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¿A Qué Le Tiras Cuando Sueñas Mexicano?, Tú Juegas A Que Me Engañas Y Yo Juego A Que Te Creo.


Enviado por   •  9 de Septiembre de 2013  •  2.847 Palabras (12 Páginas)  •  479 Visitas

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¿A qué le tiras cuando sueñas mexicano?, Tú juegas a que me engañas y yo juego a que te creo.

Psicología del Mexicano

En un intento por explicar la psique del mexicano, ha habido a lo largo de la historia moderna autores que intenta explicar y hasta definir al mexicano; tales como Francisco Javier Clavijero, Samuel Ramos, Octavio Paz, entre otros; todos coinciden en que la psicología del mexicano es configurada a partir de hechos históricos que, además de construir una nación, dieron por resultado un modo de ser y de pensar único en el mundo, con características particulares que a través de la historia le han impedido un avance real como individuo y como país.

El mexicano tiene un gran defecto, que es sentirse inferior… No es que lo sea, pero él se ve de esta manera. Este sentimiento sin duda viene de la gran inseguridad que tiene y la poca fe en sí mismo. Como lo dice Samuel Ramos, al comentar que “…no se afirma que el mexicano sea inferior, sino que se siente inferior…”

Lo anterior le conlleva a que obstaculice las acciones enérgicas y asertivas que el mismo podría llevar a cabo para avanzar, para crecer.

Otra característica es la falta de confianza en sí mismo del mexicano, con tantas dudas acerca de sus capacidades y una indecisión constante acerca de lo que elige hacer. También está la desconfianza patológica hacia los demás, por eso se defiende de los otros, se oculta bajo una máscara que impide ver su verdadero ser. Envuelto en la religión, se comporta agachón, servicial y servil en un intento por ser y parecer humilde; ya que mediante esa actitud pretende ganar el reino de los cielos.

Pero para entender mejor como llegamos a convertirnos en los personajes que hoy somos, resulta imprescindible conocer la historia. Todo comenzó cuando los españoles conquistaron México, así cercenaron el cuello de la orgullosa nación adulta indígena y, al mezclar su sangre con la sangre precolombina, forzaron el nacimiento de un pueblo mestizo; apenas un bebé en comparación con los países europeos.

Para someter, los españoles acabaron con toda la cúpula del poder indígena (reyes, tlatoanis, sacerdotes, guerreros, señores). Entonces ya no quedó nadie que ejerciera el mando, que organizara al pueblo y dispusiera del falo para la creación de grandes obras como antaño se hicieron.

Posteriormente, los indígenas se sometieron voluntariamente con la imagen de la Guadalupana, porque se sentían identificados con su color de piel y porque veían en ella muchos signos propios de su cultura. La adoptaron también porque la primera basílica fue construida en un lugar donde se rendía culto a la diosa Chantico-Cuauhxólotl (la que mora en la casa – diosa de los fuegos de corazón), que representaba los aspectos masculino y femenino de la bóveda celeste.

La Nueva España, como país recién formado, enfrento muchas diferencias sociales, políticas y económicas que se volvieron insalvables y que debían haberse acabado al concluir la lucha por la Independencia, sin embargo era tarde ya; ¿cómo se resarce el daño que ha sido hecho ya; así como el español fue sometido por los árabes, al tener el poder en América, sometió y no desarrolló ni compartió con las culturas americanas. La ambición española avasalló al indígena y saqueó sistemáticamente al país durante esos 300 años que dominaron México.

Al ser la Independencia una copia del movimiento independiente norteamericano, no pudo concretar los ideales que le dieron vida y acabó por ser una limitante más para el crecimiento de México, que soportó invasiones de todo tipo como la francesa, española, inglesa y estadounidense. La independencia de México trató de copiar el movimiento independiente norteamericano. No se pudo, porque los ingleses destruyeron toda la cultura indígena que encontraron y los españoles se mezclaron con los indígenas. Luego todo empeoró debido a la falta de cohesión entre el pueblo mexicano. Hay indicios de que ha existido discordia y envidia desde antes de la conquista: basta recordar que los tlaxcaltecas ayudaron a los españoles a derrotar a los mexicas, pero estos atenuantes se marcaron aún más durante la colonia.

El territorio de los Estados Unidos Mexicanos empezó a fragmentarse, a dividirse inevitablemente como consecuencia de que cada uno velaba sólo por sus intereses, olvidándose de trabajar en pro del país.

En la guerra contra Estados Unidos perdimos más de la mitad de nuestro territorio y esto nos enojó, nos hizo sentir impotentes ante un poderío mayor que nuestras fuerzas, nos deprimió y vino a corroborar el porqué sentimos ese complejo de inferioridad: no pudimos defender lo nuestro, nos lo arrebataron de las manos así como también la dignidad y el respeto que sentíamos hacia nosotros mismos, nos humillaron por completo.

Posteriormente, las opiniones sobre las políticas sociales, económicas y culturales no concordaban. Conservadores contra liberales, no lograban ponerse de acuerdo. Los conservadores querían un imperio, los liberales una república. Los conservadores querían poder sobre los más humildes, para continuar un sistema feudal; los liberales querían rescatar al pueblo mediante la igualdad y la educación.

Tuvo que venir Maximiliano de Habsburgo, emperador extranjero, para que el pueblo se uniera y tomara coraje haciendo valer sus derechos.

Con el porfiriato en un principio se pensó en mejorar, en construir obras que beneficiaran principalmente al país. Pero después se cayó en un culto excesivo y pernicioso hacia todo lo extranjero, principalmente hacia lo francés. El mexicano empezó a imitar esta cultura para tener una identidad propia.

Luego ya en la Revolución Mexicana se trató de recuperar los espacios perdidos frente a la cultura francesa, haciendo gala de un fuerte nacionalismo como forma de unir a los mexicanos en la lucha revolucionaria. También se dotó de identidad al campesino al darle un fusil y convertirlo en soldado, le dio un propósito por el cual luchar y por el cual vivir. Finalmente fueros los campesinos los que tomaron las armas, no los obreros, en un intento de salvar el complejo de inferioridad. Villa y Zapata los hacen soldados de la Revolución. Si son guerreros, ya no son inferiores, toman el fusil, ya no se someten, pueden igualarse con los demás, ya no son un campesino pobre, ya no se están muriendo de hambre, forman un grupo que les da una identidad.

Después de luchar en contra de los dictadores, los caudillos revolucionarios persiguieron a la Iglesia Católica, acaso tratando de que

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