Complejo De Edipo

COMPLEJO DE EDIPO

INTRODUCCIÓN:

En el siguiente trabajo, pretendo desarrollar y ejemplificar los conceptos psicoanalíticos de Duelo y Complejo de Edipo a partir de su estructuración con la trama de la película “Santa Sangre” del director Alejandro Jodorowsky. He elegido esta película por su abundancia en simbolismos referentes a las temáticas psicoanalíticas mencionadas anteriormente, los cuales creo que me permiten realizar una puesta en juego de ambos temas interesante y enriquecedora. Para comenzar, haré una exposición de los conceptos según autores del psicoanálisis tales como Lacan y Freud, para luego estructurarlos de manera explicativa con las situaciones que se presentan en la película.

DESARROLLO:

•Complejo de Edipo

El concepto de Complejo de Edipo es, junto a otros, uno de los pilares sobre los que se funda la teoría psicoanalítica, sin embargo se hace muchas veces referencia a éste sin tener en cuenta todo lo que implica. Para comenzar, veremos la procedencia y el sentido del nombre. Para conceptualizarlo, Freud toma el concepto de “Complejo” de Bleuler y Jung, quienes referían de esta manera a “un conjunto de ideas cargadas afectivamente capaz de guiar el curso asociativo” Lo que busca connotar Freud con el uso de este término es un funcionamiento determinista de la psique,

es decir, que el complejo de Edipo es ante todo, algo que determina como se dan las relaciones entre el sujeto y el mundo, siendo trascendental en el desarrollo de la personalidad.

“Edipo” refiere al personaje de la tragedia griega “Edipo Rey”, quien asesina a su padre para luego contraer matrimonio con su madre. Es el mito el cual Freud recoge para desarrollar su teoría.

El Complejo de Edipo consiste en el deseo que desarrolla el niño de tener relaciones incestuosas con su madre. Se manifiesta entre los 3 y 6 años de edad, durante la fase fálica del desarrollo de la libido. Aquí, el placer que siente el niño en el juego con su pene, le lleva a querer transmitir dicho placer a quien es mas intimo para él, o sea la madre que lo cuida. Sin embargo este deseo se ve obstaculizado por la figura del padre, quien el niño comprueba que posee a la madre. Esto genera en el niño hostilidad hacia el padre, quien es visto como competidor por la posesión del objeto de deseo. En un punto, el niño se da cuenta que la madre no tiene pene, y piensa que el padre se lo ha quitado, lo que marca el comienzo del Complejo de Castración, que lleva a lo que Freud llama “sepultamiento del Edipo”, ya que el niño teme que su padre lo castre por desear a su madre. Así, termina abandonando el objeto de deseo, a la par que introyecta este mandato que se estructura en su aparato psíquico como el Superyo, instancia

de la segunda tópica freudiana que refiere a todo aquello que la sociedad y la cultura reprime.

Sin embargo, el Complejo de Edipo en Freud solo tiene en cuenta la perspectiva del niño, y aquí es Lacan quien tiene el gran merito de haber pensado en la perspectiva del Edipo desde los padres como constructores de la sexualidad del hijo, y al Edipo en general como un campo de intersubjetividades entrecruzadas donde no hay una figura fija del padre madre o hijo, sino que estas se forman

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