El desencantamiento del mundo.

COSMOVISION MODERNA

Tendencia a afirmar y experimentar una separación radical entre sujeto y objeto, clara división entre yo humano y su entorno.

Experimenta la división fundamental entre el yo humano subjetivo y un mundo exterior objetivo.

Cosmos, escindido del ser humano, se lo considera completamente impersonal e inconsciente.

La belleza o valores que el ser humano pueda percibir del universo, es mera materia en movimiento, mecánico y desprovisto de finalidad, gobernado por el azar y la necesidad. Completamente diferente a la conciencia y valores de los hombres.

Todas las cosas son realidades humanas y se cree que proyectar lo humano sobre lo “no humano” es una falacia epistemológica.

La única fuente de sentido del universo es la conciencia humana.

Aborda al mundo desde una estructura experiencial implícita, en la que el sujeto está separado del objeto, que es su opuesto. El mundo moderno esta lleno de objetos con los que el sujeto humano se enfrenta y sobre los cuales actúa de desde su posición de autonomía consiente.

VISION PRIMORDIAL

No sostiene división decisiva, no la reconoce.

Percibe el mundo natural que lo rodea como impregnado de sentido, cuyo significado es al mismo tiempo humano y cósmico.

El mundo primordial es animado, comunica y tiene propósitos (lleno de signos y símbolos)

Hay continuidad entre el mundo interior del hombre y el mundo exterior. Y este ultimo posee un aspecto ligado a la subjetividad humana.

Ser humano es un microcosmos dentro del macrocosmos del mundo, participa de su realidad interior y esta unido al todo por vías tangibles e invisibles.

La experiencia tiene lugar en el ánima mundi, la psique humana esta engastada en la psique del mundo, de la que participa de manera compleja y que constantemente la define. Esta se expresa en un lenguaje de índole mítica y numinosa, debido a que se supone que el mundo habla en un lenguaje simbólico es posible la transmisión directa del sentido y la finalidad del mundo al hombre.

Estado de conciencia relativamente indiferenciado, donde los S.H se perciben en comunicación y participación directa, con la vida interior del mundo natural y del cosmos. La participación es multidireccional y multidimensional, penetrante e integradora (mediante rituales, poderes divinos.)

Aborda el mundo, como un sujeto que participa de un mundo de sujetos, sin límites absolutos entre ellos. El mundo primordial esta saturado de subjetividad, interioridad, sentidos y finalidades intrínsecas.

El YO primordial tiene límites porosos, lo que implica la permeabilidad e integración en el mundo.

El área sombreada representa la presencia de inteligencia consciente e interioridad, la fuente de sentido y finalidad pasa sin distinción a través de la totalidad del complejo yo/mundo.

La experiencia del cosmos primordial fue universalmente vivida, como algo tangible y de presencia y vitalidad evidente, informada por presencias espirituales ubicuas, animada en todo por fuerzas arquetípicas y sentidos inteligibles.

El YO formado por una línea continua implica una tajante distinción y dicotomía, entre sujeto y objeto entre lo exterior e interior.

El área sombreada solo dentro de los límites del yo.

Supuesto básico del método científico moderno:  reconocimiento sistemático de que la fuente exclusiva de sentido y de finalidad en el mundo es la mente humana y que proyectar lo humano sobre lo no humano es una falacia fundamental.