Responsabilidad social empresarial.

Hace ya algunos días me encontraba de paseo con mi familia por la ciudad de Bogotá, estábamos felices en uno de los parques pero como el clima de esta ciudad es tan impredecible de un momento a otro empezó a llover, decidimos buscar refugio en uno de los centros comerciales, luego de ver varias vitrinas nos dimos cuenta que en ese centro comercial existía un ÉXITO y al parecer estaban de aniversario por lo cual habían muchas promociones, en el momento en el que entre al supermercado me fije principalmente en los electrodomésticos luego fui a la sección de golosinas haber de que me antojaba, vi a un chico de unos veniti tantos que me llamo mucho la atención, no solo por su físico sino también por lo que llevaba en su canasta ya que eran cosas muy saludables y al parecer le estaba dando paso a la tentación metiéndose a la sección de golosinas, pero al parecer logro vencerla, quería estudiar a este chico saber un poco más de él, así que empecé a seguirlo por el supermercado para ver que era capaz de averiguar con el simple hecho de observar que compraba, fue un poco raro lo confieso ya que nunca había hecho este tipo de cosas.

Me parecía muy interesante su forma de vestir ya que era un poco hípster, lo que me llevaba a pensar que si se metía a la sección de ropa talvez descartaría por completo los colores vivos, el chico caminaba por todo el supermercado primero se metió a la zona de implementos de aseo en donde no dudo ni un segundo lo que quería, él iba por un desodorante y unas máquinas de afeitar al parecer ya sabía que marca era la que más le favorecía, luego se metió a la sección en donde se encontraban los arroces aquí ya no parecía tan seguro por lo que se notaba que no podía decidir entre una marca y la otra, una de las marcas era la del almacén la cual salía considerablemente más económica pero la economía no parecía ser lo suficiente para él ya que fue la primera bolsa de arroz en descartar lo que me llevaba a deducir aún más del ya que si no lo deslumbraba la notable diferencia de precios tal vez era porque ya sabía cosas acerca de la calidad que le garantizaban las marca reconocidas, el chico finalmente se decidió por la bolsa de arroz DIANA.

Cuando él se dedicaba a comparar precios y marcas de arroz logre acercarme un poco más y mirar más detenidamente que era lo que llevaba en su canasta, la canasta estaba compuesta por yogures, queso descremado, leche deslactosada, chocolate sin azúcar, pan árabe entre otros productos que no pude identificar porque los primeros los tapaban.

Al parecer la visita del chico en el supermercado era muy corta ya que creo que había comprado lo que necesitaba, cuando se dirigía a la caja pensaba que ya se había acabado mi historia y así fue, este es el final de este relato, en donde él y yo partimos a lugares diferentes, en donde el quizás no se dio cuenta que yo lo observaba y con cada paso que daba creía saber más del mientras el ni siquiera se imaginaba que una chica lo observaba detalladamente.

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