Modelo parcial Medios expresivos

Memoria

A la hora de arrancar el proceso de creación de la historieta tuvimos en cuenta una serie de factores que determinaron el camino a seguir. Lo primero que debíamos resolver era como íbamos a hacer expansible la historieta. Nos inclinamos por la opción de crear un cuaderno, un objeto que represente a nuestro personaje escritor. Buscamos cierta interacción entre los lectores y la historieta; que el lector se involucre en lo que le está pasando al personaje, que sienta y experimente lo mismo que él. Para generar esto, el límite entre el cuaderno del personaje y el libro donde montamos la historieta es confuso, sin un límite claro.  Jugamos con la idea de que la historieta por momentos sea el mismo cuaderno del personaje, generando más empatía por parte de los lectores.

La historia hace un alegorismo entre la situación de la educación pública actual con la imposibilidad de un escritor que no puede continuar con su trabajo.  La historieta arranca con el despertar del personaje, como cualquier otro día rutinario de su vida. Cuando quiere continuar con su trabajo se encuentra con una serie de obstáculos que no le permiten continuar; las palabras de su cuaderno aparecen tachadas, las hojas arrancadas provocando el enojo y la resignación en el escritor. Acompaña en el transcurso de la historieta un texto de de Paulo Freire, un educador experto en temas relacionados a la educación. La elección del texto no fue azarosa; el personaje de la historieta hace referencia a su autor. Este texto refuerza la idea de la alegoría entre la educación pública y las vivencias del escritor.

 “La educación es el terreno donde el poder y la política se expresan de manera fundamental, donde la producción de significado, de deseo, lenguaje y valores está comprometida y responde a las creencias más profundas acerca de lo que significa ser humano, soñar y dar nombre y luchar por un futuro y una forma de vida social especiales. La educación se convierte en una forma de acción que va asociada a los lenguajes de crítica y posibilidad. Representa, finalmente, la necesidad de una entrega apasionada por parte de los educadores para hacer que lo político sea más pedagógico, es decir, para convertir la reflexión y la acción críticas en partes fundamentales de un proyecto social que no sólo se oponga a las formas de opresión, sino que, a la vez, desarrolle una fe profunda y duradera en el esfuerzo por humanizar la vida misma. Estudiar no es un acto de consumir ideas, sino de crearlas y recrearlas”.

La elección del dibujo sigue la estética de las anotaciones. Un dibujo lineal que acompaña la idea de espontaneidad. En el proceso de investigación nos topamos con unos ilustradores que tuvimos en cuenta para la realización del dibujo:

Power Paola:

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María Luque:

María Luque:[pic 5][pic 6]

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