Perdida Autoridad Moral

La sociedad actual está evidentemente fragmentada. Esta consideración no debe ser tomada como una cuestión de “queja social”, sino por el contrario, como un desafío para el análisis e interpretación de las nuevas realidades socio-antropológicos. La escuela no es ajena a esta fragmentación y desinstitucionalización, aunque, mientras los nuevos estudios culturales desarrollan categorías de análisis como el paradigma de la complejidad, la fluidez en la sociedad de la información, y la diversidad como elemento común, la escuela intenta ponerse a la altura de las circunstancias, sin lograrlo, quizá por su anacronismo institucional.

La cuestión que se plantea, es que en ese intento de aggiornamiento la escuela está corriendo el riesgo de perder su función social, la imagen y autoridad del docente se vea pisoteada, por lo tanto creemos que la educación debe realizarse a sí misma un replanteamiento crítico antes de seguir el camino de des-configuración en el que se sumerge cada vez más. Por tanto, comprender la educación como práctica social institucionalizada requiere de una mirada compleja que sea capaz de analizar elementos históricos como dispositivos de la cultura institucional, e interrogarse acerca de la intervención docente sobre la realidad. Son tiempos de crisis de las instituciones con dispositivos de otras épocas: identidades muy fijas pero a la vez sin sustento, anacrónicas, uniformes, con esquemas de organización piramidales y con fuerte sentido de autoridad.

Las familias actuales no comprenden el significado de educar en conjunto, esperan que sea en la escuela donde se otorgue toda la educación del menor, sin embargo, la verdadera educación comienza en casa, con valores, actitudes, ejemplos a seguir, cariño, amor, respeto, normas y reglas. La escuela no es responsable por sí sola de la formación de valores como muchos padres de familias las ven hoy día, son espacios de desarrollo de habilidades y actitudes, es un medio para lograr el éxito, los maestros somos transmisores de conocimientos que les permitirán a los alumnos enfrentar los problemas que la vida les presenten y que estos sean capaces de hacer frente a estas situaciones.

Los motivos que originaron una investigación sobre la Pérdida de Autoridad Moral de los docentes ante la sociedad son: en primer lugar, la inquietud de identificar aquellas causas que producen esta situación, y posteriormente, las razones por las cuáles no se han tomado medidas adecuadas dentro de las instituciones para solucionarla (dado que se trata de un problema que cualquiera es capaz de advertir).

Es importante prevenir acciones cuando se presente esta problemática de pérdida de autoridad moral, dado que no es responsabilidad solamente del docente sino que está inmerso todo el entorno educativo en el que se desarrolla (incluyendo autoridades escolares, padres de familia, alumnos, etc.)

Se pretende además alcanzar un panorama más generalizado de qué medidas tomar para enriquecer nuestra formación docente, así como identificar mejores formas de transmitir adecuadamente los conocimientos a nuestros alumnos cultivando en ellos nuevos valores morales y fortaleciendo la relación maestro-alumno para garantizar la calidad educativa.

Alcance

Esta investigación la realizaremos por medio del método cuantitativo, ya que haremos encuestas con los padres de los alumnos,

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