LOS JOVENES QUIEREN LIBERTAD

LOS JOVENES QUIEREN LIBERTAD

Desde el inicio de la vida del ser humano, que comienza en el vientre de la madre, ocurre una conexión muy especial entre ambos, en determinado momento el feto empieza percibir situaciones o sentimientos que la madre experimenta, es así como desde ese momento las madres pueden empezar a influenciar en el crecimiento y comportamiento del bebe, ahora los ginecólogos aconsejan colocarle música o notas suaves que le ayudan a desarrollar su cerebro, estos afirman que el niño después de su nacimiento pueden adoptar comportamientos especiales, al momento de escuchar de nuevo esa melodía que acostumbraba a oír en el vientre de su madre; hasta este momento todo es muy fácil, pero ¿qué madre sabe lo que sucederá con ese bebe al momento de crecer?.

Los niños en el ir y venir de sus días, llenos de juegos, alegrías y nuevas experiencias, llegan a una etapa, en la que a los padres les resulta muy difícil de manejarlos. Todos los seres humanos en su proceso de desarrollo, pasan por algunas etapas para alcanzar la madurez, cuando un niño llega a la adolescencia anhela tener libertad la cual es negada por sus padres, quienes aún no han alcanzado a asimilar y aceptar que su hijo creció y que ya hay cosas que él puede realizar solo, sin tener que ser supervisado, es aquí cuando inician los conflictos de intereses; los adolescente tienen una visión del mundo muy diferente a la de sus padres, quienes con la experiencia que adquirieron con los años, saben que se debe tener mucho cuidado para no desviarse del camino correcto.

La libertad que muchas veces es solicitada por los adolescentes es más libertinaje que libertad, estos en su idea errática confunden estos dos temas, en la actualidad nuestra sociedad no posee ningún respeto por los jóvenes, para los adultos inescrupulosos estos son como objetos preciados que valen mucho dinero, es por esto que vemos gran cantidad de adolescentes prostituyéndose, consumiendo y vendiendo drogas, asesinando por dinero; las bandas delincuenciales están colmadas de jóvenes que aún no alcanzan la adolescencia, son niños que han recibido de sus padres tanta libertad que no se dan cuenta de las cosas que estos hacen al salir de casa o que simplemente nunca han tenido un padre.

Para los padres hay dos términos que van de la mano: la libertad y la confianza, este último es un tema que a la mayoría de los jóvenes en busca de libertinaje no les gusta tocar ya que este implica cumplir normas, reglas familiares o mandatos establecidos por los padres, se trata de: ¡sí! puedes ir a la fiesta pero a “tal hora debes estar aquí”, donde para los adolescente la mayoría de las veces esos horarios son muy cortos, para ellos a esa hora es que empieza lo mejor; las cosas se complican aún más cuando el joven accede a llegar a casa a esa hora, pero, sus padres se quedan esperando que lleguen y no llegan, es cuando toman la penosa decisión de ir a la fiesta a buscar a sus hijos y es este momento en el que ese adolescente

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