Evaluacion De Las Apraxias

Mecanismos de las apraxias

Se han propuesto varios mecanismos para explicar las apraxias. En primer lugar se cree que el defecto apraxico es secundario a una asimbolia (incapacidad de entender los símbolos). Se debería hablar entonces de una asimbolia motora. Esto indica que los pacientes apraxicos presentan las mismas dificultades con movimientos de carácter simbólico y con movimientos sin algún significado. Esto demuestra que la apraxia no tiene como basa un defecto en la utilización de símbolos.

Una segunda hipótesis es la de desconexión. Plantea que la apraxia se debe a una desconexión entre el lóbulo parietal izquierdo y las áreas anteriores derechas o izquierdas. Ejemplo si un paciente se le pide que haga un movimiento con la mano izquierda, la información que ha llegado al área se wernicke debe pasar necesariamente al área motora derecha, por medio del cuerpo calloso. De acuerdo con esta hipótesis, la vía más probable para el paso de esta información es la comunicación entre las áreas anteriores de asociación.

La hipótesis que tiene un mayor número de seguidores es la de la idea de que la apraxia es un trastorno perceptivo-motor que impide la organización o realización del movimiento.

Algunos estudiosos afirman que la memoria de los movimientos puede ser importante para explicar la apraxia. De hecho la apraxia puede definirse como amnesia de los movimientos previamente aprendidos y también amnesia interrogada (incapacidad de realizar nuevos aprendizajes motores).

La apraxia también representa un trastorno sobresaliente en la degeneración cortico basal, esta degeneración constituye varías formas apraxias: apraxia cinética y la ideomotora.

Evaluación de las apraxias

Hay algunos modelos relativamente establecidos para evaluar las apraxias. En el caso de las apraxias de las extremidades y del rostro es necesario considerar dos subsistemas subyacentes en el acto motor: el sistema conceptual y el sistema productor. El primero se refiere al conocimiento que el sujeto tiene de las acciones relacionadas con los objetos; el sistema productor implica la generación de la acción o movimiento.

El sistema conceptual se puede evaluar mediante dos tipos de tareas: en primer lugar pidiéndole al sujeto que señale los objetos útiles a una función dada, por ejemplo, se le muestra una acción determinada (martillar) y se le pide que seleccione el objeto con el cual puede realizar dicha acción. El segundo tipo de tareas aplicadas se refiere al reconocimiento de las acciones. Se le muestra al sujeto una acción o movimiento y se le pide que determine si es correcto o no.

Cuando se requiere señalar los objetos útiles a una función dada de observa que la mayoría de los pacientes apraxicos señalan los objetos correctos. Cuando se trata de reconocer las acciones, se sabe que mas de el 50% de los pacientes identifican correctamente estas, aunque no sean capaces de reproducirlas, lo cual demuestra que en los pacientes apraxicos el problema fundamental se centra en el sistema productor mas que en el conceptual.

Los pacientes apraxicos tienen dificultades para aprender nuevas secuencias de movimientos. Hay algunas algunas variables importantes para evaluar el sistema productor: en primer lugar el propio método de evaluación; es frecuente iniciar esta pidiéndole al paciente que realice determinados movimientos, enseguida se le solicita que imite estos movimientos, si el paciente se equivoca y los movimientos solicitados exigen empleo de algún objeto, se le pide que muestre el uso real del mismo; y, finalmente, si fracasa en todas las situaciones anteriores, se le pide que imite el uso del objeto.

Entre los movimientos solicitados se deben incluir los transitivos (implican la utilización de objetos) y los intransitivos (que no requieren la utilización de objetos), movimientos simbólicos (que tienen un significado)

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