Cartas De Credito Para Importacion Y Exportacion

Este documento se utiliza en las operaciones de compra y venta entre sujetos de distintos países. Generalmente usado para traspasos de grandes cantidades de dinero desde el comprador hacia el vendedor, y también puede certificar la recepción de la mercadería.

Cartas de crédito de exportación:

Convenio en virtud del cual un exportador recibe por parte del Banco, la comunicación de que existe una garantía a su favor, para poder exportar su mercancía a cambio de condiciones de su comprador, emisor de la Carta de Crédito. Cuyas características son: Toda la operación de intermediación por parte de los Bancos, se realiza siempre y cuando se cumplan con las condiciones establecidas en la carta de crédito. Y una vez recibido el importe correspondiente al valor de los documentos, el Banco abonará de inmediato a su cliente.

Por lo expuesto, los principales beneficios en mi parecer serían:

Permite conciliar intereses tanto del importador como del exportador

El proceso de cobro es seguro: La entidad bancaria responde por el comprador y luego arregla cuentas con él. Es una certeza de que se recibe el pago, más allá de cualquier crisis, complicaciones en el mercado, o desaparición de los clientes.

Se rigen por leyes internacionales las cuales unifican criterios e interpretaciones

Permite la apertura a nuevos clientes: No sólo lleva más allá los límites de nuestro mercado, sino que también da la posibilidad a los potenciales clientes de adquirir nuestros productos de manera más accesible, pudiendo financiar los pagos.

La Financiación proviene del banco: La financiación correrá a cargo del banco, y una vez cumplamos los requisitos acordados, recibiremos el pago de la venta en su totalidad, mientras que será el banco quien cobrará al comprador, según la financiación que hayan pautado entre partes.

Garantiza el cumplimiento de los pedidos realizados

También garantiza el pago de la venta o compra de mercancías entre el importador y exportador, debiendo únicamente tener cuidado de cumplir con los términos y condiciones establecidas en la carta de crédito.

Los trámites no corren por cuenta del exportador: La parte del papeleo, los tiempos y formas de entrega corresponden a la entidad bancaria, solo quedará el cobro de la exportación, ya que los honorarios correrán por cuenta del comprador.

Existe documentación respaldatoria: Así como para el cobro, quedarán como respaldo los comprobantes como por ejemplo las certificaciones de embarcación, demostrando así ante cualquier eventualidad que hemos respondido correctamente a lo pactado.

Brinda al exportador la seguridad en el manejo de sus documentos, siguiendo las instrucciones de su carta remesa.

Se puede controlar la calidad de los productos: Dentro las cláusulas que son adaptables a las necesidades de los compradores, se deben incluir los controles de calidad o puntualidad en la entrega para hacer efectivo el pago de la compra.

Las relaciones con el comprador permanecen intactas: Puesto que la rendición de cuentas será con la entidad bancaria, no se tiene ningún problema con los clientes dando continuidad a futuras negociaciones. Ya que de persistir alguna deuda anterior no será directa con el exportador.

En resumen para el exportador, esto implica cierta seguridad de cobro, dado que el emisor asume el riesgo. Si vendemos productos al extranjero y recibimos una carta de crédito de una entidad bancaria, al cumplir con nuestros deberes cobraremos el dinero por el precio de venta. El comprador entonces, deberá rendir cuentas, pero ese riesgo nos excede y es exclusivo del banco.

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