LA PRÁCTICA DE LA INQUIETUD EN LA ESCUELA
Enviado por Eterna Aprendíz • 19 de Noviembre de 2019 • Ensayos • 594 Palabras (3 Páginas) • 123 Visitas
LA PRÁCTICA DE LA INQUIETUD EN LA ESCUELA
Miguel Brazdresch Parada (2000) define como práctica al ejercicio de pensar, actuar y proyectar dirigido por fines conscientes. Por ende una práctica no se asimila con cualquier tipo de actividad humana; pues ésta se entiende como una manifestación intencional observable por cualquiera y no una acción instintiva o inconsciente. Entonces Brazdresch da cuenta que la práctica educativa es “la acción intencional objetiva cuyo fin es educar, inseparable del medio que usa y del "bien" que consigue” (Brazdresch, 2000, p. 44).
El filme cubano Conducta nos presenta a una maestra que ha entregado su vida a la educación, pues ha educado a varias generaciones. Carmela, se enferma y es entonces reemplazada por Sonia, quien al verse incapaz de manejar el carácter de un niño de once años llamado Chala, decide trasladarlo inmediatamente a una escuela de conducta. Este es el disparador que proyecta en Carmela la intención de inquietar las cómodas posiciones de sus colegas y el sistema educativo con el fin de garantizar a Chala la permanencia en el aula en que ella lo vio formarse.
Es en este contexto que se puede apreciar en Carmela una práctica educativa que coincide con los sentidos que Karl Jaspers le da a la filosofía: “mantener despierta con paciencia y sin cesar la razón(...)”,”abrirnos a la vastedad que nos circunvala”, “ver la realidad en su origen”. Dichos sentidos esenciales de la filosofía se reflejan, latentes, desde distintas perspectivas:
Para empezar, desde un enfoque socrático, la práctica que se observa en Carmela remite a “una etapa purgadora de falsas ideas” (Sócrates) en la que la docente refuta toda norma educativa cuando saca sin ningún permiso legal a Chala de la escuela de conducta, poniendo en riesgo hasta su propio trabajo, con tal de lograr su purificación, es decir, ese vivir mejor, auténtico, cuyo fin en su caso es ser fiel a su ideal de educar a sus estudiantes ante toda reglamentación.
Cabe destacar que es ante esta práctica interrogadora, examinadora y refutadora que Carmela es juzgada por sus colegas. Sin embargo la docente tiene en claro que éstos en referencia a la problemática, tal como expresa Sócrates, “no desearían decir la verdad, a saber, que resulta evidente que están simulando saber (juzgar) sin saber nada.” y en consecuencia “se irritan conmigo y no consigo mismos”. Pues los docentes del establecimiento poco saben sobre la vida rodeada de violencia y vulnerabilidad por la cual el niño Chala atraviesa. El equipo directivo se preocupa más por tener la virtud de llenar los formularios de forma efectiva, en tiempo y forma, para mandar a un niño a una escuela de conducta, sin siquiera intentar preguntarse si eso será realmente lo mejor para él.
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