gotas de lluvia no caigan sobre mí, pero de pronto  la lluvia empieza a arreciar y ya no es  lluvia es un torrencial aguacero,  inesperadamente él me toma y me lleva a través de la puerta, es curioso porque me lleva a un pequeño espacio donde puedo escuchar la lluvia y las ventiscas pero no las puedo sentir, entonces vienen recuerdos que pasan por mis pensamientos  y como todo cambio para mí, me siento y empiezo a llorar hasta que duermo, al otro día muy temprano viene él y me lleva fuera otra vez, eso basto para sentirme bien, me levanto camino doy un paseo y vuelvo a la puerta ahí me siento tranquilo, en esos ires y venires de la vida aparece Rex nuevamente se lanza hacia mí y como puedo me defiendo de pronto aparece una señora  esta me intenta golpear también pues me mira con desprecio, así que yo  simplemente me defendí le he atacado por la retaguardia, ella se va y regresa unos momentos después hacia la puerta y la golpea con violencia, entonces el que me trae comida todos los días aparece en la puerta, no entiendo lo que dicen pero la señora hace unos ruidos estridentes y puedo sentir su mal humor que le brota por la piel, él simplemente me mira mueve su cabeza de lado a lado y cierra la puerta, más tarde sale el otro y me trae comida me mira a los ojos, pasa su mano sobre mi cabeza y se levanta yo me voy detrás de él corriendo el me llama y vuelve pasa su mano por mi costado, me dice que me devuelva pero quiero ir con él, me gusta su compañía, le sigo por varias calles el trata de cogerme hay demasiados autos y mucho ruido, pasamos una gran calle el corre detrás de mí intenta alcanzarme yo me divierto corriendo de pronto algo me enviste de la nada y yo solo siento desesperación empiezo a correr y el que venía conmigo empieza a gritar y corre detrás de mí pero ya no lo veo así que sigo corriendo estoy confundido asustado, corro y corro desesperadamente, de pronto otra vez estoy cerca a la puerta, no sé porque he vuelto aquí, estoy agitado de pronto veo que a lo lejos viene corriendo a quien yo iba siguiendo, de pronto se acerca me acaricia, me mira, cae una lagrima y se sienta a mi lado, ahora tengo nombre me dice Bad, ya han pasado años, y casi he olvidado aquella desventura que sucedió en mi vida a veces mientras duermo sueño cosas que de pronto me perturba; pero luego siento una suave caricia que pasa sobre mi cabeza, abro los ojos, tomo aire por un momento observo a mi alrededor y él que me acaricia, me dice tranquilo estas en casa.

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