Justificacion Y Gracia

TRABAJO PRÁCTICO Nº 6

RESPUESTAS:

1) La justificación es un acto divino, donde Dios declara al pecador inocente de sus pecados. Es una acción legal en la que Dios declara justo al pecador, como si hubiese satisfecho la ley de Dios.

Esta justificación está basada completamente en el sacrificio de Cristo al derramar su sangre.

La justificación es un don dado por gracia, que viene a través de la fe. Los cristianos recibimos a Jesus y ponemos nuestra fe completa en El y en lo que hizo en la cruz y de esa forma somos justificados.

La justificación es la obra más excelente del amor de Dios.

2) Se llama gracia, al don divino que permite acoger la revelación en la fe. Es uno de los dones con los que Dios cubrió a nuestros primeros padres y que caracterizaban aquel estado inicial de comunión íntima con El. A través de la gracia, Dios saca bien del mal.

Por el don de la gracia, el hombre es llamado a una alianza con su creador, a ofrecerle una respuesta de fe y de amor que ningún otro ser puede dar en su lugar.

La gracia es un don recibido en el Bautismo que borra el pecado original y devuelve el hombre a Dios. Es el don de Cristo que el Espíritu Santo distribuye en los sacramentos.

Por la gracia somos salvados y por ella, nuestras obras pueden dar fruto para la vida eterna.

3) El mérito es lo que da derecho a la recompensa por una obra buena.

Respecto a Dios, el hombre no puede merecer nada, habiendo recibido todo gratuitamente de Él. Sin embargo, Dios da al hombre la posibilidad de adquirir méritos, mediante la unión a la caridad de Cristo, fuente de nuestros méritos ante Dios.

Por eso, los méritos de las buenas obras deben ser atribuidos primero a la gracia de Dios y después a la libre voluntad del hombre.

4) La santidad cristiana es aquel estado en el cual el hombre, habiendo alcanzado la plena conformación con Cristo, vive la caridad de manera perfecta bajo la guía del Espíritu Santo.

Para alcanzar esta perfección, los creyentes han de emplear sus fuerzas, según la medida del don de Cristo, para entregarse totalmente a la gloria de Dios y al servicio del prójimo. Lo harán siguiendo las huellas de Cristo, haciéndose conformes a su imagen y siendo obedientes en todo a la voluntad del Padre. De esta manera, la santidad del Pueblo de Dios producirá frutos abundantes, como lo muestra en la historia de la iglesia la vida de los santos.

5)La Iglesia es nuestra madre y educadora, porque ella es madre de la fe, porque en ella nos engendra, a la vez que procura nuestro bien, no solo en esta vida, sino también en la otra.

Educadora, porque nos guía

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