“Teatro IUTEB Teatro UBV” Drama de arcilla (Autor: Aníbal Rodríguez)

“Teatro IUTEB Teatro UBV”

Drama de arcilla (Autor: Aníbal Rodríguez)

(En el escenario aparecen todos los actores, hay tensión mientras Rosa vestida de novia lee un papel en voz baja luego Rosa Grita se desespera, destruye indignada el escenario. El espacio se inunda de fotos de canciones de voces. Algunos actores le quitan el vestido de novia a Rosa. Todos los actores salen de escena como si pasase una página de un libro, Rosa queda sentada en una silla, se escucha el sonido de un Avión) Rosa: (se Escucha un sonido de Avión)

 Rosa: ¡Baja!... ¡baja!... ¡cobarde!... ¿por qué no me lo dices a mí?  En vez de andar insinuándomelo en el cielo... ¿qué hora es?... ¡no ves, la misma!...siempre pasa a la misma hora, ¡pobrecito!...pero es que allá arriba nadie te va a seguir. Yo sé que lo haces porque me amas…Me lo dicen en la cabeza, una voz que me entra, por eso lo sé, entra por una mano y me llega  a la cabeza…¡déjenme tranquila!...¡Héctor!...¡Héctor!...¡mijo anda para el seguro quítame los cables!...y ese estúpido, digo yo ¿no es mejor que baje y me lo diga a mí?...El Bracamonte ese, igualito que Bracamonte el chofer del bus, vos habeis visto pinto todos los buses de amarillos y pasa en las tardes tocando su corneta, me mira y luego se va…¡Que enamoramiento! Me dicen en la cabeza que pinto todos los buses de amarillo por mí… ¡jha! Y a mí me gusta es el color violeta. Dígame el Copeyano, ese que se llama Bracamonte, pinto los bahareques de la concepción: “Rosa te amo…Vota verde”, muy romántico, pero pone en duda mi integridad personal con eso de escribir mi nombre por todas partes ¡no mijo! Yo no soy boba, ese no tiene posibilidad, tampoco otros ¡nadie!...”Yo era como un reflejo débil en tu vida”…Yo seré sola… ¿Qué hora es?...Hora para bañarme, hora para vestirme, ¡Elena ya es hora para la pastilla!...”para encenderme solamente bastaba una sonrisa”… ¡Mamá! Me dio el ataque se vio las pantaletas…”caíste abierta en la calle”…”me lo negaste todo, usurero malvado”… ¡esta casa es mía! No crea Elena que se la va a robar, ella tiene derecho a atenderme, a darme de comer, porque está viviendo en mi casa, “se me hizo la mirada de marinero bruto”…no yo no le voy a prestar el álbum, además ustedes se burlan de las fotos, de las modas, siempre se ríen…¡no el Álbum no!, ¿para qué? Hiede a moho…”ladrón de lejanías” ¡el horóscopo no sirve! Siempre me ubica como secretaria, empleada, millonaria… ¡Elena la pastilla!, Yo jure no amar a otro hombre…”Más yo seré de mármol mientras tu seguirás siendo de arcilla”… ¡ayúdame Héctor! ¡Quítame los cables!... ¡Me lo dicen en la cabeza! ¡Bracamonte!... ¡Baja!... ¡Baja!

Rosa: Esta tibia

Elena: No hay hielo

Rosa:   siempre que mando a buscar algo me lo dan como  yo no  quiero.

Chinda: Yo no voy a barrer.

Lucila: Te toca a vos.

Ramona: (Leyendo el periódico) ¡dejen de pelear, Tu Lucila barre!

Lucila: Yo lo hice ayer.

Rosa: ¡Héctor limpiaste los zapatos!

Héctor: …sí.

Rosa: menos mal porque una maestra siempre tiene que estar presentable.

(Chinda y Lucila discuten acaloradamente sobre quien debería barrer)

Rosa: si no se comportan voy a darles clase.

Lucila: Aun así yo no barro.

Rosa: entonces les doy clases

Chinda: ¡otra vez!

Rosa: ¿Cómo que otra vez? ¡Que es esa falta de respeto!

Chinda: siempre lo mismo cada vez que hablan de eso terminan  en el aula.

Ramona: ¿y qué? ¡Cállate!

Lucila: ¡están locas!

Ramona: ¡bueno pues, se callan!

Rosa: ¡Maestra! Mamá, Nunca terminare de agradecerte.

Ramona: ¿Quieres ser Maestra?

Rosa: ¡sí!

Chinda: ¡no ven! ¡Ven!

Rosa: ¡todo el mundo a sentarse!

Ramona: ¡Riiinn! ¡El timbre!

Lucila: Yo no me voy a sentar

Elena: Hazlo es lo mejor

Héctor: es verdad, es mejor.

Ramona: ¡todo el mundo a escuchar las clases de la maestra Rosa!

Rosa: ¡Todos!, ¡Una y una son: dos!

Todos: una y una son: dos

Rosa: Ahora todos: ¡La eme con la A dice: “Ma”!

Todos: la eme con la A dice: “Ma”.

Lucila: Héctor por favor has algo

Elena: si, dile algo.

Héctor: pero, ¿Qué?

Elena: Yo que se vos siempre inventais algo.

Rosa: Presten atencion

Héctor: ¡Rosa!

Rosa: ¡Maestra Rosa! ¿Es que no ves que estoy dando clases?

Héctor: Bueno: Maestra Rosa.

Rosa: así está bien. ¿Dime?

Héctor: ¿vos no sabeis que mañana hay una fiesta…? (Lucila y, Chinda y Elena se miran con malicia comprendiendo a Héctor)

Rosa: ¿Fiesta?

Héctor: Si, en el club.

Lucila: ¡en el club no!

Ramona: ¡te estoy oyendo, Lucila!

Héctor: Sera una fiesta única. Solo habrá gente importante como el Prefecto, el Presidente del club de leones, y los gringos de la compañía.

Rosa: ¡Sí!... ¿En el Club?

Lucila: ¡No! ¡No!

Ramona: ¡Lucila!

Héctor: Una fiesta a tu altura, Rosa.

Rosa: si.. el el club...

Lucila: ¡no, no no!

Ramona: ¡Lucila!

Hector: una fiesta a tu altura Rosa

Chinda: pero no será en el club, ¿no?

Rosa: ¡será en el club! Saben que es para la única fiesta a la que yo asistiría.

Lucila: Si, pero nosotras no. Te parais en el portón y te inflais a no dejar pasar a nadie.

Rosa: A nadie no, solo a la chusma.

Lucila: Bueno, a nadie.

Ramona. ¡Cállate, Lucila! Además ella tiene razón, una dama como Rosa, Maestra Graduada, jamás podrá juntarse con cualquiera.

Elena: No, solo con los Viejos barrigones. (Risas)

Rosa: ¡que es la falta de respeto!

Lucila: Es verdad. A las fiestas del Club solo van viejos barrigones, tontos.

Rosa: ¡Gente! ¡Gente!

Lucila: A costa de que sois la presidenta del club, te aprovechais de eso para humillar en el portón… (Imitando poses de Rosa, exagerando)…vos no entrais, tu mamá no se ha casado con tu papá, vos tampoco, sois un hijo natural; vos menos, a vos te dejo tu marido y te buscaste otro…

Ramona: Ahora si se van a joder (va hacia un rincón y saca una correa; comienza a golpear a todos, hay llantos, gritos)… ¡para que aprendan!

Elena: Si, a nosotras siempre nos pegais, a Rosa no…

Ramona: Ella es una Dama, Ustedes son las peores.

Rosa: (Sube a la escalera y se muestra imponente)…Estúpidos mercenarios, sin mí no pueden vivir, yo soy Cleopatra, Margaret Thatcher, Marilyn Monroe…

Elena: Y nosotras somos Virginia gil de Hermoso, Ana María Campos…

Lucila: María Calcaño, Isadora Duncan. No te podeis Comparar.

Rosa: ¡Cállense! ¡Qué saben ustedes!

Lucila: ¡mucho! ¡Mucho!

Héctor: (tratando de apaciguar) ¡mañana será la fiesta!

Rosa: ¡la Fiesta!

Ramona: Iras bien Bonita.

Rosa: Iré bien bonita

Ramona: Bailaras con el Prefecto

Rosa: Bailare con el Prefecto

Ramona: Bailaras con los gringos

Rosa: Bailare con LOS GRINGOS.

Lucila: ¡Esos son viejos catires!

Ramona: ¡si volveis a decir que son viejos catires te rompo la jeta!

Chinda: Viejos barrigones, altísimos y con una nariz larga y manos y pies grandísimos.

Rosa: Pero respetables caballeros y no esos cochinos amigos morenos de ustedes.

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