EL DIA QUE NIETZCHE LLORÓ .

EL DIA QUE NIETZCHE LLORÓ

El siguiente ensayo estará basado en la lectura del libro “El día que Nietzsche lloró”, la cual nos plantea la historia de dos personajes principales, Nietzsche y Breuer, y una tercera persona que es Lou Salomé quien hace que ellos dos se conozcan, lo cual provoca que establezcan una relación con la cual se desenvuelve toda la historia, esta novela es una historia que nos en vuelve en la filosofía pero sobre todo en el psicoanálisis como tema central de este trabajo.

El objetivo principal de este ensayo es hacer un uso práctico de los conceptos principales que contiene la película y que dan lugar al psicoanálisis. A lo largo de la historia se pudieron abarcar en determinados momentos, algunos conceptos que fueron objeto de estudio y planteamiento para dicha corriente.

Los pasos a seguir para la realización de este ensayo fueron primero que nada leer la obra completa del libro de “El día que Nietzsche lloró”, donde el objetivo principal era comenzar por identificar conceptos importantes del psicoanálisis que comenzaban a presentarse de manera implícita para que después se pudieran aplicar en el presente ensayo.

Posteriormente se hizo una revisión teórica de los conceptos identificados para hacer la selección de aquellos que fuesen más importantes para poder describir qué ocurría a lo largo de la obra previamente leída. Para la elaboración de un trabajo más completo, también se tomaron en cuenta algunos textos de Psicología, los cuales facilitarían la comprensión de los conceptos y a su vez permitirían una explicación adecuada estos.

Los conceptos que fueron tomados en cuenta, no hacen menos importantes a los no mencionados en este trabajo, sin embargo de acuerdo con las características pedidas se abordarán diez conceptos que ejemplifiquen lo ocurre a lo largo de esta interesante historia y que nos permitirán nos sólo entender la idea del concepto sino darse una practicidad al tema en general.

Unos de los principales puntos a considerar en este ensayo es el aparato psíquico (segunda tópica) que nos describe de manera precisa cada una de las características correspondientes al ello, al yo y súper yo que pueden manifestar a su vez los personajes principales de la obra como cualquiera de las personas en su vida cotidiana.

El ello es el depósito de las de las pulsiones, lo cual quiere decir que es plenamente instintivo y primitivo, además es atemporal, actúa de acuerdo con el principio del placer, se encarga de enviar energía al aparato psíquico y es éste el límite entre lo psíquico y lo somático. El yo por su parte se impondrá al ello como objeto de amor, se formará a través de identificaciones, en su mayor parte es Inconsciente, opera bajo el principio de realidad e inhibe el desarrollo de afecto, motilidad, representaciones-cosa y al preconsciente y consciencia.

Por último el Súper yo se identifica con la demandas morales y lo regirán tres principios: moral, placer y claridad; su función básica es generar culpa, vergüenza, asco, pudor y orgullo o reconocimiento; además de dividirse en el yo ideal y el yo real o ideal del yo, en su mayor parte el súper yo es Inconsciente y esta a su vez más en contacto con el ello.

Por otro lado también se consideró el aparato psíquico de la primer tópica, que de una u otra manera nos hablará de las representaciones que se pueden encontrar en la mente ya sea en el inconsciente, consciente o preconsciente, partiendo de las características que respectan a cada parte del aparato psíquico de dicha tópica.

El Inconsciente se identificará principalmente por representaciones que no suelen contradecirse entre sí, condensación y desplazamiento, una movilidad excesiva de catexias, ausencia de duda así como de temporalidad, un reemplazo de la realidad interna por la externa y representaciones-cosa que en este sentido refiere a ver las palabras como una cosa.

El Preconsciente a diferencia del Inconsciente tiene representaciones- palabra, tienes un proceso secundario, tiene un orden temporal y tiene catexias ligadas. El preconsciente puede hacer las representaciones conscientes por un instante, una vez que lo hace, regresan de nuevo al preconsciente.

El sistema consciente tiene por su arte la capacidad de centrar una representación de un recuerdo, la persona sólo va a tener consciencia de lo que su Inconsciente le permita; para ello es importante tener claro el concepto de consciencia que se entiende como un fenómeno subjetivo consistente en el estado de alerta a alguna representación.

El yo como antes ya se mencionó, busca la inhibición del preconsciente a la consciencia es por ello que busca la censura y la defensa, es ahí donde surgen los mecanismos de defensa y se abordaran algunos como la formación reactiva  que busca la represión de algo que no quiere ser aceptado y hace algo opuesto a lo que se pretende hacer, otro mecanismo que se abordará posteriormente es la anulación que consiste en anular, como su nombre lo dice con un acto para reprimir el deseo que en ese momento se presente, se utilizará también el concepto del mecanismo de aislamiento el cual refiere esa inhibición del desarrollo del afecto, la persona rompe los vínculos entre la situación y la emoción y por último el mecanismo de represión que nos habla sobre mantener la mayor parte de las representaciones en el Inconsciente.

Centrando toda esta serie de conceptos que se pretenden aplicar a la obra leída, veremos como primer punto el ello, primeramente desde la perspectiva de Breuer, ese instinto y necesidad de placer al querer estar con Bertha, el no veía más allá de la satisfacción de ese placer que pensaba que podía ser lo mejor para él, todo esto en conjunto con la serie de pensamientos que surgían al poder imaginarse con ella.

Su yo percibía esa angustia que definitivamente generaba ante dichos pensamiento y emociones, sin saber porque pudiesen ocurrir, impedía a su vez que actuara frente a las adversidades que él percibía en sus sueños sabía que algo ocurría, pero no lograba entender que era eso que lo dominaba más allá de sus deseos por estar con Bertha, esa mujer que a pesar de su histeria lo enloquecía.

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