Trastorno Dependiente De La Personalidad

El trastorno dependiente de la personalidad está ubicado dentro del grupo C de los trastornos de personalidad de tipo ansioso, y se define como una necesidad general y excesiva de que se ocupen de uno, que ocasiona un comportamiento de sumisión y adhesión y temores de separación, que empieza al inicio de la edad adulta y se da en varios contextos, como lo indican cinco (o más) de los siguientes ítems:

1. tiene dificultades para tomar las decisiones cotidianas si no cuenta con un excesivo aconsejamiento y reafirmación por parte de los demás.

2. necesidad de que otros asuman la responsabilidad en las principales parcelas de su vida.

3. tiene dificultades para expresar el desacuerdo con los demás debido al temor a la pérdida de apoyo o aprobación. Nota: No se incluyen los temores o la retribución realistas.

4. tiene dificultades para iniciar proyectos o para hacer las cosas a su manera (debido a la falta de confianza en su propio juicio o en sus capacidades más que a una falta de motivación o de energía).

5. va demasiado lejos llevado por su deseo de lograr protección y apoyo de los demás, hasta el punto de presentarse voluntario para realizar tareas desagradables.

6. se siente incómodo o desamparado cuando está solo debido a sus temores exagerados a ser incapaz de cuidar de sí mismo.

7. cuando termina una relación importante, busca urgentemente otra relación que le proporcione el cuidado y el apoyo que necesita.

8. está preocupado de forma no realista por el miedo a que le abandonen y tenga que cuidar de sí mismo.

Modelos de Beck y Guidano

Beck propone el modelo de los esquemas cognitivos, donde se establece que la personalidad está formada básicamente por esquemas cognitivos, estructuras que representan las formas en las que se organiza la información en la memoria, basadas en lo que para la persona han sido sus experiencias previas, funcionando como moldes de la conducta. Así, durante los procesos cognitivos, se toma un estímulo, y se le da un significado conjunto de acuerdo a la información del medio y a la información de los elementos del esquema cognitivo, generando luego estrategias de acción. Estos permiten dar significado a la vida, explican la acción de las personas en relación con su ambiente, son producto de un proceso filogenético donde ciertos patrones serían la continuación de aquellos que en algún momento fueron adaptativos y pueden no manifestarse hasta que ciertos eventos significativos los activen. En el caso de las patologías, las estrategias de acción generadas tras los procesos cognitivos, se transforman en conductas estereotipadas, rígidas que dejan de responder conscientemente a las situaciones,

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