EL MERCADO

EL MERCADO

Cuando hablamos de Mercado lo primero que se nos viene a la mente es el lugar al cual vamos y hacemos nuestras compras cotidianas, como son: comida, ropa, etc., pero la realidad es que la palabra mercado tiene un significado más extenso, se refiere en general a un acuerdo entre compradores y vendedores de una mercancía determinada, se trata de ponerse de acuerdo en el precio y las condiciones para que la transacción sea favorable para ambas partes.

Existen cuatro elementos que conforman el mercado:

La existencia de bienes y servicios que serán negociados.

La presencia de la oferta de vienes y servicios por medio de los vendedores.

La demanda de bienes y servicios por parte de los compradores

La existencia del precio del mercado de bienes y servicios.

Hay diferentes tipos de mercados, mercados de bienes, de servicios, de divisas, de valores financieros, de trabajo, e incluso mercado negro etc. Los hay físicos, por teléfono, online, etc. Pero la finalidad sigue siendo la misma, y es el poder lograr hacer una compra-venta que sea favorable tanto para el vendedor como para el comprador.

En un mercado perfecto tanto compradores como vendedores fijan el precio, las condiciones y se realiza la transacción sin ningún contratiempo, pero la realidad es muy diferente ya que hay varios factores que hacen que dicha transacción no se realice a la brevedad que se espera.

Aquí es donde entra la oferta y la demanda.

Oferta: es la cantidad de bienes o servicios que los productores están dispuestos a ofrecer a un precio dado en un momento determinado.

Demanda: es la cantidad y calidad de bienes o servicios que los consumidores están dispuestos a comprar a un precio y unas condiciones dadas en un momento determinado. 

A mayor demanda de productos o servicios, es menor la oferta y es cuando los vendedores tienen la ventaja para fijar los precios a su favor, ya que saben que el consumidor necesita ese producto y lo comprara al precio que sea, un ejemplo de esto es cuando hay escases de aguacate ya sea por sobredemanda, fuera de temporada, o por algún desastre natural, los consumidores lo compraran al precio que sea, puesto que es un producto que no es fácil de remplazar. Sin embargo, existen otros productos en los cuales hay manera de sustituir ante pobre oferta como el Pavo (en épocas decembrinas) por cualquier otra proteína como pollo o carne, y todo esto para mantener un equilibrio entre la oferta y la demanda.

Al bajar la demanda, se incrementa la oferta de productos y servicios, por lo que los proveedores se ven forzados a reducir los precios para hacerlos atractivos al consumidor. 

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