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TIPOS DE CRISIS BASADO EN LA NATURALEZA DE LA TENSIÓN


Enviado por   •  6 de Abril de 2016  •  Apuntes  •  1.697 Palabras (7 Páginas)  •  881 Visitas

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TIPOS DE CRISIS BASADO EN LA NATURALEZA DE LA TENSIÓN

Una crisis es un estado temporal de trastorno y desorganización, caracterizado principalmente, por la incapacidad del individuo para abordar situaciones particulares utilizando métodos acostumbrados para la solución de problemas, y con el potencial para obtener un resultado radicalmente positivo o negativo. Cuando una persona pierde el equilibrio como resultado de un suceso se dice que experimenta una crisis.

Durante el ciclo vital existen periodos donde aparecen nuevas demandas y exigencias para el individuo. En ocasiones estos cambios traen consigo desajustes emocionales y psicológicos que producen un periodo de crisis.

Los cambios que ocurren internos o externos, enfrentan mental y emocionalmente al individuo a exigencias a las cuales es incapaz de adaptarse, lo que lleva a la crisis.

La crisis del desarrollo son predecibles y aparece en la vida del sujeto en el tránsito de la niñez a la senectud.

Las crisis circunstanciales pueden afectar a cualquier sujeto o institución en cualquier momento. Son situaciones inesperadas, accidentales y dependen sobre todo de factores ambientales.

Poseen características específicas: son repentinas, inesperadas, urgentes y masivas, además pueden desembocar en mejoramiento o empeoramiento de la persona.

Existen determinadas reacciones desencadenadas en el individuo frente a las crisis circunstanciales como son: la elevación de la tensión, la cual aumenta al no poderse enfrentar a la nueva situación con la conducta habitual. Este incremento tensiónal moviliza recursos. De no ocurrir esto, se produce una grave desorganización emocional. La reacción psicológica ante la enfermedad está condicionada por varios factores que determinan la intensidad de la crisis: situación, personalidad del paciente y características de la enfermedad.

Toda crisis va acompañada de síntomas físicos y psicológicos. Cuando van desapareciendo se logra un equilibrio emocional en el individuo, estableciendo alternativas adaptativa para solucionar la crisis. Si los síntomas perduran más de doce semanas y tienden a empeorar con complicaciones (suicidio, consumo excesivo de alcohol) entonces estamos en presencia de un duelo patológico” o crisis no resuelta.

  1. DEFINICION DE TIPOS DE CRISIS
  2. CARACTERISTICAS
  3. CLASIFICACION DE TIPOS DE CRISIS
  4. ESTRATEJIAS DE INTERVENCION

A-

Crisis de la infancia

Crisis de la adolescencia

Crisis de la primera juventud

Crisis de la edad media de la vida

Crisis de la tercera edad

CRISIS DE LA INFANCIA

Teniendo en cuenta los aspectos expuestos, que marcan los cambios en el ciclo vital, en este periodo el niño vive tres crisis (Núñez, 2001):

Crisis del 1er año de vida: comienza a caminar, desarrollo del lenguaje oral, dominio de acciones perceptivas.

Crisis de los 3 años: necesidad de actuar independiente y de tomar parte en el mundo adulto, trata de hacerlo todo por su cuenta, quiere decidir, el juego de roles se convierte en su actividad fundamental.

Crisis de los 7 años: necesidad de ocupar un lugar en el mundo adulto, de cumplir con actividades reales e independientes, la actividad superior es el estudio.

Estas tres crisis tienen características generales que permiten identificarlas: por una parte se producen cambios ostensibles en el comportamiento del niño que constituyen manifestaciones perceptibles de la crisis.

Desobediencias, conductas caprichosas, terquedad, negativismo respeto a las exigencias que antes cumplían, obstinación y desinterés, y en segundo lugar se producen conflictos entre el niño y los adultos que le rodean especialmente con los padres y educadores. Estas características y cambios son indicadores de frustración en el niño que tienen su origen en la insatisfacción de determinadas necesidades esenciales para él y en las nuevas necesidades que surgen y que aún  están por satisfacerse.

CRISIS DE LA ADOLECENCIA

Este periodo intermedio entre la niñez y la adultez, supone una etapa de crisis por la celeridad y la profundidad de los cambios producidos, biológicos, psicológicos y sociales. A esta edad, el sentimiento de no sentirse ni niño, ni adulto es lo predominante. Las características fundamentales que pueden convertir esta etapa en una etapa de crisis son (Domínguez, 2003):

Cambios biológicos: marcan un cambio drástico en la imagen de sí mismo: se dan en esta etapa cambios importantes e inevitables en el cuerpo, como la activación de ciertas hormonas necesarias para el desarrollo sexual, trayendo como consecuencia el desarrollo de las características sexuales primarias (los genitales) y secundarias (crecimiento del vello, cambio de voz, etc.

CRISIS DE LA PRIMERA JUVENTUD

Crisis de la primera juventud o adultez temprana. La primera juventud o adultez temprana empieza alrededor de los veinte años y se extiende hasta alrededor de los cuarenta años. Se caracteriza por ser la etapa en la que se concretan o no los proyectos de los años anteriores. Fase de importantes cambios sociales en los ámbitos de la vida familiar y profesional. La vida del individuo gira en torno de dos polos fundamentales: el trabajo y la familia (formación de la pareja, eventual matrimonio y la llegada de los hijos).

El primer trabajo significa la afirmación de la identidad individual mediante el ejercicio de una actividad. Debido a la falta de experiencia y capacitación laboral, el que tiene la suerte de encontrar un primer empleo es objeto de discriminación. Con el desempleo y con la marginalización y resentimiento, se inicia una crisis de los valores sociales y culturales anteriormente asimilados.

Otro aspecto relevante en esta etapa es la formación de la pareja , el matrimonio y la llegada de los hijos. Se habla de la crisis de la pareja, de crisis del matrimonio, de la crisis de la familia y de la crisis de las instituciones. Se ha producido un desajuste entre el modelo tradicional conyugal-familiar y las exigencias del entorno en que se inserta, por lo que no es de extrañar que formar y sostener una familia constituyen disparadores de crisis en esta etapa de la vida.

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