Practicas Mercantilistas En El Salvador

¿Qué es el mercantilismo?

Primeramente es necesario dar una definición preliminar del mercantilismo para luego profundizar en ello. De acuerdo a la Enciclopedia de Economía se define al mercantilismo como una teoría económica que sostiene que la prosperidad de una nación depende de su oferta de capital. El mercantilismo sugiere que el gobierno deberá jugar un papel proteccionista de la economía, mediante el fomento de las exportaciones y desalentar las importaciones, en particular mediante la utilización de los aranceles y subsidios, para aumentar el saldo positivo del comercio con otros países. El mercantilismo, entonces, consiste en una serie de medidas que se centran en tres ámbitos: las relaciones entre el poder político y la actividad económica, la intervención del Estado en esta última y el control de la moneda. (Enciclopedia de Economía, 2009)

Caso de práctica mercantilista

Una vez definido lo que es el mercantilismo, se procede a describir el caso de una práctica mercantilista en El Salvador.

En 2002, los fabricantes de acero se quejaron con sus países sobre la competencia desleal que afrontan por las importaciones. En el caso de El Salvador, las empresas Corinca y Aceros solicitaron al Ministerio de Economía que el arancel se incrementara en 30 puntos porcentuales, es decir, pasar de un 15% a un 40% en materia de arancel (Inglés, 2002a). Esto ciertamente favorecería a estas empresas que eran productoras y comercializadoras de acero pues un incremento en los aranceles evitaría el ingreso de nuevas compañías que quisieran competir en el país y a su vez provocaría una disminución en las importaciones del acero.

Los empresarios del sector de construcción consideraron que aumentar el arancel a la importación de acero atentaba contra la libre competencia y repercutiría en un alza en los materiales utilizados para la construcción lo cual terminaría afectando a los salvadoreños pues sería la población quien pagaría más por inmuebles de este tipo. (Inglés, 2002a).

Así mismo, los importadores de productos de acero no estaban de acuerdo con la posibilidad de subir el arancel ya que como lo señaló el presidente de la Cámara Salvadoreña de la Industria de la Construcción (Casalco), Benjamín Trabanino, la gremial está en contra de que exista un proteccionismo a cualquier tipo de industria, ya que ello atenta contra la libre competencia. (Inglés, 2002a)

El ministro de Economía de Guatemala de ese tiempo, Arturo Montenegro, dijo que no es un secreto que en cada país “hay intereses”, donde el monopolio y las ayudas a grupos se convierten en algunos de los obstáculos que dificultan el aumento de la inversión y el comercio intrarregional. Agregó que el reto es tratar de separar los intereses de la mayoría con los sectoriales, sobre todo cuando funcionarios también velan por sus empresas. (Inglés, 2002b)

Si la medida de eliminar la protección a ciertos sectores se convertía en una realidad, los industriales de acero de la región no conseguirían que sus Gobiernos elevaran el arancel a la importación de dicho producto. (Inglés, 2002b)

Los empresarios consideraron que las compañías locales que producen materiales con acero deberían buscar la

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