No Se Lo Digas A Nadie

Si fuera José

-sólo José-

no tendría este pene atrofiado

mis tetas se hundirían

me llenaría de pelos.

No me las cogería a la fuerza

ni las miraría a las nalgas.

Si fuera José

sería igual de vulgar

y no me enamoraría de Regina.

Este poema me recuerda mucho la situación de Joaquín y de muchos y muchas más que obligados y obligadas por la familia y la sociedad, luchan desde que son conscientes de sus gustos diferentes para poder cambiar eso que no encaja dentro de lo que es “normal” para la sociedad, iglesia y familia.

Joaquín, hijo único, de una familia acomodada, con dos padres muy distintos entre sí, el papá machista y la madre conservadora, la típica ama de casa que antepone la religión ante cualquier problema, Joaquín se encuentra en esa confusión de con quién debo quedar bien, a quién debo seguir y como debo comportarme para agradar a ambos. Jóvenes como Joaquín existen muchos que su mismo entorno es el que los confunde aún más y no solamente en sus tendencias sexuales sino también en decisiones como el elegir una carrera o algo tan simple como el decidir qué lugares frecuentar y con qué tipo de personas entablar amistad.

Igor Caruso en su libro Aspectos Sociales del Psicoanálisis hace mención al gran poder que ejerce la familia en la reproducción de lo que el sistema desea, esto lo menciono, porque Joaquín debía, debido al contexto en el que se desenvuelve, cumplir con las expectativas del padre, y esto según Caruso se debe a “la adaptación de la familia a una sociedad de la represión y la agresión, provoca necesariamente reacciones regresivas de defensa: agresividad, conformismo, temor, inseguridad y egoísmo” claro está que el padre debido al nivel social debía tener un hijo “muy hombre”, que supiera defenderse y ser fuerte para incluso cazar animales y aunque para Joaquín fuera matar, vemos realmente como la familia es el lugar de la transición entre la naturaleza y la cultura, todo el legado cultural que Joaquín debía cargar era mucho para su condición y para sus intereses y la madre enajenada en la religión no sabía cómo afrontar este tipo de diferencias de pensamiento y gustos entre padre e hijo, esto me hace recordar La Infancia de un Jefe, muy similares en cuanto a la carga social que estos protagonistas llevaban, debían ser los “Jefes” fuertes, leales y honestos como los padres.

Aunado a lo anterior me parece interesante como desde niño Joaquín desea renunciar a sus instintos, a su sexualidad para encajar en algo que no le satisface y al mismo tiempo tratar de complacer a ambos padres, luego a la novia, luego a los amigos y así pasa la trama tratando de complacer a todos, algo que realmente es imposible lograr. De esto parte la idea de realizar un análisis suficientemente profundo que demuestre que la base de todas las reacciones no es la antítesis amor y odio, como tampoco la de Eros e instinto de muerte, sino la oposición entre yo "persona"; ello =placer del yo y mundo exterior . Claro está que nuestro exterior, es uno de los tantos factores que influyen en el desarrollo de nuestra personalidad como en las decisiones que tomemos a lo largo de nuestra vida, en el caso de Joaquín el decidir manejar una doble vida entre lo que deseaba y lo que debía cumplir ante su familia y sociedad, cumplir con lo que se le tenía establecido en su condición de hombre.

Lo interesante en esta decisión es como dentro de la película se expone el tema de que algunos hombres casados tienen también que reprimir sus deseos con tal de cumplir con lo que la sociedad les exige para ser “hombres”, leía un artículo de una poeta argentina como la sociedad se ha vuelto falocéntrica, todo gira en torno a la dominación del macho, no del hombre, sino un macho que desea reafirmar su poder y su papel como proveedor de fortaleza y fuerza dentro de la sociedad, algo en lo que coincido ya que muchos hombres, claro que nosotras las mujeres también enfrentamos la problemática de no tener la libertad de expresan lo que realmente nos gusta tanto en el aspecto sexual como en tareas cotidianas.

Dentro del psicoanálisis se ve como una patología a la homosexualidad y algo contra lo cual debía realizarse una lucha constante ya que era una aberración, pero realmente y muy personalmente no considero que sea solamente algo que no debe ser sino más bien como cualquier otra cosa es una satisfacción muy personal y que así como existe placer al realizar diversas fantasías también existe al realizar una relación sexual con el mismo sexo.

Cada cultura acepta o rechaza la homosexualidad de acuerdo a su capacidad de clasificarla, el empeño del imaginario social continua enfatizando las prácticas sexuales como articuladoras de la vida social y cultural , por lo cual se debe vivir una vida sexual de acuerdo a lo estipulado según la sociedad, prohibido lo que se salga dentro de los esquemas ya establecidos.

Debido a lo anterior no está demás agregar que la sociedad es quien nos da y nos quita lo que debemos y no debemos ser para poder encajar dentro de los estereotipos establecidos, pero al hacer y seguir las reglas que se nos imponen muchas veces renunciamos a lo que en realidad nos hace felices y que por consecuencia nos haría un mejor individuo dentro de la sociedad, seguimos los imaginarios ya establecidos y por ello nos hacemos infelices siendo algo que en realidad no nos satisface.

La homosexualidad muchas veces es tomada como una condición de los hombres solamente, pero las mujeres muchas veces deben también renunciar a quienes en realidad son para cumplir con el papel que la sociedad le impone, no solamente en la atracción de mujer a mujer sino también en la satisfacción sexual que con todo derecho debemos tener también, muchas mujeres son infelices sexualmente porque se les tiene prohibido expresarse, sentirse y mucho más exigir que también sean tomadas en cuenta sus ideas, fantasías y sentimientos.

Para poder profundizar un poco, no solamente en el tema homosexual de hombres, sino la sexualidad de la mujer que también desde niña, dentro de la familia nuestras madres responden también a los requerimientos de la sociedad falocéntrica, como mencionaba anteriormente, si no se es virgen al llegar al matrimonio no tenemos el derecho de que

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