Analisis de la Demanda

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Analisis de la Demanda

Dentro del análisis recomendado por Güell para las ciudades, se determina que una ciudad es un entorno cambiante que está sujeto a ciertas demandas para su desarrollo, estas pueden ser de parte de empresas, instituciones, residentes e inclusive turistas. Es sumamente complejo, a diferencia de otro tipo de demandas, satisfacer las producidas por una ciudad, debido a su infinidad de posturas y muy posibles contradicciones entre los distintos grupos de la sociedad, sin embargo, si se desea tener éxito en planificaciones para ciudades, se debe tomar en cuenta este importante rubro. Es decir, la planificación debe responder a las necesidades o a la demanda existente, para que sea ejecutable.

Para el desarrollo de la teorización del análisis de la demanda, Güell cita a Jacobs Jane, cuando ella dice que los diseños y planificaciones urbanísticas deben tener como objetivo principal la idoneidad para el florecimiento de una amplia variedad de planes, ideas y oportunidades no oficiales; esto, una vez entendido que la ciudad esta determinada por agentes económicos, sociales, ciudadanos y visitantes. Ella, además, hace alusión a que cada agente individual de la sociedad, requiere de una serie de pautas que conforman su demanda, que no solo son de ocupación laboral y alojamiento, sino que se amplían a una buena educación, ocio, comunicaciones y una administración accesible, lo cual se convierte en un verdadero reto para los lideres de ciudad. Y justamente, a raíz de esta insatisfacción, surgen ciertas eventualidades como las asociaciones que velan por los derechos humanos, así también la fuerte desconfianza hacia temas políticos.

Güell expresa, que, en muchas ocasiones, el principal error en las planificaciones de ciudad, es que ha sido pensada a partir de la oferta, más no de la demanda. Es decir, basados en criterios tecnocráticos y de una practicidad poco probable, se han preocupado por llenar a la ciudad de lo que creen, con razonamientos superficiales, que necesita la ciudad. No olvidemos que la insistencia en planificar la ciudad desde el lado de la demanda no se debe a una exigencia purista, sino a una creciente demanda del tejido social.

Si se desea hacer una planificación mas efectiva y subjetiva, se puede optar por la segmentación de la demanda urbana, de manera que se pueda satisfacer a grupos diferenciados de la sociedad, sin temor a no correspondencias o a equivocaciones por abarcar grandes grupos. Si se decide adoptar el modelo tradicional de la demanda urbana, la planificación obtenida deberá satisfacer en cambio las demandas en común de la sociedad en cuestión.

En referencia a la segmentación, se sigue una serie de 3 pasos que optimizaran el proceso y veracidad de resultados: en primer lugar, debemos cuestionarnos sobre ¿a quienes deseamos satisfacer? y ¿cuáles son las necesidades a satisfacer? Luego, procurar que esta sea identificable y medible, accesible, sustancial, diferente y posible. Y posteriormente determinar que criterio se va a utilizar para el análisis: objetivo o subjetivo. Entre los criterios objetivos encontramos los demográficos, socioeconómicos y geográficos, y entre los subjetivos: los socioculturales, de personalidad y de estilo de vida.

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