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LOS PROBLEMAS FAMILIARES Y SU TRANSMISIÓN INTERGENERACIONAL


Enviado por   •  14 de Abril de 2014  •  2.288 Palabras (10 Páginas)  •  520 Visitas

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LOS PROBLEMAS FAMILIARES Y SU

TRANSMISIÓN INTERGENERACIONAL

MTRO. LUIS ARTURO AMARO SÁENZ

¿De qué manera los acontecimientos que surgen en las relaciones familiares llegan a ser determinantes y persistentes en las posteriores generaciones? Este ha sido un tema útil para muchos terapeutas familiares, que indagan buscando el vínculo entre el problema actual de la familia con los sucesos importantes de otras generaciones.

Analicemos un ejemplo. Juan es un joven de 19 años y está muy preocupado porque tuvo un percance de violencia con su novia en vía pública; inicialmente Juan no percibe la violencia porque está muy familiarizado con esta desde su infancia.

Partiendo de la perspectiva de la Terapia Familiar Sistémica un miembro de la familia no puede ejercer un control unilateral sobre el resto de los integrantes de la misma, cada persona se comporta en relación al contexto del sistema. Se puede pensar que problemas como la adicción a drogas, delincuencia, reprobación y deserción escolar responden a las características del sujeto, sobre todo cuando se observa que el resto de los integrantes de la familia no presentan dificultades aparentes. Sin embargo la teoría de sistemas considera que todo sistema comprende tres características generales: integridad, organización y regulación.

En el aspecto de integridad se explica que una parte no puede ser entendida desligada de su totalidad; esto implica que el comportamiento no deseado de un miembro de la familia responde a lo que sucede en el contexto familiar. En el caso de Juan él se comporta en concordancia al comportamiento de otros miembros de su familia.

Por otra parte, la organización se da en el momento en el que la familia comprende reglas y modos de comunicarse propios; existen circuitos que conducen información manteniendo el equilibrio del sistema. En otras palabras, la familia como sistema se mantiene a pesar de los problemas. En el ejemplo de Juan, él desde niño ha visto a su padre llegar a su casa drogado y ha presenciado violencia física contra su madre. Él ha conseguido defender a su madre en situaciones extremas, pero sabe que cuando se presentan discusiones que no pasan a mayores consecuencias, es mejor no estar en la casa.

Por último, la regulación se establece cuando este grupo ajusta sus relaciones entre sí, a partir de sus necesidades de cambio; la conducta de un integrante de la familia se modifica en relación al resto de sus integrantes para conservar el sistema. Continuando con la historia de Juan, él gusta de trabajar e ir a la escuela, frecuenta amigos que tienen adicciones; esto le permite mantenerse al margen de los problemas parentales.

De acuerdo con Murray Bowen (1998) existe evidencia de que los problemas familiares no sólo se transmiten entre los miembros de una misma generación, sino también entre distintas generaciones. Esto quiere decir que los padres de Juan tuvieron vivencias particulares con sus propios padres, que están asociadas al problema que ahora Juan vive con su novia, y a su vez estos se conectarían con los problemas que pudieran desarrollar sus hijos; si llegaran a procrear.

El sistema generacional

Existen puntos de confluencia en varios de los planteamientos importantes de la Terapia Sistémica que pueden ayudar a entender los enlaces generacionales.

Gregory Bateson (1904-1980) conforma uno de los pilares teóricos de la Terapia Familiar Sistémica. Valiéndose de una visión antropológica y retomando las aportaciones sobre la cibernética, explicó que los sistemas que tienen que ver con las interacciones humanas y sociales son autocorrectivos, ya que en el momento que sobrepasan un límite aceptable de tensión, se movilizan procesos para conseguir el equilibrio. Así, desde la Terapia Sistémica se considera que, las familias en las que se ha enraizado algún tipo de problemática o disfuncionalidad, tienden a hacer esfuerzos por conservarse a pesar de las dificultades que puedan generarse. Es decir, en este tipo de familias existen miembros que presentan conductas problemáticas que, al final de cuentas mantienen el equilibrio del sistema. Por ejemplo, el hijo que la mayor parte del tiempo se mantiene fuera de casa, evita manifestar su inconformidad ante los frecuentes problemas de los padres; de esta manera ninguno de los integrantes tendrá que abandonar la familia definitivamente.

Una investigación que profundiza más en este tema fue realizada por M. Selvini, L. Boscolo, G. Cecchin y G. Prata, entre 1971 y 1972. Ellos atendieron familias con algún miembro diagnosticado como psicótico. Visto desde la perspectiva sistémica, cierta variedad de esquizofrenia es generada en las relaciones familiares, siendo que la comunicación termina tornándose patológica.

En las familias con pacientes psicóticos, en cambio, aun encontrando la misma rigidez que en el modelo básico, constatamos que la modalidad relacional es de enorme complejidad, y que la manera como la familia mantiene el juego es de una variedad e inventiva impresionantes (M. Selvini, L. Boscolo, G. Cecchin y G. Prata, pág. 15).

La inventiva aludida en el párrafo se refiere a las formas que se tienen para ocultar un problema. Estos investigadores coinciden con la idea de Murray Browen (1913-1990) de que los problemas familiares se transmiten de una generación a otra.

La diferenciación

Desde la perspectiva de M. Bowen (1989) la familia se encuentra enlazada a las generaciones anteriores inmediatas. El miembro de la familia tiene un grado de diferenciación que le hace adquirir rasgos propios que cortan la continuidad con tendencias psicoafectivas. La diferenciación entonces se entiende como la distinción que hace un individuo para separarse emocionalmente de su familia de origen. Los individuos no diferenciados de su familia tienen un mayor grado de implicación con la imagen de ésta que los hace susceptibles, emocionalmente, y pueden tener mayores dificultades. Si continuamos con el caso de Juan, la alternativa que él tendría sería el forjarse intereses y una identidad propia que le hiciera notar que la violencia no es su alternativa en su vida.

De acuerdo a M. Bowen, los individuos desarrollan niveles de diferenciación con relación a sus familias. La diferenciación es la forma en que una persona logra ser diferente de su familia de origen, se desliga emocionalmente y le permite ser más objetiva al analizar los problemas familiares. Algunas personan tienen diferenciación alta, sus estilos de vida y familia no se parecen tanto al inculcado por sus familias de origen; otras tienen diferenciación baja, sus estilos

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