Gozo fruto

En la Biblia dice que EL ESPIRITU DE DIOS mora en nosotros (Romanos 8:9) y también dice en Génesis 1:2-3 que al principio la tierra estaba desordenada, vacía y en tinieblas. Cuando Dios cambio la condición de esta tierra puso luz, pero con cada cosa que creo, lleno la tierra de colores. Eso no refleja un Dios deprimido. PARA NADA. Dios fue creativo y lleno el mundo de color expresado en cada una de sus creaciones (un cielo azul, arenas doradas, atardeceres naranja, rojo, lila, pastos verdes, etc., etc.). Luego, (Génesis 9:13) cuando Dios hace pacto con el hombre, le regala el arcoíris… ah! Que belleza. Un Dios que muestra gozo con su creación de muchas maneras. De la misma manera, su espíritu que mora en nosotros tiene muchas maneras de mostrar su gozo. Ahora, imagina que tienes la oportunidad de darle un regalo a Dios, qué le darías? Dios lo hizo todo, así que prácticamente EL lo tiene todo. Y cómo es que entonces llegaron con regalos los reyes a Belén? Cómo decidieron que llevar? Era Dios con nosotros. Bueno, de los regalos que ellos llevaron, hay algunos que también nosotros le podemos dar. Regalos que no importando nuestra condición económica, condición social, condición legal, edad o género, son valiosos para El. Aparte del oro, incienso y mirra, ellos dieron su esperanza, su tiempo y su adoración. Y se gozaron en SU presencia.

Ese gozo es el que nos servirá en la cosecha de la vida, y creo que es el mismo que Dios sintió cuando cambio la condición del mundo. Repetidas veces leemos “y Dios vio que era bueno” (versículos 4, 10, 12, 17, 21, 25, 31). Al parecer, el Padre sintió placer por lo que Sus manos habían hecho. Ese gozo es una llenura que cuando nosotros la encontramos ya no tenemos que buscar nada que nos haga felices, pues lo tenemos todo. En Lucas 15 1-2 también leemos del gozo de Dios “..¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla? Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso; y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido”El siente GOZO. Queremos ganarnos el título de “cristianos” o seguidores de Cristo, debemos vivir con GOZO. Entonces el gozo debe ser la respuesta de nosotros los cristianos complacidos con el hecho de que nos ha sido dada una preciosa verdad, un regalo y el entendimiento de un camino de vida que trae consigo satisfacción —hoy y siempre.

Cuando mostramos gozo, estamos demostrando seriamente donde están nuestras prioridades. Veamos la parábola del tesoro escondido en el campo: “Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo” (Mateo 13:44). Y Jesús habla del gozo en la parábola del

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