Ensayo Brasil
Gardenia833 de Mayo de 2013
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Introducción
Brasil, oficialmente República Federativa del Brasil, es un país ubicado en América del Sur que comprende la mitad oriental del subcontinente y algunos grupos de pequeñas islas en el océano Atlántico. Con una superficie estimada en más de 8,5 millones de km², es el quinto país más grande del mundo en área total (equivalente a 47% del territorio sudamericano). Delimitado por el océano Atlántico al este, Brasil tiene una línea costera de 7491 km. Al norte limita con el departamento ultramarino francés de la Guayana Francesa, Surinam, Guyana y Venezuela; al noroeste con Colombia; al oeste con Perú y Bolivia; al sureste con Paraguay y Argentina, y al sur con Uruguay. De este modo tiene frontera con todos los países de América del Sur, excepto Ecuador y Chile. En su mayor parte, el país está comprendido entre los trópicos terrestres, por lo que las estaciones climáticas no se sienten de una manera radical en gran parte del mismo. La selva amazónica cubre 3,6 millones de km² de su territorio. Gracias a su vegetación y a su clima, es uno de los países con más especies de animales en el mundo.
Brasil, hasta entonces habitado por indígenas, fue descubierto por los europeos en 1500, por una expedición portuguesa liderada por Pedro Álvares Cabral. Tras el Tratado de Tordesillas, el territorio brasileño fue el segmento del continente americano que correspondió al reino de Portugal, del cual obtuvo su independencia el 7 de septiembre de 1822. Así, el país pasó de ser parte central del reino de Portugal a un imperio para finalmente convertirse en una república. Su primera capital fue Salvador de Bahía, que fue sustituida por Río de Janeiro hasta que se construyó una nueva capital, Brasilia. Su constitución actual, formulada en 1988, define a Brasil como una república federativa presidencialista. La federación está formada por la unión del Distrito Federal, los 26 estados y los 5565 municipios.
A pesar de que sus más de 192 millones de habitantes hacen de Brasil el quinto país más poblado del mundo, presenta un bajo índice de densidad poblacional. Esto se debe a que la mayor parte de su población se concentra a lo largo del litoral, mientras el interior del territorio aún está marcado por enormes vacíos demográficos. El idioma oficial y el más hablado es el portugués, que lo hace el mayor país lusófono del mundo. Por su parte, la religión con más seguidores es el catolicismo, siendo el país con mayor número de católicos nominales del mundo. La sociedad brasileña es considerada una sociedad multiétnica al estar formada por descendientes de europeos, indígenas, africanos y asiáticos. La economía brasileña es la mayor de América Latina y del hemisferio Sur, la sexta mayor del mundo por PIB nominal y la séptima mayor por paridad del poder adquisitivo (PPC). Brasil es una de las principales economías con más rápido crecimiento económico en el mundo y las reformas económicas dieron al país un nuevo reconocimiento internacional, tanto en el ámbito regional como global. El país es miembro fundador de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), G20, Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP), Unión Latina, Organización de los Estados Americanos (OEA), Organización de los Estados iberoamericanos (OEI), Mercado Común del Sur (Mercosur) y de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), además de ser uno de los países BRIC.
Antecedentes Históricos
Los primeros intentos por independizar al país del control portugués adoptaron los ideales republicanos. En el siglo XIX casi todos los brasileños estaban a favor de la monarquía y el republicanismo tenía poco apoyo. La Guerra de Independencia de Brasil se propagó por casi todo el territorio, mientras que las principales batallas se libraron en las regiones norte, noreste, y sur. Los últimos soldados portugueses se rindieron el 8 de marzo de 1824, y la independencia fue reconocida por Portugal el 29 de agosto de 1825, en el tratado de Río de Janeiro.
Tras haber sido aprobada por los consejos municipales de todo el país, el 25 de marzo de 1824 se promulgó la primera constitución. El 7 de abril de 1831, Pedro I abdicó cuando regresó a Europa para recuperar el trono de su familia, dejando a su hijo de cinco años como sucesor, Pedro II. Como el nuevo emperador no podía ejercer sus funciones, se creó una regencia. Las disputas entre distintas facciones políticas llevaron a rebeliones y a una regencia inestable y casi anárquica. Sin embargo, los grupos rebeldes no estaban en contra de la monarquía, aunque algunos declararon la secesión de sus provincias como repúblicas independientes, pero sólo mientras Pedro II fuese incapaz de gobernar. El caso más notorio fue el de Río Grande del Sur y Santa Catarina los cuales, por medio de la Guerra de los Farrapos, se proclamaron independientes del Imperio brasileño. Debido a esto, Pedro II fue declarado emperador prematuramente y «Brasil disfrutó de casi medio siglo de paz interna y un rápido progreso económico.»
Durante los 59 años de reinado de Pedro II, Brasil resultó victorioso en tres guerras internacionales: la Guerra Grande, la Guerra contra Aguirre y la Guerra de la Triple Alianza, además de que atestiguó la consolidación de la democracia representativa, principalmente debido a la realización de elecciones sucesivas y a la libertad de imprenta. La esclavitud se extinguió en un proceso más lento pero constante, que comenzó en 1850 con el fin del tráfico internacional de esclavos, y terminó con la total abolición de la esclavitud en 1888. Sin embargo, desde la independencia la población esclava se encontraba experimentando un declive: en 1823, el 29% de la población estaba compuesta por esclavos, pero para 1887 este porcentaje se había reducido hasta el 5%.
Cuando el Imperio fue derrocado el 15 de noviembre de 1889, hubo poco interés por parte del pueblo brasileño para cambiar la forma de gobierno de una monarquía a una república, ya que Pedro II estaba en el auge de su popularidad entre sus súbditos. El golpe militar republicano fue apoyado por los antiguos propietarios de esclavos que se negaban a aceptar la abolición de la esclavitud pactada en 1888 por el gobierno monárquico.
Un golpe de estado en 1930 llevó a Getúlio Vargas al poder, donde permanecería por quince años. Como en un principio el gobierno republicano era poco más que una dictadura militar, la nueva Constitución promulgada en 1891 convocó elecciones directas para el año 1894.
Este documento también abolió las restricciones del derecho al voto que existían en el período monárquico, cuando sólo se les otorgaba a aquellos que tuviesen un nivel de ganancias determinado, aunque mantuvo el carácter abierto del voto y, entre otras medidas, sólo se permitía la participación de los hombres alfabetizados, en una época en la que la mayoría de la población brasileña era analfabeta.
Durante el primer periodo de gobierno republicano, Brasil mantuvo una política exterior pacífica y neutral, que sólo fue interrumpida por la Guerra del Acre, y la Primera Guerra Mundial. Internamente, luego de la crisis del ensillamiento, y de la Revuelta de la Armada en 1891, se inició un ciclo prolongado de inestabilidad financiera, política y social que se extendería hasta la década de 1920, manteniendo al país asolado por diversas rebeliones que poco a poco minaron el régimen. Entre estas se destacan la Revolución Paulista, la Revolución del Fuerte de Copacabana, la Comuna de Manaos y la Columna Prestes. Finalmente, en 1930 Getúlio Vargas, que había sido candidato presidencial en las elecciones de ese año, lideró un golpe de Estado y asumió la presidencia de la república con el apoyo de los militares.
Vargas y los militares, quienes dijeron asumir la presidencia temporalmente a fin de implementar reformas democráticas, disolvieron al Congreso y continuaron su mandato bajo un estado de emergencia, sustituyendo a los gobernadores de los estados por sus aliados. En 1932, con el pretexto de implementar las promesas de reformas democráticas, la oligarquía paulista intentó recuperar el poder mediante una revuelta, y en 1935 los comunistas se rebelaron, pero ambos movimientos fueron derrotados. No obstante, la amenaza comunista sirvió de pretexto para impedir las elecciones previamente estipuladas, y también para que Vargas y los militares efectuaran otro golpe de Estado en 1937, estableciendo una dictadura. En mayo de 1938 hubo otro intento fallido por tomar el poder, esta vez por parte de los fascistas brasileños.
Brasil se mantuvo neutral durante los primeros años de la Segunda Guerra Mundial, pero diversos acontecimientos llevaron al país a alinearse en favor de los Estados Unidos durante la Conferencia de Río de 1942, rompiendo relaciones diplomáticas con las potencias del Eje. En represalia, las armadas de la Alemania nazi y la Italia fascista extendieron su campaña de guerra submarina a Brasil, y después de meses de continuo hundimiento de navíos mercantes brasileños y la intensa presión pública, el gobierno les declaró la guerra en agosto de aquel año, aunque recién en 1944 se envió una fuerza expedicionaria para combatir en Europa.
Con la victoria aliada al año siguiente y el fin de los dos regímenes totalitarios europeos, la posición de Vargas se tornó insustentable y fue rápidamente depuesto por otro golpe militar. En 1946, la democracia fue restablecida y el general Eurico Gaspar Dutra fue elegido presidente. Vargas regresó al poder a finales de 1950 al ser democráticamente elegido, pero se suicidó en agosto de 1954, en medio de una crisis política.
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