EXALTACIÓN A MARIA AUXILIADORA.

EXALTACIÓN A MARÍA AUXILIADORA

Eres la madre de Jesús, grande en virtudes y dones que pusiste al servicio del Señor. Tu sí incondicional, el sufrimiento que padeciste al ver morir a tu hijo en la cruz, tu sensibilidad con los esposos en las bodas de Caná, tu presencia materna al acompañar  permanentemente a tu hijo en el anuncio del Reino, tú ternura y liderazgo frente a los apóstoles después de la resurrección de Jesucristo, entre otras acciones te hacen un ser excepcional, única y digna de veneración. Representada en numerosas advocaciones, sigues siendo un modelo de vida a seguir y la intercesora que tenemos todos los hijos de Dios ante tu hijo Jesucristo.

Realizando una pequeña remembranza sobre la devoción a María Auxiliadora nos remontamos a los años 345 donde San Juan Crisóstomo, Arzobispo de Constantinopla, en un sermón utiliza los dos títulos que más se utilizan para referirse a la santísima virgen: “Madre de Dios” y Auxiliadora de los que sufren.

En el año 1030, en Ucrania, (sur de Rusia) los creyentes proclaman  que la virgen es: “Auxiliadora de los cristianos”, porque los libró milagrosamente de la invasión de la temible  tribu de los salvajes pequeneques. Mientras que en el año 1571, el Papa Pío V manda a poner en las letanías  esta oración: “María Auxiliadora de los cristianos rogad por nosotros”, en acción de gracias porque en la batalla de Lepanto, la Santísima Virgen concedió una maravillosa victoria a los católicos contra los enemigos de la religión.

En 1814 el Papa Pío VII, estando preso en poder de Napoleón, promete a la Santísima Virgen que si lo liberta, declarará fiesta de María Auxiliadora el día que logre llegar libre a Roma. Napoleón es derrotado inesperadamente y el pontífice llega libre a Roma el 24 de Mayo. Desde entonces queda decretado que la fiesta de María Auxiliadora será el 24 de Mayo de cada año.

Posteriormente San Juan Bosco se encargará de difundir la devoción a María Auxiliadora y en 1862 narra que recibió un mensaje del cielo: Que la Santísima Virgen desea ser honrada con el título de “Auxiliadora de los cristianos”. Entre los tres años del 1865 al 1868 levanta el gran templo o Basílica a María Auxiliadora en Turín, Italia. Además Juan Bosco en el año de 1869 publica un libro de los milagros de María Auxiliadora, lo que favorece la difusión y el amor de la madre de Dios a la juventud pobre y desamparada.

 En el año 1872, San Juan Bosco y Santa María Mazzarello fundan la Comunidad de las Hijas de María Auxiliadora, extendiendo esta devoción a 120 países donde actualmente se encuentra la familia salesiana. Convirtiéndose de esta manera en protectora de cada una de las personas que forman parte de la familia salesiana del mundo entero. En esta familia aprendemos a sentir tu ternura de madre, nos sentimos cerca de tu corazón en los momentos difíciles con la esperanza confiada de que intercedas ante tu hijo Jesucristo para nuestra Salvación. Eres especial, eres grande, eres la Auxiliadora de los Cristianos.

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