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POBREZA, FAMA, TRAGEDIA Y MUERTE


Enviado por   •  31 de Marzo de 2015  •  2.361 Palabras (10 Páginas)  •  169 Visitas

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POBREZA, FAMA, TRAGEDIA Y MUERTE

Por: Antonio Caicedo M.

La música del caribe ha estado marcada por la alegría de sus ritmos y la grandeza de sus exponentes, dos de los géneros que más arraigo tienen en esta región del mundo son la Salsa y el Vallenato, cada uno de ellos tiene un artistas que logró ganar la simpatía de sus pueblos, ganaron una admiración que roza con la idolatría, artistas que nacen de familias muy pobres, que empiezan su carrera desde abajo y que poco a poco van escalando hasta llegar a lo más alto de la cima, alcanzan la fama, ganan mucho dinero, caen en el mundo de las drogas, llegan a los peores excesos, al sexo desenfrenado, llegan las tragedias y la muerte. Ambos hoy convertidos en leyendas, por el Vallenato Diomedes Díaz Maestre, más conocido como el Cacique de la Junta y por la Salsa Héctor Pérez Martínez, más conocido como Héctor Lavoe.

El primero nace el 26 de mayo de 1957 en La Junta, corregimiento de San Juan del Cesar, municipio ubicado en La Guajira colombiana, desde muy niño soñó con ser alguien reconocido, quería ser el compositor más grande la música vallenata, al principio no pensó en ser cantante aunque mostraba sus dotes desde temprana edad, estando en una parranda con los hermanos Zuleta, el padre de estos, el viejo Emiliano, cuando lo escuchó cantar dijo, ‘ese muchacho va a servir, será sin duda uno de los más grandes’, y no se equivocó.

El segundo, nace en la ciudad de Ponce, en Puerto Rico, el 30 de septiembre de 1946. Su padre, quien tocaba la guitarra con tríos y orquestas locales dio instrucción musical a su hijo y lo matriculó en la Escuela gratuita de Música Juan Morel Campos, tenía el sueño de ver a su hijo convertido en un gran saxofonista y aunque éste aprendió los fundamentos de música, pronto perdió interés en el instrumento, sentía que lo suyo era cantar, soñaba con hacerlo en Nueva York, ser grande, hacer fama y fortuna.

Diomedes, cuando niño se dedicó a ayudar a la familia, por lo que dejó el colegio, campesino como su padre, quien se ganaba el día como jornalero en fincas vecinas. Siendo él el hermano mayor debía ayudar en la casa, moler el maíz para las arepas y los bollos que él mismo salía a vender, también trabajaba como espantapájaros cuidando maizales en fincas cercanas, mientras cuidaba los sembrados cantaba y cuando los indios de las fincas vecinas le pedían que cantara alguna canción, este les decía que cantaba si le daban una taza de café con bollo o algo para desayunar, demostrando así que si querían escucharlo debían pagarle. De adolescente perdió el ojo derecho al recibir accidentalmente una pedrada cuando con algunos amigos trataba de alcanzar un racimo de mangos.

Héctor, muy jovencito participa en un concurso de canto en la escuela de música donde asistía, pero quedó descalificado cuando se le salió un tremendo gallo en plena actuación, ‘fue lo más decepcionante para él’, dijo Papo Lucca, quien era uno de sus compañeros de clase. El 3 de mayo de 1963 a la edad de 17 años llegó a Nueva York, sus primeros trabajos fueron como pintor, maletero, mensajero y conserje. No fue sino hasta que su amigo de la infancia, Roberto García, que vivía en Nueva York, lo invitó a asistir a un ensayo de un sexteto que se estaba formando, el vocalista cantaba el bolero Tus ojos y el director no estaba conforme con el número, así que Héctor le sugirió como podía hacerlo y la banda lo asimiló inmediatamente como su cantante principal. Años más tarde Lavoe grabó esa canción con su propia orquesta.

La primera composición oficial de Diomedes fue Mi Dolor de Cabeza interpretada por Freddy Peralta con el conjunto de los Hermanos López, aunque la que le dio reconocimiento fue Cariñito de mi vida , interpretada por el Conjunto de Emilio Oviedo en la voz de Rafael Orozco, donde dicho sea de paso, este lo saluda diciendo, ‘El Cacique de la Junta, Diomedes Díaz’ y desde ese momento así se le comenzó a llamar al cantante vallenato.

Héctor graba por primera vez como cantante del Conjunto La New Yorker, dirigido por el pianista Russell Cohen en 1965, un sencillo de 45 revoluciones donde aparece la canción Está de bala, mejor conocida como Mi china me botó , composición del cubano Arsenio Rodríguez, hoy en día es considerada una verdadera pieza de colección muy difícil de conseguir.

Diomedes, luego de la grabación de sus primeras composiciones se desempeñó como mensajero en bicicleta en la emisora Radio Guatapurí de Valledupar, aunque como él mismo lo dijo, ‘yo no sabía manejar la bicicleta y la dejaba guardada cerca de la emisora, hacia todas las diligencias a pie, no quería perder el empleo y tampoco el contacto con los programadores para que me sonaran los temas míos’. En 1976 grabó por primera vez junto con el acordeonero Náfer Durán, hermano de Alejandro Durán, el disco Herencia Vallenata, donde se destacó la canción El Chanchullito , tema de su propia inspiración.

Héctor quería grabar con una orquesta grande, en varios conciertos cantó con la orquesta de Johnny Pacheco, quería grabar con éste pero Pacheco tenía como cantante a Pete el Conde Rodríguez, por lo que no había cupo para él. Para esa época de 1967 Willie Colón tenía listo su primer álbum para Fania Records y a Pacheco no le gustó el cantante de esa orquesta y propuso a Héctor Pérez para que lo sustituyera, además de eso Pacheco le cambió el Pérez por Lavoe (Lavoe es La voz en francés), ya que Héctor admiraba mucho a Felipe Rodríguez, un cantante de baladas al que llamaban La voz. En un principio Lavoe no estaba interesado en grabar con Colón, ya que consideraba que ese grupo tenía un sonido terrible, pero por la presión de Fania Records cedió, aclarando que grababa ese álbum y se iba, la compañía aceptó, tanto así que Héctor se negó a participar en la portada del disco, más tarde sería reconocido como El cantante de los cantantes, porque era el cantante preferido por los mismos cantantes.

Llega lo mejor de sus carreras, Lavoe sigue con Colón debido al gran éxito que estos logran grabando así por muchos años. Diomedes graba luego con Elberto ‘el Debe’ López con quien logra reconocimiento nacional, viene la fama de ambos, Diomedes se convierte en el más grande vendedor de discos en la historia de la música vallenata, en un principio antes de cada canción mordía un terrón de panela que cargaba en el bolsillo para aclarar la voz y solo tomaba consomé de pollo entre canción y canción. Lavoe entra a las Estrellas de Fania, la orquesta más grande que ha dado la Salsa en todos los tiempos, compartiendo tarima con Johnny Pacheco, Eddie Palmieri, Cheo Feliciano, Ray Barretto, Ricardo Ray, Santos Colón y toda esa constelación de estrellas que ninguna

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