ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Pedir Ayuda


Enviado por   •  5 de Marzo de 2015  •  421 Palabras (2 Páginas)  •  178 Visitas

Página 1 de 2

Desde época colonial la inserción de América Latina en la economía y el comercio mundiales siempre estuvo determinada por unas palmarias relaciones centro-periferia sobre las que no es necesario insistir demasiado. Su estructura productiva se organizaba conforme a lo que demandaba la metrópoli sin que importara la sobreexplotación o los desequilibrios ambientales, sociales y territoriales. La conquista de españoles y portugueses introdujo ritmos de trabajo y técnicas que posibilitaban el expolio de las riquezas naturales sin más límite que la voracidad del mercado, hasta el punto de acercarse peligrosamente incluso al exterminio del elemento más valioso de la naturaleza latinoamericana: el hombre amerindio.

El intercambio desigual implica el sometimiento de la economía de los países latinoamericanos a los dictámenes del modo de producción capitalista, que se apropia de todos los recursos naturales que le son necesarios para rentabilizar el capital invertido, tanto en los países centrales como en la periferia. Dicho proceso se acentuó a partir del final de la Segunda Guerra Mundial, cuando la expansión del capital transnacional subordinó a sí mismo los recursos mineros, agropecuarios y forestales del mundo subdesarrollado, aunque ello supusiera como condición previa el control político, económico, financiero e incluso militar de los países que los poseían. La explotación masiva de estos recursos sólo persigue la máxima rentabilidad inmediata aun a costa de provocar graves desequilibrios ecológicos o la simple destrucción del medio.

Un fenómeno clave en el proceso mencionado fue sin duda el inicio de la revolución verde en los países latinoamericanos durante las décadas de los años cincuenta y sesenta, pues los profundos cambios producidos en los sectores agropecuarios de la región constituyeron hasta el día de hoy un foco fundamental de degradación ambiental, toda vez que el modelo agrario impuesto, basado en la intensificación productiva mediante la utilización masiva de tecnologías modernas, es sustentado por varios pilares: el riego, la mecanización, el uso de enmiendas y abonos químicos, la bioingeniería genética y el empleo de productos fitosanitarios. Según M. Piña (2000), es así como la revolución verde integra la actividad agraria latinoamericana en los métodos intensivos de producción y en las corporaciones transnacionales de Estados Unidos, ya que los medios de producción o insumos debían ser importados del mercado norteamericano. A partir de este momento la agricultura comienza a albergar relaciones de producción y trabajo y pautas de desarrollo, basadas en el aumento de su rentabilidad, semejantes en cualquier caso a las que imperan en la gran industria capitalista, hecho que no sólo provoca la esquilmación de la tierra, sino también la del trabajador agrícola.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (2.8 Kb)  
Leer 1 página más »
Disponible sólo en Clubensayos.com