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Consciencia De Expresar

YesseniaValdes29 de Agosto de 2012

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CONSCIENCIA DE EXPRESAR

Sabemos que para desenvolvernos en la sociedad actual es fundamental contar con un buen manejo de nuestra inteligencia emocional, es decir, saber expresar de la mejor manera posible los sentimientos que en distintas ocasiones y momentos nos invaden, es por ello que Paul Ekman busca un consenso social en el cual podamos mostrar adecuadamente las emociones utilizando “reglas de demostración” , de las cuales se derivan algunas como minimizar muestras de emoción, como por ejemplo cuando se está en presencia de algún tipo de autoridad, tendemos a ser cuidadosos y no dar a conocer lo que realmente sentimos, por otro lado, está el exagerar nuestros sentimientos de manera de magnificar las expresiones emocionales, también se encuentra el hecho de reemplazar un sentimiento por otro, con objetivo, por ejemplo, de no ser descortés frente a alguna situación que no nos agrade completamente a lo que podemos responder que si es de nuestro interés.

Las reglas anteriormente mencionadas se van adquiriendo de una manera explícita, ya que es impartida desde cuando decimos a los niños que muestren alegría y agradecimiento en lugar de decepción. Aspectos que por lo general suelen ocurrir sin darnos cuenta.

Un ejemplo claro, de todo lo expuesto, son los actores, personas que debido a su profesión son expertos en demostración emocional y debido a su desempeño es la respuesta que ocasionan en el público.

Otro aspecto importante e interesante de la inteligencia emocional, es el hecho de poder transmitir nuestras emociones de una persona a otra, como si se tratara de un virus social fácil de contagiar, esto se refiere a que somos capaces de transmitir y captar distintos estados de ánimos de los cuales, algunos pueden llegar a ser tóxicos, como otros muy nutritivos, estas señales que enviamos sin darnos cuenta afecta a las personas con las que estamos, es por esto que ser hábil socialmente es la clave para saber controlar lo que emitimos.

Existen personas con las que nos gusta compartir, porque las emociones que transmite hace sentirnos bien, como dice Goleman: “son las almas a quienes otros recurren cuando padecen alguna importante necesidad emocional”, y así ocurre en la mayoría de los casos, ya que, todos aportamos cambios emocionales al otro, sea para bien o para mal.

Pero, ¿Cómo ocurre el traspaso de emociones?, inconscientemente vamos imitando los sentimientos que percibimos de la otra persona, sin querer repetimos gestos, tono de voz y expresión facial, reproducción que hace que se recree el mismo estado de ánimo. Ulf Dimberg, investigador de la Universidad de Upsala, señala: “cuando la gente ve un rostro sonriente o un rostro airado, el suyo da muestras de ese mismo estado de ánimo a través de ligeros cambios en los músculos faciales”, claramente en general somos muy buenos imitadores desde cuando somos niños y durante todo nuestro desarrollo a lo largo de la vida.

Así mismo, al momento de interactuar con otra persona el estado de ánimo se transmitirá de parte de aquella persona que sea más enérgico para demostrar sus sentimientos a la persona que es más pasiva. John Cacioppo, psicofisiólogo, comenta; “el sólo hecho de ver que alguien expresa una emoción puede provocar ese estado de ánimo, tanto si uno se da cuenta o no de que imita la expresión facial. Esto nos ocurre constantemente, hay una danza, una sincronía, una transmisión de emociones. Esta sincronía del estado de ánimo determina que uno sienta que una interacción salió bien o no”, esto queda reflejado en los tipos de combinaciones que se generan a partir de una interacción, por ejemplo, cuando alguien hace una observación el otro asiente con la cabeza, o cuando uno se echa para atrás en la silla, el otro tiende a irse adelante.

Daniel Stern, descubrió la sincronía que existe entre una madre y un hijo, quienes muestran

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