Sintesis Vida de Fray Mamerto Esquiú
Enviado por Virdelgado • 26 de Noviembre de 2020 • Biografías • 552 Palabras (3 Páginas) • 569 Visitas
VIDA DE FRAY MAMERTO ESQUIÚ
Fray Mamerto de la Ascensión Esquiú nació el 11 de mayo de 1826 en un lugar llamado La Callecita, ubicado en la localidad de San José de Piedra Blanca (Catamarca). Sus padres eran Santiago Esquiú y María de las Nieves Medina, humildes trabajadores y fervientes cristianos, también tenía cinco hermanos: Rosa, Odorico, Marcelina, Justa y Josefa.
Al nacer Mamerto se encontraba muy delicado de salud, por ello sus padres decidieron bautizarlo de urgencia, su madre hizo la promesa de que si su hijo mejoraba vestiría el sayal franciscano, y así fue, lo usó desde los cinco años hasta su muerte.
Cuando aprendió a leer, compartía con sus padres y hermanos la lectura de las Sagradas Escrituras y la vida de los santos. A los ocho años comenzó a estudiar latín con Fray Ramón de la Quintana y a los diez años ingresó como frailito en el convento de San Francisco, días después de la muerte de su madre, y a los 19 años parte hacía la casa de Dios su Padre Santiago.
En 1843 terminó sus estudios de Teología y se dedicó a enseñar a niños y catedráticos en el Convento.
Interrumpió sus tareas docentes, 18 de Octubre de 1848, a los 22 años, para viajar a San Juan donde fue ordenado sacerdote por el Obispo de Cuyo Dr. Eufrasio Quiroga Sarmiento. El 15 de mayo de 1849 celebró su primera Misa. Esquiú fue un sacerdote ejemplar, tuvo un celo apostólico y un gran amor por todas aquellas almas que Dios le confió.
El 9 de Julio de 1853 en la Catedral Basílica Mamerto predicaba sobre la reciente Constitución Nacional, sus firmes palabras y su convicción aportaron y permitieron comenzar una nueva etapa en la historia Argentina. Por este Sermón es conocido como “el orador de la Constitución”.
En 1876 viaja a Roma, lo que le permitió visitar Tierra Santa. Al llegar lo primero que hizo fue arrodillarse y besar la tierra que alguna vez fue caminada por Cristo.
En 1881 fue consagrado Obispo de Córdoba, y, a pesar de que se sentía indigno para ello, acepto por obediencia a la Santa Sede. Mamerto fue un incansable Pastor de la Iglesia, conocía las carencias materiales y espirituales de sus hijos y brindaba toda su ayuda como le era posible, visitaba pueblos del interior de Córdoba en caballo, tren, mula y hasta a veces caminando para llevar a Cristo.
Murió el 10 de enero de 1883, a los 56 años, viajando de regreso a Catamarca, en un pueblo llamado “Posta del Suncho”. Todo el país lloró su partida.
Su hermano Odorico llevó el corazón de su hermano al Convento de San Francisco en la provincia de Catamarca, allí estuvo conservado durante casi 135 años, hasta enero de 2008 que fue robado y lamentablemente nunca más encontrado.
En 2005 fue declaro Siervo de Dios y en 2006 Venerable, por el Papa Benedicto VXI.
En noviembre de 2019 se comunicó el primer milagro comprobado de Fray Mamerto Esquiú, una niña recién nacida en la provincia de Tucumán fue diagnosticada con osteomielitis, la madre le rezaba a Fray Esquiú por su intercesión mientras le pasaba una estampita y una reliquia del Fraile sobre la pierna afectada de su hija, días después descubren la milagrosa curación de la pequeña.
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