¿Benchmarking es ético?

¿Benchmarking es ético? 

Antes de responder a esta pregunta, debemos recordar el concepto del benchmarking. 

El Benchmarking es una herramienta que es muy utilizada por gran cantidad de empresas en la actualidad. Se trata de una herramienta que si bien algunos autores aún no se han puesto de acuerdo de la definición exacta, si se tiene una idea de lo que significa y de cómo utilizan las empresas dicha herramienta. 

El Benchmarking consiste en investigar, capturar y analizar información relativa a las empresas que desarrollaron o tuvieron mayor éxito en alguna área en especial; y en base a esas ideas, aplicarlas a nuestra empresa con el fin de hacerla crecer e innovarla. Este proceso se repetirá todas las veces que sea necesario para la empresa. 

• Me parece muy interesante esta herramienta, ya que cualquiera podría pensar que cuando deseamos innovar o mejorar alguna área de nuestra empresa es necesario a acudir únicamente a expertos o a la teoría de los libros. Sin embargo, vivimos en un mundo en constante evolución y muchas veces los modelos más eficientes de ventas cambian de un momento a otro, dejando atrás a la teoría. 
  
  Es por ello que, el Benchmarking, acude precisamente a la práctica, en base a los resultados obtenidos por cierta empresa. Por lo tanto, si dicha empresa obtuvo grandes resultados en cierta área, no nos quedará duda que la organización que tiene en dicha área es eficiente. 
  
  Es decir, mediante el benchmarking acudimos directamente a la práctica en base a los resultados tangibles de la empresa que tomamos como modelo. 
  
  Existe una frase muy interesante que dice, “si quieres ser el mejor en algo, acércate a los mejores en dicho campo”; y esta frase es la premisa en la que se fundamenta el benchmarking. Si de alguna manera, copiamos, imitamos, captamos y asimilamos las mejores técnicas y procesos de una organización en éxito, y las aplicamos a nuestra empresa, existe la posibilidad de que no sólo adquiramos el mismo nivel de éxito de dicha empresa sino que hasta la superemos. 
  
  De esta manera concluyo que el proceso del benchmarking es muy válido, siempre y cuando no se busque “copiar” procesos, sino aprender de ellos e innovarlos, buscar siempre superar a la competencia y no quedarse al nivel de ella, de ésta manera no sólo tendrá un gran mérito sino que nuestra empresa después se volverá modelo para muchas más. 
  Por otro lado, retomando la pregunta planteada en éste artículo, nos será de gran utilidad recordar el concepto de Ética. 
  La Ética es una ciencia de carácter normativo que intenta tanto estudiar como normalizar las conductas humanas con el fin de promover el bienestar entre las relaciones humanas. No se consideran éticos todos aquellos actos que vayan en

contra del bienestar en las conductas y relaciones humanas, y que de alguna manera, provoquen o causen algún daño a las mismas. Yo considero que el benchmarking no es una práctica anti-ética, debido a que en ningún momento ataca la dignidad de las personas, ni tampoco de modo directo, la integridad de una empresa. Considero que el benchmarking es parte de la libertad que tanto individuos, grupos, sociedades, empresas, etc., gozan con la intención de superarse a cada instante, y convertirse en lo que deseen, superar sus defectos y alcanzar sus objetivos propuestos. 

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