LIBRO DE ORACIONES DE LA ROSA MISTICA
Ariam MusicAngelApuntes26 de Septiembre de 2018
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Rosa Mística
"Soy la Madre de Jesús y madre de todos vosotros"
"Nuestro Señor me envió para implantar una nueva devoción Mariana en todos los institutos, tanto masculinos como femeninos, en las comunidades religiosas y en todos los sacerdotes.
Yo les prometo que si me veneran de esta manera especial, gozarán particularmente de mi protección, habrá un florecimiento de vocaciones religiosas.
Deseo que el día 13 de cada mes se me consagre como día Mariano y los doce precedentes sirvan de preparación con oraciones especiales."
"En ese día derramaré sobreabundancia de gracias y santidad sobre quienes así me hubiesen honrado. Deseo que el 13 de julio de cada año sea dedicado en honor de Rosa Mística".
“Al final de esta semana de intensa oración y reflexión, siento la necesidad de dar gracias al Señor por haber podido permanecer en prolongado e íntimo coloquio con Él”.
San Juan Pablo II
Capilla Redemptoris Mater
Sábado 15 de Marzo del 2003
“La oración nos cambia el corazón. Nos hace comprender mejor cómo es nuestro Dios. Pero para esto es importante hablar con el Señor, no con palabras vacías. Jesús dice: ‘Como hacen los paganos’. No, no, hablar con la realidad”
S.S Francisco
Capilla de la Casa Santa Marta
3 de Abril del 2014
Carísimos Hijos Consagrados de Rosa Mística, Servidores del Señor: el cielo se alegra con el Sí que has decidido darle al Señor para servir en la evangelización de las gentes y servir a Cristo en el más necesitado para mayor Gloria del Padre Celestial; abramos paso en nuestro corazón al pedido de Nuestra Madre Rosa Mística y que a ejemplo de nuestro Señor nos invita incesantemente a la oración.
Toma humildemente este pequeño modelo para que alegres el corazón de nuestra Madre y al Padre Celestial, siguiendo estos textos y modos de oración que proponemos para ti, un Consagrado de la Rosa Mística.
LA ORACIÓN.
“Y alzando los ojos al cielo, dijo” Jn17.1
“Y yo pediré al Padre y os dará otro paráclito, para que esté con vosotros para siempre, el Espíritu de la verdad”. Jn 14.16
“Y puesto en oración se abrió el cielo” Lc 3.21
“Sucedió que por aquellos días se fue al monte a orar, y se pasó la noche en la oración de Dios”. Lc 6.12
“Y sucedió que, mientras oraba, el aspecto de su rostro se mudó”. Lc 9.29
“Pero yo he rogado por ti para que tu fe no desfallezca”. Lc 22.32
“Y sucedió que estando Él orando en cierto lugar…cuando oreís decid”. Lc 11, 1-2
“Se levantó, salió y fue a un lugar solitario y allí se puedo a hacer oración”. Mc 1.35
“Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración, y lo obtendrán. Mc 11.24
“Y al orar, no hablen sólo por hablar como hacen los gentiles, porque ellos e imaginan que serán escuchados por sus muchas palabras”. Mt 6.24
“Pero tú, cuando te pongas a orar, entra en tu cuarto, cierra la puerta y ora a tu Padre, que está en lo secreto. Así tú Padre, que ve lo que se hace en secreto, te recompensará”. Mt 6.6
“Velad y orad para que no caigan en tentación”. Mt 26.41
“Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús”. 1Tes 5,16-18
Esto hace nuestro Maestro el Gran Servidor. Nos enseña que en la oración, Él, elevaba su corazón, su alma, su conciencia y su espíritu a Dios, y en este medio obtenía la conexión total con su Divina Presencia, y que este es el medio más eficaz para obtener los favores de la Divina Providencia de Dios. Dios escucha las oraciones que emanan de un corazón contrito, humilde y sincero.
Debes orar con frecuencia “Dando gracias continuamente y por todo a Dios Padre, en nombre de nuestro Señor Jesucristo” Ef. 5.20. Recordad que la mejor oración es hacer la voluntad del que os creó.
Puedes hacer vuestra oración interior, aquella muy personal y llena de la pureza del corazón que es más fuerte y eficaz que las muchas palabras que puedas expresar. “Sed perseverantes en la oración, velando en ella con acción de gracias”. Col. 4.2
Puedes hacer tú oración exterior, pero que, aún mas allá de las Palabras de vuestro labios, es el evangelio de tú testimonio de vida que lee la gente hoy, es decir, el amor que das a todos los hombres y tu servicio al que más lo necesita.
Que cada instante de tu vida y de tu servicio sea dedicado como ofrenda de amor a Cristo. Fortaleciendo tú vida en la oración diaria, esta, se convierta en la voluntad del Padre que unida a la tuya, sea la entrega abnegada del amor, la Palabra y el trabajo.
Jamás reniegues de la misericordia y la providencia de Dios. Por más amargas y duras que sean tus tribulaciones y dolores como consecuencia de tus faltas, o de los afanes de la vanidad y la codicia humana. Más bien entrégate en sacrificio como ofrenda de amor por los pecados propios y los del mundo entero en especial de toda la Iglesia y sus Ministros Ordenados.
No te alejes de la oración, ni de tus hermanos, esperando con firmeza y paciencia, la respuesta siempre misericordiosa del Señor que ya llega.
Recuerda su amantísima promesa:
“Pide y se te dará, busca y encontrarás, llama y se te abrirá, porque todo el que pide recibe, el que busca encuentra y el que llama se le abre”. Mt 7, 7-8
“Y si sabemos que nos escuchan lo que le pedimos, sabemos que tenemos que conseguido lo que le hayamos pedido”. 1Jn 5.15
ORACIONES DIARIAS.
Hijo Consagrado, a ejemplo de la intercesión de nuestra Madre Rosa Mística y de Nuestro Señor Jesucristo que oraba siempre al Padre del Cielo, imita tú sus ejemplos y también haz oración para que en ella encuentres la fortaleza y el ánimo para seguir este camino que has decidido emprender en la evangelización y el servicio de Cristo sufriente y humano.
La oración continua encontradla en la Palabra de Dios de cada día y si quieres, haz oración en la mañana al levantarte y al comenzar la jornada.
Da la Gloria y la Alabanza al buen Dios; Ora por la Santa Iglesia Católica, por el Papa, por los sacerdotes, por tu comunidad Rio Poderoso y por las necesidades del mundo. Y en la tarde, al terminar el día, ora para entregar en ofrenda los frutos de la evangelización y el servicio al Señor. Ora siempre antes y después de evangelizar y servir. Antes y después de tomar tus alimentos.
El Santo Rosario es un arma poderosa para hacerte crecer en santidad, y afinar tus sentidos, que pasando de la oración vocal, os lleva a la meditación, para que colmados del Espíritu alcancéis la contemplación del Dios que te ama con predilección.
Dijo Rosa Mística a Pierina Gilli: “Hija, mira aquí el Santo Rosario! Todos los que lo recen recibirán infinidad de gracias. El rosario establece una fuerte unión con mi Corazón y glorifica al Señor de los cielos y del Universo. Insta a todos los que me aman, que reparen los agravios que se infieren a mi Divino Hijo Jesucristo. Hijos míos, amaos mutuamente… haced sacrificios por amor. La oración es el amor que sube al cielo. Ojalá todos mis hijos comprendan mi deseo para cumplirlo. La bendición del Señor descienda sobre todos!".
La Madre Iglesia también te da un ritmo muy fuerte con su ciclo litúrgico y el caminar de sus fiestas y devociones particulares. (Novenas, coronillas, jaculatorias, Vía crucis, Vía lucis, el saludo Angélico, entre otros) que te ayudan a crecer en oración, penitencia y sacrificio como ejercicios espirituales de piedad.
La fuente inagotable de amor y de gracia es la Santa Eucaristía de cada día, y especialmente la dominical. No hay mayor delicia que el manjar del cielo; el cuerpo y la sangre, el alma y la divinidad del Dios vivo y presente en la Sagrada Hostia que te convoca a evangelizar y servir; guarda silencio durante su celebración y participa con fe y alegría en el Milagro que Dios nos regala cada vez; no te atrevas jamás a abandonar el templo en cualquier momento puesto que le das la espalda al mismo Dios presente en el sacerdote, en el altar y los pueblo santo de Dios que celebra el gran misterio de la redención, que es para todos motivo de salvación o de juicio según nuestros actos.
Abre tu corazón y disponlo para que el Espíritu Santo te conduzca por los caminos que el disponga y de la manera que Él quiera para que siendo un servidor carismático puedas desarrollar tu plena conciencia en Dios y en el Servicio a los demás; Dios que conoce plenamente la determinación de tu corazón y esa particular forma de entregarte a Él en la oración y el servicio.
Acepta el pedido del Señor
“Velad una hora conmigo” Mt 26.40. La Dulce adoración Eucarística ante el Santísimo sea el pilar de nuestra oración en comunidad. ¿Cuánto debes orar? ¿Cuánto quieres orar? Pide al buen Dios que el Santo Espíritu te inspire siempre a orar, y os envíe la compañía de la Rosita Mística, de los Santos y de las legiones de ángeles para que ellos sean el eco de tu oración.
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