ADMINISTRACIÓN DE PROYECTOS. GESTIÓN DE PROYECTO

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ADMINISTACIÓN DE PROYECTOS

JAIME BROCHERO E.

GESTIÓN DE PROYECTO

DOCENTE

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UNIVERSIDAD SIMÓN BOLIVAR

MARZO 7 DEL 2017

BARRANQUILLA

ADMINISTRACIÓN DE PROYECTOS

La administración de proyectos es un sistema que impulsa a las organizaciones a obtener los resultados deseados mediante la aplicación de conocimientos, herramientas y técnicas para alcanzar la eficiencia en las organizaciones. Esta metodología permite asociar el rendimiento de los proyectos con las metas del negocio y generar mayor competencia en el sector en el que la empresa se desenvuelve. Este sistema ayuda a evitar los procesos repetitivos en las empresas con el propósito de alcanzar el conjunto de metas planteadas.

La administración de proyectos cuenta con una serie de elementos que nos permiten cumplir de una manera más fácil y eficaz el plan establecido. Tales elementos son:

• Inicio del proyecto: objetivos establecidos del proyecto e inicialización del mismo.
• Planificación: alcance del proyecto, ajuste de objetivos específicos y a su vez se establece el curso de acción para alcanzarlos dichos objetivos.
• Ejecución del plan.
• Seguimiento del plan: análisis y regulación del proyecto. En esta etapa si evalúa si es necesario realizar mejoras o cambios al plan de ejecución.
• Liberación del ciclo operativo: cierre formal del proyecto y medición de resultados del plan de ejecución.

Para empezar, un proyecto nace a través de la necesidad de un sector, por la demanda establecida por los clientes, por necesidades intrínsecas de la organización, peticiones legales o normativas y en muchas ocasiones por el crecimiento del desarrollo tecnológico. Para llevar a cabo este procedimiento es necesario tener claro aspectos claves como: ¿A dónde se quiere llegar como organización?, ¿Cuál es la visión de la empresa?, ¿Cuáles son los resultados estratégicos de la empresa?, ¿Con que recursos se cuenta para alcanzar dichos objetivos?, entre otros.

Por consiguiente, resulta imprescindible mantener como líder a un buen administrador de proyectos que realice una adecuada programación y planeación para que la empresa pueda alcanzar los objetivos fijados y cumplir con la visión establecida. El administrador del proyecto debe mantener en constante evaluación los resultados del negocio, los cuales deben encontrarse alineados con las operaciones que realiza día tras día la empresa. Este agente también debe tener en todo momento en cuenta los recursos que posee, tales como el tiempo, los materiales, el capital, los recursos humanos y la tecnología.

Por otro lado, se deben tener presentes los condicionantes internos y externos del proyecto, aprovechando las herramientas, elementos y adaptación al cambio que brinda el entorno. Los avances tecnológicos, la necesidad de innovar para obtener nuevos productos con propuestas de valor llamativas para los clientes, las cambiantes exigencias de los consumidores, entre otras, aumentan la fluidez de las operaciones de la organización que exigen salir de las prácticas convencionales, generando nuevos planes de ejecución (proyectos). Por tal motivo, la administración de proyectos es sumamente trascendental, puesto que propone novedosas alternativas a la empresa.  

En pocas palabras, para una empresa una adecuada administración de proyecto es la ficha clave para ayudar al crecimiento y fortalecimiento de los productos o servicios que la organización brinde a sus consumidores, sin dejar a un lado el entorno constantemente cambiante al que se ven  enfrentadas las empresas como lo son los aspectos económicos, políticos, sociales y tecnológicos.

 En el lapso de tiempo estipulado por el proyecto se deben alcanzar los objetivos específicos de la organización, para así poder medir el éxito de dicha administración.

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